La Chica Fantasma | KTH Y Tú (Editando)

¿Me hablas a mi?

Bueno... Ahora que ya sabéis como morí, me centraré en la actualidad. Tal vez ser un fantasma no está tan mal, no tengo que ir al colegio, no tengo que preocuparme por la comida o por el dinero, puedo ir a donde quiera cuando quiera. 

Lo único que no me gusta de ser fantasma es que estoy sola... No tengo a nadie con quien hablar, estoy sola. A veces he fingido una conversación con las personas,iba bien, hasta que no me contestaban... 

Pues claro, ¿en qué pensaba? 

No me ven... nadie lo hace. 

Me encontraba sentada en un banco del parque viendo a los niños pequeños jugar, o los adultos hablando por teléfono o haciendo cualquier cosa, como siempre...

Todo esto es tan aburrido, a veces quiero que pase algo, que pase algo especial... No sé si me entendéis, pero es muy aburrido ver lo de siempre todos los días.

Seguía pensando hasta que alguien me saca de mis pensamientos:

XXX: Hola, ¿estás bien? te ves un poco triste.

No le dí importancia ya que creía que le estaba hablando a alguien más. Por curiosidad, miré hacia arriba y vi a un chico... no sé como describirlo, con adjetivos como hermoso me quedo corta, era como un ángel. Un ángel que no sabe que existo, ni siquiera me ve, así que porque me ilusiono.

XXX: ¿Estás bien? -volvió a preguntar con una sonrisa-

Vi que de verdad me estaba hablando a mi, espera... ¿a mi? Giro mi cabeza y miro atrás pero no hay nadie. Vuelvo a ver al chico y le dije.

- Perdona, ¿me hablas a mi? -pregunté confusa-

XXX: Claro, ¿a quién va a ser sino? ¿Al árbol de atrás? -empezó a reírse un poco-

- Pues sí, si superas la cantidad de gente que he visto hablarle a un árbol -me empecé a reír, el chico me contagió su risa-

XXX: Jaja, que graciosa eres, ah por cierto, no nos hemos presentado. Me llamo Taehyung, Kim Taehyung. Pero puedes llamarme Tae. -se presentó con una sonrisa y levantando la mano esperando un apretón de manos.

- Encantada de conocerte, Tae. Me llamo T/N, Lee T/N. -estiré mi mano y ambos dimos una reverencia.

Tae: Bueno, parece que te animé.

- ¿Como dices? -pregunté curiosa-

Tae: Antes estabas triste, ¿puedo preguntar por qué?

- Ah eso... pues, es que extrañaba a mi familia -mentí, también los echaba de menos pero en ese momento estaba triste porque estaba sola.

Tae: ¿Tu familia? -preguntó-  ¿Por qué no los visitas?

-Es complicado -suspiré-

Tae: Bueno... te he animado una vez, puedo hacerlo otra vez. ¿Por qué no vamos a tomar algo y charlamos un poco?

-Claro, me encantaría -dije sin preocuparme porque parece una buena persona y además no podrá hacerme nada puesto que soy un fantasma.

Una vez llegamos, nos sentamos y pedimos unos cafés y unos dulces. Charlamos durante mucho tiempo y nos hicimos amigos. Él accedió a pagar y menos mal porque no tenía dinero. Le conté muchas cosas un poco mas creíble y que no tenía donde ir. Así que me invitó a quedarme en su casa por unos meses. Perfecto, pensé, así podré descubrir como me ve.

Tae: Ja ja, la camarera te ignoró por completo.

-Emm, sí, ja ja. 

Íbamos dando un paseo hasta que Tae se detiene y dice:

Tae: Hemos llegado, bienvenida a mi casa. -dejándome paso libre para ver la casa-

Guau, es una mansión, como puede vivir aquí él solo, ¿no se siente sólo?

-Guau, que bonita. ¿No es muy grande para ti solo?

Tae: ¿Quién ha dicho que vivo solo? 

- ¿A no?

Tae: Ven, te presentaré a mis amigos.