¡Cataclismo!『ᴛᴇʀᴍɪɴᴀᴅᴀ』

V

-¡Cataclismo!-

El día que se presentó durante la mañana era tan brillante, bello simplemente hermoso te daba la impresión de que hoy sería el mejor día de todos...más sin en cambio para estas horas daba una vista totalmente diferente.

El cielo era rojo mientras un hermoso eclipse abrazaba a París durante la puesta de sol más hermosa que jamás en la vida se había visto sin en cambio eran tan catastrófica al mismo tiempo porque este solamente era el inicio del momento exacto en el que la humanidad perdería la vida para siempre.

Este momento será legendario y jamás olvidado porque es el momento en el que el mal le ganó al bien. Los villanos se regozijaran esta noche por obtener la victoria mientras que lo héroes lloraran la perdida.

Todo se acabó. La batalla dió un vencedor.

El cielo tronaba con furia, las nubes eran tan grises que hacían un contraste que daba similitud al infierno. La lluvia caía con fuerza, el piso de las calles de París se inundaron de un color rojo sangre por el reflejo de los pocos rayos rojos que daban contra el piso ocasionados por el eclipse.

Howt Moth caminaba con altanería hacia aquel pequeño y largo pasillo que lo llevaba al cuerpo de su difunta esposa. En sus manos llevaba ambos miraculous que separados representaban el equilibrio cósmico más hermoso del mundo.

Volpina y Mayura veían todo desde lejos, Mayura sonreía enternecida por la escena próxima a ver. Anhelaba ver aquella escena tan esperada, finalmente volvería a ver a su jefe feliz. Y eso, es lo único que le importaba en estos momentos. Porque la felicidad de su amor platónico era más importante que la de ella y lo obtendría sin importar las consecuencias. Por otro lado Volpina tenía cierta insertidumbre por lo que podría pasar. Su instinto le decía que algo malo sucedería más sin en cambio la ambición del poder hizo callar a su lado racional.

El tiempo de transformación llegó a su fin. Howt Moth volvió a ser una persona, el traje de super héroe desapareció mostrando así aún hombre alto con traje formal era aquella persona reconocida por todo París como el hombre de la moda Gabriel Agreste.

Volpina no salía de su asombro. La abrumacion provocó que casi todo su cuerpo se congelará el hombre que estaba frente a ella había lastimado a su propio hijo. Estaba a punto de correr a detenerlo se dió cuenta demasiado tarde que aquella persona no era de confianza, tristemente no pudo hacer nada Mayura la desmayo, gastando así la poca energía que le quedaba.

Gabriel paró frente al cuerpo inerte de su esposa. La veía con amor, anhelo reflejaban sus ojos, a partir de este momento nada más importo.

Tomo la caja que alguna vez salvaguardo los miraculous, tocó todos los botones a la vez, formando así un pentagrama que se volvió igual de delgado que una alfombra. Gabriel se paró sobre esta con ambos miraculous en las manos. Primero se puso los aretes dando vida nuevamente a Tikki quien se encontraba abrumada de ver finalmente a aquel enemigo que logró ganar esta batalla, Tikki solamente atino a bajar la cabeza a manera de derrota. Finalmente se puso el anillo de plagg. Plagg por su parte hizo un escándalo quería huir, más sin en cambio estaba dentro del pentagrama cuando un rito daba inicio era imposible salir de allí.

Aquel capaz de invocar muertos.

Gabriel grito con fuerza-Tikki motas, Plagg las garras-grito con fuerza uno tras otro.

Tikki y Plagg se veían mutuamente antes de ser funcionado. Ambos susurraron tímidamente "nos volveremos a encontrar". La función de estas dos hermosas criaturas solamente podía significar algo.

Caos.

Una cúpula de ambos colores en plena combinación, fue desapareciendo lentamente. Gabriel fue transportado a un lugar que se encontraba dividido en dos tonalidades blanco y negro. Frente a él había un hombre que fácilmente pudiera ser descrito como el Nirvana. Tan calmado.

Gabriel lo vio fijamente. Este hombre lo comprendió todo.

Extendió su mano ofreciéndole al hombre que tenía enfrente el tan anhelado deseo que pidió y por el que lucho tanto. Gabriel lo tomo con felicidad, lo que le ofrecía este hombre era un frasquito.

Pero antes de que la mano de Gabriel llegará a tan anhelada poscion el hombre cerró el puño.

-¿Qué objeto de valor me ofreces a cambio de esto?-menciono mientras analizaba al hombre frente a el- tiene aue ser algo que contenga el mismo valor que lo que te daré a cambio o si no, la humanidad correrá peligro-finalizo esto mientras ponía en frasco frente a su cara.

Gabriel quedó congelado. Su deseo desde siempre fue egoísta, siempre fue consciente de ello más sin en cambio lo que estaba a punto de hacer sobrepasaba el límite de la descencia.

-Te ofrezco a mi hijo-finalizo mientras extendía la mano para obtener dicho frasco.

El hombre sonrió. Cerró el trato dándole la posion al hombre.

Gabriel volvió a la normalidad, a su mundo no tenía ningún miraculous y la caja que antes fue utilizada para aquel rito tampoco se encontraba.

Camino con tranquilidad hasta el cuerpo de su esposa. Vertió el líquido viscoso sobre sus labios.

Pasaron dos torturosos segundos y su esposa que alguna vez estuvo muerta. Abrió los ojos lentamente, observó a su esposo y este solamente atino a esquivar la mirada de aquella mujer que tanto se esforzó en volver a tener entre sus brazos.

Emily comprendió que su esposo tuvo que dar algo significativo y su mundo se vino a bajo cuando notó lo que tuvo que dar.

Porque ya no era ella quien se encontraba dormida en una tumba de cristal. Era ahora su único hijo que tuvo.

💚💚💚

Marinette y Adrien se encontraban aún abrazos hasta que lentamente el cuerpo de Adrien comenzó a desaparecer.

-Adrien-exclamo Marinette entre hipidos-¿Qué sucede?-hipo-No me dejes, Adrien por favor-suplico entre alaridos la joven peliazul.

Adrien por su parte comenzaba a nublarsele la vista. La memoria comenzaba a fallarle muchos recuerdos estaban comenzando a borrarse. Más sin en cambio aún recordaba el nombre de Marinette.

Recuerda perfectamente como la chica que tiene enfrente comenzó a desvanecerse con lentitud siguiéndole el paso. Aún era levemente conciente que ella era Marinette.

-Nos volveremos a encontrar Marinette-dijo esto mientras desaparecía-Te amo mi lady-susurro para finalmente desaparecer.

Marinette por su parte desapareció entre lágrimas mientras sostenía con fuerza su pecho sentía como un gran hoyo comenzaba a traspasar su corazón.

El clima empeoró con esto. La naturaleza enfureció. Una fuerte tormenta con rayos comenzó a caer por todo París, las placas tectónicas de París se comenzaron a separar ocasionando un temblor.

La ciudad de París pago las consecuencias de un cruel tirano.

Porque ellos no nacieron por azares del destino. Nacieron para ser el equilibrio de este mundo. Tanto era así su destino que su muerte provocó un cataclismo.

- Fin-