Solo fueron siete años

Bienvenido a Fairy Tail

- ¡Nadie se preocupa por mi !, - interrumpió el pequeño bajando la mirada y su brazo. - Soy un huérfano mas en ese sitio, no soy nada importante igual no pensaba quedarme ahí para siempre.

Lo miro apenada y recordó cuando los vio en aquella banca desprotegidos, no podía dejar que volvieran a pasar eso.

- A mi me preocupas - dijo tomando su mano lo que soprendio al pequeño - Me.preocupan loa dos y mucho- aseguro sonriendo, cosa que al verla lo hizo sonrojar. - Y me asegurare que todo este bien.

Las mejillas del rubio se tornaron aun mas rojas y sintió como algo cálido se apoderaba de su pecho, porque algo le decía, que esas eran las palabras mas sinceras que escuchaba hace mucho tiempo y en verdad, en verdad se sentían muy bien.

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Salio con la cabeza algo baja de la enfermería podía sentir la mirada de todos los presentes enfocarse en el y eso lo hizo sonrojar un poco, quizá, si aparentaba estar bien y tranquilo y no lo notaran pero, ¿como no hacerlo?, sin duda debió haber quedado en ridículo ante todos al ser noqueado de un solo golpe por parte del cazador de dragones de cabellera rosa, se sentía un debilucho luego de caer de tal manera, mas por que Lector lo viera de esa forma aunque a su amigo parecía que aquello no le había importado mucho.

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El pequeño felino despertó de su sueño y alzo la vista encontrándose con el pequeño rubio ya despierto en la cama, inmediatamente sus ojos se llenaron de lagrimas y lo abrazo con fuerza sin pensarlo ni un instante.

- ¡Sting-kun! estas bien, estaba muy preocupado por ti. - dijo sin dejar de llorar.

-Lector...- el pequeño se sorprendio por su acción para después bajar la mirada, no se sentía capaz de verlo a los ojos. Lo sentía mucho, le había fallado por completo, quedo como un tonto con todos pero mas con la maga que le había abierto las puertas de aquel lugar y a el, su mejor amigo, a el le prometió vencer a Salamander y no solo quedo noqueado -Lector yo...

-¡¡¡Eso fue asombroso Sting-kun!!!- dijo el felino aun sin soltarlo con una sonrisa en su rostro dejándolo anonadado -Si que peleaste muy duro, te has vuelto realmente fuerte.

-Pero...yo no gane. - no entendía el porque de su actitud

-Eso no tiene que ver, ese mago es mucho mas grande que tu y aun así le hiciste pelea, ¡lo golpeaste increíble! nadie se lo esperaba, los dejaste con la boca abierta, estoy seguro que en un tiempo mas de entrenamiento Sting-kun le ganara a el y a todos los demás, no tengo duda de eso.

-Lector...- sintió como sus ojos se humedecían un poco y sonrió asintiendo mientras tocaba la cabeza de su amigo - Ya veras que sera así.

...

al menos se sentía un poco mas tranquilo, pero era difícil no tener nervios al estar en aquel lugar, había escuchado cosas increíbles y fantasticas de aquel gremio que aun no creía que estaba en el, aunque no era para nada como se lo esperaba sabia que estaba lleno de magos muy fuertes y el ya había quedado como un debilucho frente a ellos.

Aunque el ambiente en aquel lugar parecía muy relajado, todos estaban bebiendo y charlando animados como si nada hubiera pasado hace un rato, aquello le parecía extraño, creía que tal vez estarían molestos o algo así.

-¡Oye! pero si es el pequeño dragoncillo- dijo cana desde su lugar con un barril de cerveza en las manos, al escucharla todos se voltearon a verlo.