3. La fiesta

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Rogers iba a celebrar su cumpleaños número 25 en todo lo alto. Invitó a grandes funcionarios del gobierno, intelectuales y gente del cine, pero no porque fuera a convivir con ellos, simplemente que sabía que tenerlos ahí en la mansión de Malibú era mercadotecnia gratis para sus empresas y su imagen (principalmente).

Encargó bebidas como para festejar una semana entera y comida para alimentar casi toda una ciudad. No escatimó en gastos.
El despilfarro de dinero se fue especialmente en los adornos de la casa y en presentes para los que asistieran a la fiesta. Steve contrató al mejor DJ del país, pero a última hora éste se reportó enfermo y recomendó a una chica nueva del medio que emergía de los barrios populares de la zona con los mejores comentarios.

Al principio dudó, pero viniendo la recomendación de DJ Zemo, aceptó contratarla con la consigna de que si le agradaba su trabajo, la seguiría contratando para eventos venideros; y si fuera el caso contrario, haría hasta lo imposible para hundirla para que jamás volviera a tocar en reuniones de ninguna clase.

La fiesta dio inicio a las 5 de la tarde con los personajes de la política y la farándula (en realidad los había invitado temprano para que se fueran lo más pronto posible y después se quedaran aquellos más allegados y que siempre le seguían la corriente hasta el amanecer). Ya bien entrada la noche, Steve bailaba y se emborrachaba en compañía de Bucky y de Sam y de unas 10 chicas que estaban en la misma condición y uno que otro invitado extra.
Luego de un descanso, Tony retomó la música y ponía aquella que estaba de moda, enseguida tomó el micrófono:

-Muy bien gente, ¡¿cómo están?! -gritó para animar a los presentes que contestaron gustosos... claro, con bebidas encima -Hoy es el cumpleaños del hombre más conocido a nivel mundial, el más popular y...
-¡El más guapo, claro! -Steve le arrebató el micrófono de la mano -Gracias linda. Vamos a seguir disfrutando... ¡hay que volvernos locos!
-¡Bien dicho hermano! -gritó Bucky, completamente ebrio y abrazando a 2 chicas que se divertían a expensas de éste
-¡Hasta que amanezca! -dijo Sam desde un sillón, rodeado de mujeres
-Bien, entonces ¿qué tipo de música tienes para amanecerla? Algo sensual, tú sabes, amenizar la noche sin dejar de festejar -preguntó Rogers a Stark apenas audible por el volumen de las notas
-Ok, te recomiendo ésta... -puso Tony reggaetón latino que inmediatamente prendió al festejado y sus invitados
-Vamos a bailar Steve -una rubia se acercó a él moviendo sus caderas al ritmo de la música y lo besó

"¡Ay, por favor! Qué tipa más ridícula... lo que hace el interés y el alcohol", pensó Tony al ver la escena, pero luego se vio sorprendida cuando Steve la invitó también a bailar. En un principio se rehusaba con la excusa de que estaba trabajando, pero Rogers fue tan insistente que tuvo que ceder (además la amenazó con demandarla argumentando que de no hacerlo, incumpliría con el contrato donde decía que hay que complacer al cliente al 100%).

-Te mueves bien, preciosa -decía Steve en el oído de Tony, ahogado en whisky, tratando de seducirla y aprovecharse de su posición

-Tanto tiempo viendo bailar a mis clientes me ha ayudado a hacerlo bien -comentó la chica intentando sonar lo más sincera posible, pues lo único que deseaba era irse ya del evento: estaba cansada, aburrida, hambrienta y detestaba que un niño rico como Rogers obtuviera lo que quisiera solo por poseer dinero

Siempre serás tú (STONY-GENDER)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora