🍃.4.

1.8K 169 8
                                    

Levi Schmitt no podía negar ser el hombre más feliz del mundo en ese momento. Realmente no podía.

¿Quién imaginaria que, luego de haber sido un perdedor la mayor parte de su vida, ahora era uno de los mejores residentes del Grey-Sloan Memorial de Seattle y que además tenía el honor y dicha de despertar algunas mañanas, junto a un modelo de dios griego súper inteligente y excelente ortopedista?

A veces, cuando estaba en la sima de su autoestima, deseaba poder volver a ver a todas esas personas que se burlaron de él y creyeron que sería toda su vida un perdedor y lanzarles a la cara todo lo que había logrado.

Mirenlo ahora, despertando en una lujosa y cómoda cama en un carisimo hotel de Seúl junto a Nico, quien lo rodea con sus fuertes brazos manteniéndolo apretado contra su pecho.

Levi se siente en el paraíso, en esa escena en las historias de la que no quieres salir.

-¿Estás despierto? -pregunta la voz adormilada y ronca de Nico.

-Desde hace sólo unos minutos. -le responde girando en la cama para poder estar cara a cara.

-Buenos días. -saluda Nico sonriendo suavemente cuando ve a su pareja, quien se acerca y le deja un pequeño beso fugaz como saludo.

-Buenos días. -le regresa Levi cuando se separa. Realmente nunca imaginó todo aquello de una manera tan perfecta.

Estirándose y saliendo primero de la cama, Nico busca en sus cosas algunas prendas de ropa para cambiarse luego de tomar una ducha.

-Mamá a pedido verme antes de la reunión familiar ¿Estarás bien solo? -se gira para ver a Levi, quien se estira sobre la cama para alcanzar los lentes en la mesa de noche. Las cobijas se deslizan de su torso y le dan a Nico una primera plana de todo lo que hicieron anoche.

El azabache hace un sonido que sale desde el fondo de su garganta y piensa que su madre puede esperar unos minutos más mientras él remarca las mordidas y chupetones en el cuerpo de su novio.

-No te preocupes, contacte con una vieja amiga de la universidad. No vive muy lejos de aquí y quiere que nos veamos, le diré que tengo un poco de tiempo libre. Si esta bien para t-

Cuando Levi se gira para ver a Nico, este esta nuevamente sobre la cama y muy cerca de él.

-No sabía que conocías chicas de por aquí. -Nico bromea, lo que hace que Levi se ría un poco.

-La conocí en la universidad, dos años de intercambio. Fui asignado como su guía y nos hicimos amigos. Seguimos en contacto cuando regresó.

-Está bien. Te enviare la dirección de la casa de mi abuela cuando la fiesta este por empezar.

-No puedo esperar para conocer a tu familia. Estoy tan nervioso. -revela Schmitt por primera vez en todos esos días. -¿Qué pasa si-

La pregunta que Levi iba a hacer queda pérdida entre los labios de Nico contra los suyos. -No pienses en eso. -dice cuando se separa. -Todo saldrá bien. -luego asegura besando el cuello del castaño. Él también está nervioso, pero no quiere pensar en eso, no en ese momento en que pueden hacer mucho más que preocuparse.

-Nico... -Levi no puede evitar jadear. -Tienes una reunión con tu madre, ¿recuerdas?

-Ella puede esperar unos minutos. - asegura mientras que con una sonrisa traviesa vuelve a empujar a Levi contra las sábanas de la cama. Su madre y el drama pueden esperar.

[...]

Luego de haber tenido el mejor inicio de la mañana, Levi logró zafarse de Nico y obligarlo a ir con su madre. No entendía por qué estaba evitando tanto aquello.

Locamente millonarios. [schmico]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora