¿Y por qué no?

Cap. 5

Notitas antes de empezar: //pensamientos//, “Algo resaltante o alguna ironía”

Disclaimer: Ninguno de los personajes de Creepy pasta me pertenece.

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¿Y porque no? Cap 5

Tu día trascurrió normal desde que te levantaste hasta que julia te dio lo papeles que representaban que habías terminado tu servicio y eras “libre” al fin; Te llamo mucho la atención que Slenderman no fuese a acompañarte en tu trabajo y tampoco lo vieses mientras caminabas de regreso a casa, y que en la misma tampoco encontraras a Jack, ni siquiera a Jeff, te recostaste en el sofá, te sentías sola y el hecho de que Azul no hubiese ido a la escuela no mejoraba en nada las cosas.

Mientras tus preocupados pensamientos dominaban tu mente recibiste un SMS de parte de Azul, tomaste tu celular y lo abriste de inmediato.

(Tu nombre) cuando vengas a la sesión fotográfica en el bosque me podrías traer los apuntes del día, lamento no haberte podido avisar que iba a faltar a clases pero tenía que ir a un examen médico de rutina, por cierto espero que podamos hablar después de tomar las fotos. ¿Vas a venir verdad?

/Diablos la sesión, ya debería estar ahí/pensaste cuando viste la hora en tu celular: las 18:00hrs subiste corriendo las escaleras   y entraste a tu habitación, tomaste tu cámara fotográfica y cuando ibas a salir notaste que en pegada en tu puerta había una nota.

Tenemos que hablar, y muy seriamente, te veo en el bosque a las 00:00hrs.

Slenderman.

/ ¿De qué querrá hablar?/ Pensaste mientras tomabas las llaves de la casa, los apuntes para Azul y salías corriendo hacia el bosque.

Veinte minutos después de correr como si tu vida dependiese de ello llegaste al bosque, todos tus compañeros incluyendo a Azul ya estaban ahí.

– Lo sabía, si no te mandaba el mensaje no te acuerdas de la sesión fotográfica – Te dijo Azul con un linda sonrisa al verte llegar.

– Seee, lo siento, ¿Comenzamos?

Poco a poco ayudaste a todos con el enfoque de sus cámaras y con el punto exacto para sus respectivas fotos, y así como iban terminando tus compañeros se despedían y se retiraban, hasta que solo quedaron tú y Azul en el lugar, ambas tomaron sus fotografías, guardaron todo y se relajaron un poco, subieron a un árbol como cuando eran niñas y se sentaron en una rama no tan alta.

– ¿Qué me querías decir?

– Bueno es algo que te quería decir desde hace ya mucho tiempo pero siempre me ha dado miedo lo que puedas pensar al respecto. – Dijo ella con total seriedad.

–Pues suéltalo ya, somos amigas y te prometo que lo que me digas no cambiara en nada nuestra amistad. – Le dijiste mientras revolvías su castaño cabello.

– Eso espero, porque también este hecho es la razón por la que tu amistad es muy importante para mí.

– Ya me estas preocupando… ¿Qué ocurre?

Azul guardo silencio por unos incomodos segundos y continuo mirándote fijamente a los ojos.

– Soy a lo que el profesor Charles Xavier llamaría una mutante… me refiero a que tengo un poder o algo así.

Tu abriste los ojos cual platos y sonreíste de oreja a oreja.

– ¿Enserio?, eso es genial, ¿Por qué no me lo dijiste antes?, ¿Qué poder  es?, ¿Vuelas?, ¿Eres súper fuerte?... no, no creo, ¿Corres muy rápido?, ¿Vuelas?, pero más importante, ¿Eso en que afecta nuestra amistad? – Dijiste de forma emocionada.