La Bendición contra El Poste de Luz (RusMex)

Día de Muertos 3

Imperio Azteca 

Rusia y URSS se encontraban jaloneando a México de aquí pa allá.

-México es mío- dijo Rusia tomando con fuerza el brazo izquierdo de su amado.

-Pero yo lo vi primero- menciono URSS tomando el otro brazo del latino.

-YA WEYES! Si siguen así me van a sacar el chamaco- trato de zafarse pero le fue imposible y hay que aclarar que tiene un chingo de ganas de ir a desahogar sus penas (ir a cagar).

Sin embargo los rusos no hicieron caso a las palabras del tricolor y siguieron tratandolo como una muñeca de trapo. Hasta que el mexicano desapareció de sus brazos y ambos sintieron un golpe en el trasero que los terminó tirando.

-No vuelvan a tocar a mi criatura- dijo un country muy alto y mostro sus colmillos en forma de amenaza y le dio un abrazo protector a su hijo.

-¡PAPÁ!- grito muy emocionado México y correspondió el abrazo.

-¿Papá?- dijieron muy asombrados ambos eslavos ya que el country que se encontraba abrazando al latino no se parecía nada a él y más en la altura.

-Mira papá te quiero presentar a mi esposo Rusia- ayudo a levantar a ambos rusos.- Y a su papá URSS- dijo muy feliz el tricolor.

Imperio Azteca solo se dedico a examinar rigurosamente a Rusia pero aún así el sabía que nadie era digno de su hijo.

Por su parte a Rusia le faltaba poco para hacerse en los pantalones.

Y México una vez que terminó de presentarlos fue corriendo al baño.

-Espero que protegas a mi hijo- menciono muy serio el Azteca.

-No se preocupe le a seguro que mi hijo hara todo para hacer feliz a México ¿verdad?- menciono URSS haciendo énfasis en sus palabras, después de todo si él no se quedaba con México debía de asegurarse que su hijo lo cuidara bien.

Rusia solo asintió pero estaba realmente nervioso.

-Ya llegó su lodo puercas- grito México muy divertido.

Por su parte Imperio Azteca solo se sobo las sienes y miro con desaprobación a su sangre. Aún no puede creer que se porte como un niño claramente es la viva imagen de su padre España.

Continuará...