Cásate Con Migo Katara

capítulo 7

Pakku no se había dado cuenta de que Katara no le había dicho a Hakoda que había vuelto a la tribu. Estaba sorprendido de que Hakoda no se enterara de todos modos, ya que todos hablan mucho. Fue incómodo cuando dijo: "debe ser agradable tener a tu hija en casa".
"¿Qué?" Ella está de vuelta en casa.
"Supuse que lo sabías". Esto explica por qué no vino a cenar esa noche.
Hakoda permaneció callado sobre el tema. Durante el día, Katara ayudó a su Gran Gran con las tareas domésticas y luego llevó a Azula a explorar la tribu.
"Vamos en trineo".
"Bueno." Azula llegó allí. "¿Dónde está el trineo?"
"Solo agarras un pingüino nutria". Katara agarró uno y bajó la colina en trineo. Azula lo siguió. Se cayó bastante rápido.
"Son pequeños cabritos resbaladizos".
"Me gusta cómo pensaste que tendríamos trineos. Como si construyera cosas de madera".
"¿No puedes simplemente doblar el agua?"
Katara frunció el ceño. ¿Por qué no había pensado en eso?
Pasaron el resto de la tarde haciendo diferentes tipos de trineos, tratando de hacer el más rápido posible. Finalmente, llegaron lo suficientemente rápido como para volar. Katara gritó todo el tiempo.
"Eso fue asombroso."
Llegaron a casa y Azula estaba calentando el agua del baño cuando llamaron a la puerta. Katara lo respondió.
"Papá."
"Entonces estás aquí".
"Supuse que lo sabías. La tribu habla mucho".
"Ya veo. No ibas a pasar por aquí".
"No estaba seguro si querías verme".
"Por supuesto que sí. Lamento cómo dejé las cosas. No pensé que se fuera de las manos así. Pensé que tú y Aang podrían hacerlo funcionar, pero tengo que dejarlo ir. Tengo Déjalo ir."
"Gracias Papa."
"Ahora que está fuera del camino, puedes comenzar a buscar una pareja más adecuada. Hay muchos hombres solteros aquí".
"No sé sobre eso ..."
"No tiene que ser nada lujoso. Podemos tomar algunos bocadillos y usted puede simplemente conocerlos".
"Está bien", dijo Katara.
"Lo haremos dentro de unos días a partir de ahora. Te veré con Kanna para la cena".
"Por supuesto."
Era una casa pequeña. Azula escuchó todo. Ella se quedó en silencio. Katara ni siquiera se dio cuenta de que estaba molesta hasta más tarde.
"¿Estás listo para la cena?"
"¿Estoy invitado?"
"Por supuesto que estás invitado. ¿Por qué no lo estarías?"
"No lo sé. Tal vez porque tu padre no sabe que estoy aquí o creo que estamos en una relación y él planea encontrar coincidencias para ti mientras hablamos".
"No estás celoso. Difícilmente va a ser algo. Tendrán té. Escucharé sus spiels y luego diré que no hay química y listo". Katara sabía que probablemente sería mucho peor que esto, pero necesitaba que Azula lo mantuviera unida porque no podía.
Azula no estaba segura de si sería tan fácil. ¿Y si a Hakoda le gustara uno de ellos para ella? ¿Y si a Katara les gustaran? Se preguntaba si sus planes de aniversario se irían al infierno. "Está bien, estoy seguro de que podemos hacerlo".
Katara la besó. "Estoy seguro de que ninguno de ellos es tan bonito como tú".
"O tan bueno en la cama".
El estómago de Azula se sintió horrible. Le prometió a Katara que no la detendría, que no le impediría ser feliz, pero ahora, no quería dejarla ir. Habían pasado por mucho juntos. Les quedaba mucha más genialidad.
Cuando llegaron a cenar, Hakoda se sorprendió de ver a Azula con ellos. La princesa tuvo la tentación de decirle, pero ella contuvo la lengua. Katara quería que él pensara que solo eran amigos y no lo arruinaría.
"Entonces, ¿has encontrado un novio", le preguntó Hakoda.
"No salgo con chicos". Los niños son para tontos.
Kanna y Pakku se miraron. Esto va a ser incómodo.
"¿Han hecho algo para ofenderte?"
"Bueno, aparte de tener penes, que son asquerosos, tienden a ser malolientes, dominantes, y no tienen senos, básicamente, una completa decepción".
Katara se rio de ella.
"Tal vez deberías intentarlo con un chico. Podrías cambiar tu tono".
"Si crees que son tan geniales, tal vez deberías tener un novio. Escuché que hay muchos hombres solteros aquí".
Kanna se rio entre dientes. Katara no lo hizo. Ella la fulminó con la mirada. Azula lo atenuó.
"Hace que sea más difícil tener hijos sin un hombre".
"La adopción lo hace bastante fácil, y también hay donantes de semillas. No necesito un hombre para formar una familia o criar una".
"¿Qué tal defender uno?"
"Vivo en un palacio lleno de guardias. Creo que me las arreglaría".
No había forma de que Hakoda la convenciera de ser heterosexual. En todo caso, estas palabras estaban destinadas a Katara. Azula lo sabía, pero no quería que Katara pensara que no tener un hombre significaba que cualquier plan familiar estaba arruinado.
"¿Incluso quieres niños?" Pakku le preguntó. "No estaban en las cartas para mí, y no me arrepiento".
Kanna lo fulminó con la mirada.
"Amo a Katara y Sokka, lo sabes, pero hubiera sido inútil con un bebé".
Azula no podía creer que estaba a punto de decir esto. "Durante mucho tiempo, rechacé la posibilidad de tener hijos, pero si conocía a la persona adecuada, podría suceder".
Katara casi escupe su comida. ¿Ella podría querer hijos si conociera a la persona adecuada? ¿No soy la persona adecuada? ¡Soy su esposa y ni siquiera me pregunta por los niños!
La cena fue más tenue después de eso. Cuando llegaron a casa, Azula se estaba preparando para acostarse. "Eso podría haber ido peor", dijo Azula mientras cambiaba.
Katara no respondió.
"Tara, ¿hay algún problema?"
"¿Cuándo me ibas a decir?" Ella estaba enojada.
"¿Le dirá qué?"
"Que querías niños".
¿Por qué está enojada por esto? "No lo hago. Quiero decir que podría quererlos más tarde, pero no estoy seguro de que lo haga".
"Ni siquiera me dijiste que era una posibilidad".
"Nunca lo mencionaste".
"¡Deberías haberlo mencionado!"
"¿Cuándo? Nunca hemos hablado de nuestro futuro".
Katara hizo una pausa. "¿Querías decir conmigo?"
"No, quiero tener hijos con Ty Lee. ¿A quién más podría haber querido decir?"
"Dijiste que si encuentro a la persona adecuada".
"Bueno, no le hemos dicho a tu padre que estamos juntos, entonces, ¿qué debería haberle dicho? Oye, podría querer tener bebés con tu hija a pesar de que eres claramente homofóbico y ni siquiera sabes que estamos casados ​​mucho menos involucrado ". Ella se volvió hacia su esposa. "No quise asustarte o sugerirte que quería estar con otra mujer, pero es difícil responder preguntas sobre nuestro futuro cuando la gente no nos conoce".
"Reaccioné exageradamente, ¿no?"
"Sí, lo hiciste, pero eres apasionado". Azula cerró la brecha y la besó. "Es lo que te hace un gran amigo y un amante increíble. Es la razón número uno por la que te amo".
"Me amas."
"Hago."
"Nunca me dijiste."
"No quería atraparte".
"¿Qué?"
"Te prometí que este matrimonio sería tu libertad. Lo dije en serio cuando dije que no iba a atarte. ¿Cómo se suponía que debía volver a mi palabra y decir, sé que somos amigos y todo eso?" y nos casamos para salvar tu trasero, y se suponía que tenías libertad para irte en cualquier momento, pero me enamoré de ti en el camino y ahora quiero que seamos una familia ".
Esto no puede estar bien. Womanizing Azula quiere ser su único y único, tener una familia con ella, un matrimonio tradicional por así decirlo, tal vez incluso niños algún día. Esta es la chica que usó sus crímenes como líneas de recogida y apeló al sentimiento de patriotismo de las personas para que se acostaran, pero de alguna manera era la persona más dulce que Katara había conocido.
No dudó en ofrecer su mano cuando Katara estaba en problemas. Le regaló una hermosa boda y una hermosa noche de bodas, una divertida luna de miel. La animó a viajar, a tomar el trabajo de sus sueños, a reunirse con su familia después de estar tanto tiempo fuera. Ella le dio a Katara todo y todo lo que quería a cambio era amor. No estaba segura de si el amor era algo en lo que caías o algo que elegías para ti, pero eligió a Azula porque si esta chica no la merecía, entonces nadie lo hizo.
Katara presionó sus labios contra su esposa. "Te elegí. No necesito ni quiero a nadie más. Te amo".
Azula la tomó en sus brazos. "Dilo otra vez."
"Te amo."
Azula le pidió que lo dijera toda la noche mientras se quitaban la ropa y hacían el amor durante horas. Tener un maestro fuego en la cama era agradable. Mantuvo a Katara agradable y cálida.
Pakku y Kanna hablaron después de la cena. "Esa fue una cena tan extraña", dijo. "¿Por qué no le dijeron que estaban saliendo?"
"Katara lo intentó después del baile del Día de los Dos Corazones, pero se pelearon antes de que ella realmente pudiera explicar algo. Creo que Hakoda está en negación. Establecerla con pretendientes no la aclarará".
Para cuando llegó el "té", Azula estaba de tan buen humor que nada de lo que Hakoda dijo o hizo pudo derribarla. Katara la amaba. Ella la eligió y Hakoda podría meter eso en su pipa de paz y fumarlo. La princesa dio un salto a su paso. Ella estaba en la nube nueve.
Mientras Katara se preparaba, Azula pasó el día ayudando a Gran Gran. Luego, le mostró el collar de compromiso que había hecho para Katara.
"Es hermoso. Lástima que no pueda usarlo aquí".
"Algún día, ella podrá usarlo en cualquier lugar".
"¿Hiciste esto a mano?"
"Hice que el joyero cortara la piedra, pero hice todo lo demás", incluso la insignia en la parte posterior.
"Es mucho que hacer por un amigo".
"Quería hacerlo bien. Nadie quiere una propuesta débil".
"Parece que ustedes dos se han convertido en algo más que amigos casados".
"Lo estamos. No lo planeamos de esa manera, pero nuestro matrimonio es lo mejor que me ha pasado".
"Te espera un viaje lleno de baches. Mejor agárrate fuerte".
Katara fue a la casa de Hakoda donde había tres niños diferentes, cada uno con la esperanza de obtener su favor.
El primero parecía una versión más joven de Bato. Era su sobrino. Incluso si Katara buscaba un hombre, no podía besarse con el mejor amigo de su padre. "Por favor, no lo tomes a mal, pero solo veo a Bato cuando te miro, y no creo que eso funcione. Sería como besar a mi tío".
Hakoda suspiró. El chico lo tomó con calma. "Bueno, si me maldijeran por heredar su buena apariencia, supongo que tendré que lidiar. Fue agradable verte de nuevo Katara".
Tenía la sensación de que no tendría problemas para conocer mujeres.
El siguiente chico estaba tan nervioso que vomitó al conocerla. ¡No!
El último chico parecía estar bien al principio. Hablaron sobre dónde había estado el año pasado y lo que estaba haciendo con la tribu. Todo iba bien hasta que dijo: "¿Realmente abofeteaste a Aang porque te besó?" Su tono era arrogante.
"No es que me haya besado. Es que me besó después de que rompí con él y rechacé repetidamente sus avances. Simplemente no podía aceptar un no por respuesta".
"Fue solo un beso. No es que haya intentado violarte".
Gran error. Katara le hizo un cubo en la cabeza con agua. "Adiós."
"¿Qué fue eso?"
"Tuvo una oportunidad y se desvaneció".
Cuando se lo contó a Azula, la niña sonrió. "Eres tan sexy cuando estás enojado. Solo sé que cuando lo ponemos, ¡va a hacer mucho calor!"
Katara lo fulminó con la mirada.
"Quiero decir, qué idiota misógino y lo hizo venir ... ¿Podemos distinguirlo ahora?"
Las dos chicas comenzaron a besarse. No oyeron a nadie venir a su casa.
"Katara, cariño", comenzó Hakoda cuando llamó a la puerta. "Necesitamos hablar. No encontrarás un marido si ahuyentas a todos tus (pretendientes) ... ¡QUÉ HAY EN EL NOMBRE DE TUI!"
Las dos chicas se volvieron para ver a un padre sorprendido. Azula miró a Katara. ¿Qué quieres decirle?
"¿Estás realmente sorprendido?" Katara le preguntó.
"Por supuesto que estoy sorprendido. ¡Acabas de pasar tres horas siendo cortejado por HOMBRES!"
"Porque insististe. ¿Realmente creías que Azula y yo éramos solo amigos? He estado viviendo en el palacio durante casi un año. La traje a casa para conocer a mi familia. Solo tengo una cama aquí. ¿Qué crees que tenemos? estaban haciendo juntos?
"Ni siquiera quiero saber, pero ¿qué te ha hecho? Este no eres tú. ¡Te gustan los HOMBRES!"
"Aparentemente, me gustan más las mujeres, y no solo me gusta, la amo y la elijo. Sé que esto no es lo que querías para mí, pero tú deberías haber sabido que no que mi vida amorosa te sea dictada. Soy igual que Gran Gran y si ella hubiera hecho lo que tú propones que yo haga, tú no existirías y yo tampoco ".
"Eso es todo. Estás castigado".
"¿Qué? No puedes castigarme. No vivo aquí".
"Soy el jefe de esta tribu y puedo expulsarla y ponerla en arresto domiciliario".
"¿Qué?"
"Ya no es solo tu ciudadana", dijo Azula.
Katara la miró; ¿Qué iba a decir ella?
"Le propuse matrimonio y la convertí en mi consorte, lo que significa que ella también es ciudadana de la Nación del Fuego y si la mantienes en contra de su voluntad, provocarás un incidente internacional. Zuko la ve como una hermana, y él te nivelará". ".
"Acabas de inventar todo eso".
Azula fue a buscar el collar de compromiso de Katara. "¿Crees que inventé esto?"
Katara se lo puso. "Ya me decidí".
Se fue enfadado.
"Lamento que se haya enterado de esa manera". Azual besó la frente de su esposa.
"¿Qué crees que va a hacer?"
"Bueno, probablemente descubrirá que no obtienes la ciudadanía si te comprometes conmigo. Deberíamos irnos antes de que se dé cuenta de eso".
"Pero estamos casados".
"No traje pruebas de eso aquí, ¿verdad?"
Katara sacudió la cabeza. Ella no quería dejar a su Gran Gran tan pronto.
Ella fue a decirle.
"Se enteró, ¿no?"
"Él se acercó a nosotros besándonos. No sé qué más puedo hacer. No puedo dejar de sentirme como lo hago".
"Lo sé cariño. También elegí el amor y nunca pude reconciliarme con mis padres. Intenta dejar una puerta abierta para resolver esto con él, sin importar cuánto tiempo tome".
Katara abrazó a su abuela. "No quiero irme tan pronto, pero tenemos que regresar".
"Quizás Pakku y yo podamos visitarte este año".
"Me gustaría eso."
Hakoda necesitaba moverse rápidamente. Tenía que ver si podía llegar a un acuerdo con Arnook antes de su boda. No podía ver a su hija hacer esto. No fue natural. ¿Qué sigue, dejar que las personas se casen con pingüinos nutria?
Cuatro días después, Arnook recibió una carta de Hakoda.