ＣＡＳＴＩＧＯ

Capítulo 7

7

-¿Qué tiene de malo aquí?  Aquí empezó todo...además, ya no aguantó más. Te deseo Inuyasha... - sus ojos lo demostraban, brillaban de lujuria.

-Bien, porque yo igual te deseo Kagome...

Entonces Inuyasha hizo que lo volviera a enrollar sus piernas en sus caderas y él alzó a Kagome sosteniendola desde su trasero, ella se sostenía abrazada a la espalda de él apoyando sus senos descubiertos y con sus pezones erectos en el torso de Inuyasha.

Inuyasha camino hasta su silla de profesor, y tomo asiento en ella con Kagome encima de él, el peli plata ya le había retirado la ropa interior, solo quedaba con la pollera y sus medias colegiales. Introdujo tres dedos y ambos gimieron, ella por el placer y él por ver la facilidad con lo que sus dedos se habían deslizado en la cavidad vaginal.

-Ya estás lista - murmuro Inuyasha - ¿Tú estás lista?

-Sí... - sin dudar respondió.

Inuyasha primero froto la intimidad de Kagome con su miembro, haciendo que su amigo reaccionara enseguida y buscara como vida propia un lugar donde introducirse.

-Hazlo tú - dijo Inuyasha en un jadeo.

-¿Yo? ¿Qué cosa?

-Introduce tú, mi miembro en ti... Así puedes controlar tu misma el ritmo- Kagome entendió y miro hacía abajo.

El miembro de su peli plata buscaba con desesperación donde introducirse... Y eso a ella le excitó. Tomó en sus manos el miembro respirando entrecortadamente, se levantó un poco y se acomodó, con lentitud empezó a bajar.

-Ah, ah Inuyasha... - gimió y exclamo en una mezcla de placer y dolor -Mhm... Ah - ella gemia e Inuyasha igual.

Kagome se sentó completamente y pegó un grito, el miembro había traspasado su himen. La azabache se abrazo a Inuyasha enroscando sus brazos alrededor del cuello.

-Duele...dolió-  murmuro Kagome respirando entrecortadamente, Inuyasha la abrazo frotando su espalda baja.

-Esperaré hasta que me lo digas - Inuyasha le dio un beso en su cien sudada. Ambos sudadaban y olian a sexo.

Inuyasha desde un principio había pensado que su azabache ya había tenido experiencia en estos actos sexuales y eso lo bajoneo un poco, pero después se recompuso y había declarado que sería el último en la vida de Kagome. Ahora que sabia que era el primero juraba que sería el único y último hombre en la vida de ella.

-Muévete pero...despacio-  susurro Kagome aún abrazada a él y acariciando la cabellera larga y plateada de su profesor.

Inuyasha movio su cadera con lentitud, empujó y Kagome gimió de placer. Hizo para atrás y volvió a empujar, otro gemido. Noto que su azabache solo sentía el placer así qué más rápido empezó a moverse. Kagome también se movía de arriba para abajo siguiendo el ritmo de su peli plata, sus gemidos en el oído de su profesor eran contagiados por el mismo.

-Di mi nombre - jadeo Inuyasha sin detenerse, en cambió acelerando el ritmo y haciendo que pronto se llegase al orgasmo - Di mi nombre Kagome.

-I... Inuyasha... Inuyasha.

-Sí... - las estocadas eran cada vez más profundas y desesperante - Eres mía... ¿Eres mía Kagome? - estaban a punto de llegar.

-Sí, soy tuya... - Kagome lo beso y en medio de aquel beso se soltó el grito al haber llegado al éxtasis, juntos.

Inuyasha dejó de moverse para ver como su líquido mezclado con él de Kagome salía de la entrada vaginal de ella y como sus labios vaginales absorbían a su miembro, eso lo volvió a encender.