Capítulo/ 3

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¡Feliz año 2020 a todos!

Se que no estoy actualizando muy a menudo pero por favor tenganme mucha paciencia, entre el trabajo, las cosas que debo realizar en mi casa al llegar me quitan un poquitico de tiempo, trataré de poner más empeño porque quiero sacar este libro a flote, significa mucho para mi, así que sin mas preámbulos continuemos con el libro.

...

Me despierto de golpe porque acabo de descubrir, que aquel chico que me parecía conocido fue mi novio durante dos años y que fue de las ciudad porque a sus padres le ofrecieron trabajo al otro lado de la ciudad y por ende el tuvo que irse también; recuerdo también que nuestra despedida fue casual, nada de lloriqueos, si me sentí mal cuando se fue, pero dentro de mi algo me susurraba: él volverá. Pero eso estaba muy lejos de ser así, a medida que fui creciendo fui superándolo.

Cuando salgo de mis pensamientos, y me concentro en el aquí y el ahora, me doy cuenta que son las cinco de la mañana. trato de dormir un rato más  pero se me es imposible. Cojo mi celular de la mesita de noche, cuando enciendo a pantalla me topo con un mensaje de mamá, uno de Ava  y el otro del chico misterioso—por así decirlo, pueda ser que alguien se este haciendo pasar por el—leo primero el de Ava diciéndome que llego bien como dijo que lo haría, el de mamá el cual me dice que no llegaran a casa porque surgió un problema en la empresa y se quedaran en casa de su socia, se estarán preguntando del porque recibo más mensajes de mamá y menos de papá. Mi padre no es muy fan de la tegnología, siempre dice que la tegnología es la causante de muchos problemas cotidianos que surgen hoy en día, si tiene celular y una tableta pero solo los usa para trabajar. El mensaje del chico misterioso diciéndome que quiere hablar conmigo pero en persona. Verlo significa abrir una herida que ya esta sanada y no estoy lista para verlo, pero como existe un dicho: El que no arriesga no gana, sino me arriesgo no cerraré ese ciclo que quedo abierto cuando el se fue así que le respondo ¨Si¨

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— Y veremos esta — digo al seleccionar unas de las tantas películas que vamos a ver. Ya era viernes nuestra pijamada, luego de decidir que la íbamos hacer en mi casa pero ibamos a estar sola y no queriamos amancer sola abrimos un debate; gano Ava así que ella tuvo que ir a buscarme junto con las bolsas, Ava cogió prestado el auto de su padre; el cual tiene dos autos  y desde ese entonces estamos en la sala. La casa donde vive Ava fue construida por John Mendéz el padre de la mencionada, es una majestuosidad de casa, muy amplia, contiene cinco habitaciones, una habitación de servicio, una sala de juegos — en la cual el padre de Ava juega cuando tiene tiempo libre — un gimnasio — a veces vengo y me ejercito —y todas las habitaciones contienen su baño, una amplia cocina en la cual puedes desplazarte con libertad, la sala de estar que esta a un lado del lobby; consta de dos niveles y es hermosa.

— Becky quiero ver esta — señala una que ya hemos visto, se me ha olvidado las incalculables veces que la hemos visto. Ruedo los ojos, aunque debo admitirlo a mi también me gusta.

— Esta bien veremos esta, pero de ultimo ya que es muy romántica.

— Vale, buscaré las palomitas y el refresco.

— Y yo los tostitos.

Cuando ya tenemos nuestros aperitivos en la mesa, nos disponemos a ver nuestra primera película de terror. Al cabo de unos minutos el padre de Ava se nos une cuando llega de trabajar; le encantan las películas de terror ¡Hombres!. Cuando ya vamos por la tercera película este se retira no sin antes despedirse de nosotras; ya que mañana debe madrugar. A pesar de ser dueño de su propia fundación y empresa arquitectónica es el primer que debe estar en ambos lados, la fundación queda a minutos de la casa de Ava, por lo que al ser un lugar muy céntrico muchas personas circulan por ahi y se ofrecen como voluntario para llegar a mas lugares pobres donde muchas personas residen en albergues deteriorados. El padre de Ava tiene un corazón muy dulce, muy bondadoso dispuesto a ayudar, aprecio mucho a su padre y lo admiro en gran manera.

La Vida De Rebecca Hunter ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora