La luz entraba por la ventana golpeando justo en las pupilas de Juliana pero no deseaba abrir los ojos, los flashazos de la noche anterior la atormentaban y golpeaban en su estómago, apretaba con fuerza sus manos pero aún podía sentir el cuerpo de Valentina sobre ellas y sobre sus labios también, en cuanto toda la castaña inundó su mente se levantó en busca de una playera y se metió al baño para darse una ducha, moria por quitarse la esencia de su amiga con aroma a flores y vainilla, tan suave y dulce. Volvió a negar con fuerza y se concentró en el agua que caía de la regadera, no fingia haberse olvidado de Sergio, se sintió culpable en cuanto había despertado, pero estaba evitando a toda costa pensar en eso, se recordaba que era parte de la pretensión y con eso parecía ser más que suficiente, aún que se engañaba a sí misma con tanta negación creyendo de inmediato que no significaba nada para ella. Cuando Valentina despertó se giró con tranquilidad al lado de Juliana descubriendo que ya no estaba junto a ella, se levantó aturdida al no sentirla y en cuanto se sentó en la cama una gran sonrisa recorrió su rostro y se tocó la frente sin dejar su felicidad de lado, deseaba recordar cada fragmento de la noche anterior, sobre todo del cuerpo de la pelinegra tan bello y delicado, su mano rozó sus labios con suavidad y se volvió a dejar caer sobre la cama, no le importaba mucho lo demás, justo en ese momento se sentía bien el estar ahí junto a la almohada de Juliana y ese aroma que tanto amaba.
La morena salió más tranquila de su baño y notó que la castaña aún estaba sobre la cama revisando su teléfono, la observó con cuidado y no pudo evitar sentirse plena con ella misma, segundos antes se había prometido no actuar de esa manera y con solo verla lo había olvidado -¿Que tengo algo en la cara?- Valentina levantó su mirada haciéndole saber que se había dado cuenta de su acción -ah... no no- soltó una carcajada nerviosa -yo solo... am solo estaba- tartamudeo un poco antes de girarse en busca de algún pantalón, la castaña aprovechó para levantarse y se acomodó detrás de Juliana -¿Porque te has levantado tan pronto?- la pelinegra siguió con su vista enfocada en el cajón -necesitaba un poco de agua para despertar- Valentina dió un paso al frente e intentó rodear la cintura de su amiga pero esta se zafó al instante -ya la encontré- sacó una pantalonera del cajón dándole cara a Valentina -será mejor que me vista- sin mirarla a los ojos volvió a meterse al baño suspirando con fuerza, no deseaba ignorarla pero se sentía con la necesidad de hacerlo, como si fuese su responsabilidad el dar un paso atrás, considerando que quizá Valentina no haría algo como eso, aún así no podía dejar de pensar en ella, había abierto la caja de Pandora, estaba segura y por primera vez en su vida no sabía qué hacer con ese sentimiento porque esconderlo le parecía imposible, estaba tan confundida en ese momento que ver los ojos profundos de su amiga solo pondría peor las cosas, tomó aire en repetidas ocasiones y para no enfocarse en eso intentaba recordar otras cosas con las cuales divagar.
Valentina se quedó parada unos segundos más en dónde su amiga la había dejado, preocupada por haberla incomodado o sobrepasado sus límites, dió vueltas por la cama un rato después mientras se preguntaba cómo debía actuar o qué debía decir, para no carcomerse antes de que Juliana saliese del baño salió de la habitación, la casa estaba en un extraño silencio, apenas lo había notado hasta ese momento, con cautela bajó los escalones, al llegar abajo se dio cuenta que efectivamente, no había nadie en casa, recorrió los solitarios pasillos en busca de algún alma o señal de vida hasta escuchar un aparato causado mucho ruido en la lavandería -¿donde se han metido todos?- Eva revisaba su celular parada junto a la lavadora -ya se han ido- respondió mientras levantaba su rostro -tu y the l word estaban muy dormidas y no quisieron molestarlas- sonrió para sí misma como si hubiese hecho el mejor chiste pero solo sonrojó a la menor -¿the que?- aunque para su hermana había sido una excelente referencia Valentina no había entendido de que estaba hablando -bueno, parece que no estás familiarizada con ese mundo, aun puedes cambiar de opinión- le dió una palmadita en el hombro -en cuanto Mateo regrese de llevar a Abby con la niñera podremos irnos con él, les recomiendo que empaquen sus cosas para acampar, estaremos una noche fuera- le dio una señal para que fuera a prepararse -¿acaso estás corriendome?- Eva se encogió de hombros mientras Valentina se reía.
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Outside of the moon (Juliantina)
Roman d'amourValentina Carvajal una joven decidida y apasionada se ve obligada a mentir sobre sus sentimientos para sacarse a su madre de encima quien desea comprometerla lo antes posible, para Valentina pretender ser alguien que no es podrá ser el inicio de un...