Walk Away | Jeon Jungkook | Kim Namjoon |

| Parte 3 |

Algo no andaba bien y era relacionado con Jungkook otra vez, a pesar de que sus tratos habían cambiado luego de esa charla que tuvimos a las afueras de la empresa donde trabajaba.

Él no me había tratado mal, pero lo notaba un poco ausente y cuando le decíamos con los chicos para salir un sábado nunca podía, y nunca nos daba una respuesta cuando le preguntábamos. Y entendía que tenía el derecho de no responder si no quería, pero ya era algo que venía pasando muy seguido y me parecía extraño.

Era imposible no sospechar de que andaba metido en algo, luego de que leí ese mensaje hace unas semanas atrás, me dejó sin poder pegar un ojo en absoluto durante toda la noche. Me sentí muy mal por desconfiar de él por nada porque no decía nada revelador ese mensaje, pero me dejó un mal sabor de boca.

Y todo me preocupó más cuando el lunes por la mañana al verlo llegar a la universidad me abalancé sobre él para abrazarlo luego de no verlo durante todo el fin de semana porque había ido a visitar a mi padre y había llegado recién esa mañana. Sentí un aroma raro en su camisa, no era su perfume, sino algo mas suave y sutil. No quise mal pensar las cosas por un maldito olor, pero mi cabeza me estaba poniendo cada vez mas paranoica con todo ese asunto.

- ¿Cómo pasaste el fin de semana? -pregunté cuando comenzamos a caminar hacia nuestra aula.

-Bien, en casa tranquilo -se encogió de hombros-. ¿Y tu? ¿Cómo está tu padre? -inquirió ahora él, Jungkook aún no conocía a mí padre porque siempre que le decía parecía poner excusas, pero yo sí conocí a su familia hacía muy, muy poquito cuando se lo mencioné de manera desinteresada. Él pareció entender mis ganas de conocer a sus padres y a su hermano, asi que organizó un almuerzo un domingo y me llevó para presentarme. Sinceramente todos me cayeron muy bien, su madre era muy bonita y amable, al igual que su padre con el cual eran muy parecidos y su hermano era un poco mas reservado, pero se comportó muy bien conmigo también, así que me fui satisfecha y alegre ese día de la casa de sus padres sabiendo que había dado una buena impresión no solo con mí presencia sino que había hecho un postre yo misma para compartir con todos ellos y se pusieron muy contentos cuando me vieron con aquel pastel en las manos.

-Bien, está bien -respondí encogiéndome de hombros-. Creo que está conociendo a alguien, pero todavía no me quiere decir -reí.

- ¿Ah sí? Eso debe ser bueno.

-Sí, tal vez le cambia ese carácter de ogro que tiene -la verdad era que mí padre era muy serio y hasta podía ser algo antipático, pero conmigo era muy dulce y tal vez conociendo a otra mujer su carácter se ablandaría un poco. Con mamá siempre fue bueno, pero recordaba sus últimos tiempos de relación con ella que mantenía ese mismo carácter que tenía ahora, a pesar de que ya por naturaleza era serio.

Él no respondió a nada de lo que dije porque no conocía a mi papá, solamente se limitó a seguir caminando hacia nuestra aula.

- ¿Se te sigue insinuando ese señor Kim? -preguntó luego de pasar minutos en silencio.

Lo miré con el ceño fruncido un poco extrañada por la pregunta, ya habíamos tocado anteriormente ese tema y le había dejado bien en claro las cosas.

-Él no se me insinúa, Jungkook, ya te lo dije.

- ¡Claro que sí! Solo lo vi una vez y fue suficiente para darme cuenta.

-Solo es amable y se ofreció a acompañarme a la parada del autobús -no le mencioné que también se había ofrecido a llevarme en su auto, eso lo haría molestar un poco más.

-Si es amable es porque le gustas. Lo vi, vi la forma en la que te miraba, Na Eun.

Puse los ojos en blanco al escucharlo.