Capítulo 52

850 91 1
                                    

Al entrar al teatro del colegio, pude ver a Eunha buscándome por todas partes.

Pero cuando me vio...

Su rostro dibujó una enorme sonrisa y fue a mis brazos corriendo, tropezando torpemente con un escalón.

Afortunadamente pude atraparla, evitando su caída.

—G-gracias por atraparme ____.— agradeció, tiernamente avergonzada

—¿No te lastimaste?— pregunté al ella separarse

—N-no, n-no, t-todo está bien ____.— negó

Simplemente se levantó y acomodó su vestido (que accidentalmente se levantó ligeramente) y me dedicó una tierna sonrisa.

—¿Iniciamos ya el ensayo, ____?— preguntó, aún sonriendo

—Claro.— acepté y fuí junto a ella

Eunha... Eunha tomó mi mano y me llevó detrás del telón.

—De acuerdo, toma el guión.— dijo, dándome los papeles

—No es necesario, ya me lo aprendí.— respondí, dejando los papeles de nuevo en la mesa

—¿En serio?, eres increíble ____.— comentó, volviendo a sonreírme

El teatro a esta hora está completamente vacío, así que no habrían interrupciones, lo cual era en parte perfecto.

Yo no tenía tanto tiempo libre debido a la lluvia que me quitó demasiado tiempo, así que tuvimos que acortar el tiempo de ensayo, Eunha propuso ensayar solo desde la mitad de la obra, que fue lo que logró memorizar, y sin más, acepté.

Y al llegar a los últimos párrafos...

Era la hora del beso...

La notaba bastante nerviosa, pero a la vez tan decidida en besarme...

Ambos lentamente nos acercamos a los labios del otro, y antes de que hicieran contacto... nos Interrumpieron.

La puerta principal se abrió y entró, que supuse por la silueta, era una mujer.

—¿L-les molesta si miro?— preguntó una voz familiar

—¿Mina?— pregunté

—Ho-hola, ____.— saludó tímidamente

—¿Que haces aquí?— pregunté intrigado

—Q-quería ver su ensayo...— respondió

—E-eh... c-claro... p-puedes quedarte a ver.— respondí, y sin más, volví con Eunha

—¿P-podemos iniciar otra vez?, m-me perdí.— dijo

—S-sí, s-sí.— acepté

Iniciamos el ensayo un par de renglones antes del beso.

Así que cuando llegó, su comportamiento cambió de nuevo y volvió a portarse tímida y nerviosa cuando lentamente me acercaba a sus labios.

Y...

Sin más... nos besamos.

Al ambos separarnos, ella me sonrió, con sus mejillas increíblemente rojas.

Eres Un Problema... [-Mina y Tú-]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora