Part of me. || Emiliaco. [Terminada]

F I V E T E E N

Hay momentos en que nuestros
deseos se cumplen, incluso
antes de pedirlos.

O

Incluso antes de imaginarlos.

NARRADOR:

Un día antes ninguno de los dos se acercó.

Emilio decidió que no podía seguir ciego ante los celos que crecían en su interior, pero no se acercó a Joaquín porque sabía que ese no era el momento, necesitaba estar relajado para que ninguno de los dos se molestará o algo por el estilo como hace unos días. Así que se fue de la casa de los Bondoni con el pensamiento de que no hablaría ese día con Joaquín, pero sí que lo haría, muy pronto.

Joaquín por su parte despidió a Andrés con la excusa de que su cabeza dolía, aunque en realidad lo que quería era dejar de ignorar todo lo que el chico le decía, lo mejor era que no ilusionara a más personas, ya suficiente tenía con Eduardo, quien no dejaba de llamarlo.

Así que ahora, al siguiente día, ambos despiertan con ideas totalmente contrarias, pero que irónicamente tienen que ver la una con la otra.

Emilio sabe que el día de hoy algo cambiara, porque esta arto de esperar a que lo haga solo, esta vez, él será el que dará el primer paso. Sin importar nada, debe serle sincero a Joaquín, porque al menos esta muy consiente que decir que Joaquín no le importa para nada de una manera romántica; sería bastante estúpido. Y si algo le ha enseñado su madre, es que no hay tiempo de ser estúpidos cuando de sentimientos y del amor se trata.

Joaquín por su parte sabe qué hará todo lo posible por no convivir con Emilio. Sabe que lo mejor para superarlo es estar todo el día lejos de él, y aunque sabe que no le será posible estar en el área de diseño el día de hoy; al menos tiene que estar todo el tiempo en su oficina, pues el estar dos semanas y media fuera, le ha hecho tener muchos pendientes que Niko no pudo completar solo. Así que aunque está cansado de huir, por el momento es lo mejor para ambos.

[...]

JOAQUÍN:

Suelto un suspiro más largo que el anterior.

Mis ojos se cierran por un momento, estoy tan estresado de que mi mente no deje que nada entre en ella. He estado todo el día tratando de entender algo que siempre ha sido sencillo para mí, no sé en qué momento he dejado que mis nervios me hagan una mala jugada. O tal vez si lo sé.

Hay dos razones por las cuales mis nervios estan a todo lo que dan.

La primera es debido a que Emilio ha tratado de hablar conmigo desde que he llegado al trabajo.

Estaba esperándome en la entrada de a oficina, pero en cuanto se acercó a mí, Nikolas fue más rápido y me jalo del brazo para comenzar a platicarme sobre algunas cosas que lo tenían muy emocionado, cosas como su aniversario con Diego. Agradecí internamente que Emilio simplemente comenzara a caminar detrás de nosotros.

Cuando Nikolas nos dejó en nuestro piso y él se fue al suyo, Emilio trato de acercarse nuevamente a mí. Esta vez fue Diego quien me salvo, pues llego directamente a Emilio diciéndole que tenía algunos problemas con unas modelos y que lo necesitaba urgentemente; por lo que conociendo a Diego, no tuvo ni las ganas ni el tiempo de preguntarme nada, simplemente jalo a Emi del brazo y se lo llevo lejos. Salvándome por segunda vez de hablar con él.

Entre a la oficina con todos los nervios de punta, pero al cerrar la puerta me relaje, sabía que si ponía las paredes grises, Emilio no se atrevería a tocar, pues sabría que necesito privacidad. Así que estaba bien, no tenía nada porque preocuparme el día de hoy, que no fuera terminar mis pendientes.