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•Katia•
Llegamos a Córdoba y ya ni bien poner un pie en tierra firme se empezó a amontonar la gente, eso que todavía faltaba y bastante para el espectáculo.

Yo me hice a un lado con Pedro, mientras los chicos se empezaban a sacar fotos con todos los que estaban presentes.

Una vez que la gente había quedado satisfecha nos metimos en el teatro donde se iba a hacer y cada uno se fue a su camarín, aunque antes de eso mateo decidió subir una historia a su Instagram para promocionar el evento.

Una vez que la gente había quedado satisfecha nos metimos en el teatro donde se iba a hacer y cada uno se fue a su camarín, aunque antes de eso mateo decidió subir una historia a su Instagram para promocionar el evento

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-va a estar que explota-le sonreí cerrando la puerta una vez que llegamos a su camarín.

-sii mal, ya hay una banda de gente

-cuanto falta para el meet ?

-45 min

-ahhh bueno tenes un ratito para estar tranqui

-si por suerte

-queres que vaya a buscar algo para comer?

-uhh si dale tengo alta lija

Deje a mateo en el camarín para salir por algo de comer. Ya era pasado el mediodía y el hambre que nos había generado el viaje no tenía explicación.

Encontré una rotisería a unas 3 cuadras y decidí comprar ahí un par de empanadas para ambos. Luego de agradecerle a la chica que me atendió, regrese con mi bolsa al camarín.

Decidí no entrar ya que mateo estaba hablando por teléfono y no lo quería interrumpir, aunque no me resistí a no escuchar la conversación que tenía a través de la puerta.

-emm... yo justo te iba a llamar, porque te quería invitar mañana a merendar algo, te va?- le pregunto mateo a la que parecía ser era Sabrina

-sisi estoy con Katia, pero es mi amiga ya te lo dije mil veces, es como mi hermana. Ni en pedo estaría con ella, con la única que quiero estar es con vos- respondió después de un silencio en el que parecer Sabrina le había hecho una escena de celos conmigo.

Lo que dijo mateo me hizo más mierda de lo que ya estaba, ¿tan insuficiente iba a ser siempre para él? ¿Tan horrible me veía? De lo único que tenía ganas en ese momento era de desaparecer y aparecer en mi cama y con helado

Como no me quedaba otra decidí entrar, e interrumpir un poco su conversación. Yo sé que estaba mal lo que estaba haciendo, sabía que tenía que dejarlo ser feliz con quien él quisiera pero es que a veces de verdad me ponía tan mal que no me salía.

-hola bebo, compré unas empanadas re de ruta que están zarpadas- le sonreí

-a todo el mundo le dice bebo daaaale - dijo haciéndome una seña para que lo esperara, que estaba ocupado.

Asentí sentándome en el amplio sillón que había en el camarín y abriendo una botella de agua que ahí ofrecían.

-bueno sab te dejo porque todavía tengo que comer y no llego más, nos vemos mañana hermosa.

-todo bien?- pregunte haciéndome la desentendida cuando corto

-Sisi, estaba hablando con Sabrina

-se enojo por algo?

-se puso un toque celosa porque me dijiste bebo pero nada más

-ahre qué flasheaba, todo el mundo sabe que nosotros nunca estaríamos en nada

-no, no te creas katy. La mayoría piensa que somos algo, somos muy cariñosos entre nosotros

-y está mal ?

-Nono, no esta mal. Pero yo creo que ahora que me voy a poner de novio deberíamos dejar de mostrarnos tan cariñosos, por lo menos cuando haya gente. Nose que pienses vos... te parece bien?

-mmm... si sí, está bien por mi

-qué bueno, no te enojes ¿si?-dijo abrazándome

-está bien Teo, te dije- solté cortante

Comimos tranquilamente aunque lo que me había planteado no me caía para nada bien. Si ya cambiaba este tipo de cosas sin estar de novio, no me quería imaginar cuando lo estuviera.

Luego de almorzar le tocaba el meet and greet y me ofreció a que lo acompañará a lo que no accedí porque no estaba muy de humor y por lo general alguna que otra persona también me pedía fotos a mi.

Me recosté un poco sobre el sillón y las lágrimas no tardaron en salir. De por si, siempre había sido una persona muy insegura y que el pibe que me gustaba dijera que ni en pedo estaría conmigo y que ademas me diga que me tendría que alejar un poco porque ahora iba a tener novia, me dolía y mucho. Mi autoestima estaba en -73828, me sentía lo más insuficiente y reemplazable del mundo.

Me quede recostada un rato revisando mis redes hasta que mateo regreso, tenía un beso marcado en el cachete y una carita de cansado que me daban ganas de decirle: flaco deja a la pelotuda esa y venite conmigo que te juro que te amo con todo mi corazón, en vez de eso opté por preguntarle como había estado.

-bien todo piola, había una banda de gente por suerte. Vos qué onda? Te paso algo ? Tenes los ojos medios hinchados

-em... Sisi es que algo de acá me debe haber dado un poco de alergia pero estoy bien

-ahhh bueno mejor. Me canse- dijo sentándose junto a mi en el sillón y recostándose en mi hombro

-te puedo tocar el pelo o tu todavía no novia nos está espiando por alguna cámara ?

-estaba esperando un comentario como ese-rio

-no estaría encontrando el chiste- dije media seria

-sos celosa beba..., estamos juntos desde los 6 años y nunca nos separamos por nada ni nadie, que esté con Sabri no quiere decir que te deje de querer a vos. Ya te lo dije y te lo vuelvo a repetir, sos y siempre vas a ser mi persona favorita, sos la única que conoce todos mis mambos, sabes todo lo que me pasa siempre, estuviste en mi mejores y mis peores momentos y eso es algo que nunca nadie lo va a lograr. Así que no te pongas mal por una boludes, porque yo siempre voy a estar para vos como vos siempre estuviste para mi.

-es que te juro que si te pierdo me muero, y que ya te esté haciendo escenas de celo sin si quiera ser algo, me parece cualquiera. Yo ya te dije, siempre te voy a apoyar en lo que te haga feliz, por algo estoy acá ¿no? Pero no quiero que nos separemos después de tanto- dije con lágrimas en los ojos

-ey katy, te amo hermana y ya te lo dije, nunca te voy a dejar si?

-yo también te amo, mucho- dije abrazándolo y llorando en su pecho

Eran sentimientos de bronca por no poder estar con él, amor por las cosas lindas que me había dicho, celos porque una mina que no se lo merecía lo tenia a sus pies. En fin una mezcla de muchos sentimientos encontrados que decidí descargar en ese momento.

-ey bebé no llores, que me vas a ensuciar la ropa y no puedo competir todo lleno de mocos- rio produciendo lo mismo en mi

-perdón, es que me dijiste cosas re lindas, y tengo mucha suerte de tenerte en mi vida

-yo, tengo mucha suerte loquita, ni yo sé como me seguís soportando después de estos 12 años

-naaa yo tampoco sé, soy mágica.

-bueeee ponel...

Un productor interrumpió lo que Mateo iba a decir para decirle que ya se tenía que ir para el escenario porque el espectáculo estaba por empezar.

El asintió y luego de abrazarme una vez más y darme un beso en la frente, yo me dirigí hacia donde estaba Pedro para poder observar todas las batallas.

Mejores amigos, o algo así... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora