Katia y Mateo son mejores amigos hace... bueno ya perdieron la cuenta. Aunque en realidad tan amigos nunca fueron porque desde que tienen uso de memoria hay una conexión entre ellos indescriptible aunque ninguno de los dos se da cuenta, o por lo men...
•Katia• 24 de diciembre, uno de mis días favoritos en el año y que mejor que empezarlo con el pibe que me volvía loca durmiendo a mi lado.
Sonreí por el bombón que me estaba comiendo y me le subí encima a ahorcajadas para empezar a despertarlo con besos
-uff lpm vos me queres matar acaso?- dijo con la voz ronca y los ojos súper achinados, colocando sus manos a ambos lados de mi cintura
-buen día- le sonreí acercándome para darle un beso
-hola reina, ¿queres que arranquemos bien la navidad?- soltó comenzando a acariciarme por debajo de la remera
-bld está tu hermano y tu viejo
-uno rapidito y silencioso, la puerta esta trabada
-dioooos que pibe- sonreí moviéndome encima de él y empezando a devorar su boca
En cuestión de segundos ya estábamos haciendo eso que tanto deseábamos.
•••
-bueno Teo, me tengo que ir- dije abrazada a él mientras le hacía mimitos
-nouuu- soltó haciendo puchero
-dale bebo que a mi vieja le van a dar 3 brotes psicóticos sino la ayudo a preparar las cosas
-bueno dale, está bien. Nos vemos a la noche- dijo dándome un corto beso
-no me vas a bajar a abrir?
-daaa amor, está mi viejo. Alta paja
-qué pibe pajero que sos por dios
-si ya me conoces
-bueno, nos vemos más tarde entonces
-dale hermosa, a la noche nos vemos. Y prepárate psicológicamente para darle la noticia a nuestros viejos
-ay ni me lo digas, que me pongo re nerviosa
-va a estar todo bien, no te preocupes
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•••
Al llegar a mi casa mi mamá ya me estaba esperando, era tradición que todas las navidades cocináramos juntas. Papá se encargaba de la cena principal y nosotras del postre. El resto de los aperitivos los traían los palacios, está era la quinta navidad que pasábamos juntos, así que ya estábamos más que organizados.
Hicimos galletitas caseras, una rosca y algunos budines. A las dos nos encantaba cocinar y por suerte a la gente le solía gustar lo que hacíamos.
Tras unas largas horas, y una vez que ya estaba todo listo, decidí que era hora de prepararme porque en escaso tiempo llegaría, prácticamente mi otra familia.
Mientras me duchaba mil pensamientos recorrían mi mente. Después de más de 10 años de traer a mateo a mi casa, de formar parte de mi familia, lanzar la noticia que teníamos no sabía cómo le iba a caer a nuestros padres y eso me ponía muy nerviosa.
Me envolví en una toalla y me dispuse a buscar un atuendo adecuado para la ocasión, posiblemente entrada la noche saliéramos con nuestros amigos así que debía arreglarme un poco.
Bloquee mi celular y baje a terminar de ayudar a mis viejos con lo que faltaba.
-me dijo Teo que ya están por venir
-Sisi ya se, hable con Juli- respondió mi mamá
-ahh genial, falta algo?
-nono amor, ya está todo. Encárgate de abrirles cuando lleguen
Espere sentada en el sofá unos minutos, revisando mis redes sociales. Hasta que el timbre sonó.
-hola preciosa- sonrío juliana abrazándome. Hacia mucho que no la veía, Pedro y ella se habían separado hacia ya un buen tiempo. Yo lo había ayudado a mateo a superar toda esa crisis cuando ellos se separaron, de todas formas se seguían llevando muy bien, cosa buena para el bien de todos.
Saludé a Pedro con un beso y Emi se me colgó como mono. Amaba a este nene, era el hermano chiquito que nunca había tenido.
-falta mucho para que venga papá Noel tati?
-noo enano no falta nada- le sonreí besándolo por toda la cara y haciendo que el pequeño riera
-hola bobita- sonrío mateo queriendo encajarme un pico que logre esquivar y disimular como las mejores
-sos bld vos?- le susurré
-uhh mal, la costumbre perdón mejor amiga- rio al ver mi cara de nervios
Todos entramos y ellos comenzaron a saludarse con mi familia y empezaron a organizar toda la comida que habían traído.
Una vez que todo estaba listo nos sentamos en la rectangular mesa, yo como de costumbre al lado de mis dos bombones, Emi que cargaba tremenda emoción y mateo que se pasó toda la noche entre darme la mano y acariciarme la pierna bajo la mesa.
Todo transcurría normal, la conversación fluía y el tiempo pasaba. Ya eran casi las 23:30 cuando Mateo sin previo aviso se paró e hizo sonar una copa con una cuchara para que todos lo viéramos.
Ay no, ay no, ay no, ay noooo- pense nerviosa
-veni blda- sonrío mateo invitándome a pararme a su lado- bueno gente queríamos aprovechar este momento ya que estamos todos juntos para darles una noticia muy importante...
Los ojos de nuestros padres iban de un lado para el otro, y yo por mi parte me estaba por morir de los nervios
-bueno como saben katy y yo somos mejores amigos hace muchísimos años, y aunque muchas veces ustedes nos han preguntado si éramos algo más y nosotros lo negáramos la realidad es que estoy enamorado de esta pibita hace Banda de tiempo. Así que hace muy poquito decidimos empezar a ser algo más que amigos y bueno nada... básicamente les queríamos decir que somos novios- rio nervioso rascándose la nuca
-osea que se dan besos, diaaaghh que asco- soltó Emi cortando con el silencio incómodo y haciendo que todos riéramos
-siempre supe que el teito te encantaba así que estoy muy feliz por ustedes chicos- sonrío mi mamá contenta
-viste bld, yo te dije. Nana alto crack me debes alto asado- rio mi papá dirigiéndose a Pedro
-es joda que apostaron por nosotros- solté haciéndome la indignada y cruzándome de brazos
-y si más vale katy, al fin el bld este está con una piba como la gente- me sonrío Pedro
Después de seguir dando algunos detalles sobre nosotros y agradecer porque nuestros viejos se lo tomarán bien, se hicieron las 12 y por tanto era momento de felicitarnos y abrir los regalos...
