I'll be my own hero || Bakugou x ________

Capítulo O4

Al llegar al apartamento de Izuku, se despidió deseándome un buen día, en ese instante recordé el parecido con quien supuse sería su madre, eran idénticos, sonreí ante el gesto y entre en el apartamento lúgubre que me pertenecía, aún con pocas cajas por desempacar pero siendo decorado casi por completo por decoraciones en negro, gris y uno que otro color.

Los quehaceres del lugar eran mínimos pues solo una persona habitaba ahí, tras dar un pequeño vistazo a que todo estuviese en orden me lance al sofá enorme pasando el resto del día observando el boceto que había enviado para el traje de la U.A, cabe destacar que no soy ni por mucho la persona con los planes detallados, ni la diseñadora de la vida, pero algo si tenía claro, tenía que ser cómodo, no podía permitirme una armadura, aunque el combate cuerpo a cuerpo no es exactamente lo mío, necesitaba poder fluir, cosa que si era mi campo, ser rápida.

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Era demasiado temprano como para poder observar a lo lejos en las calles, caminando me encontraba ocultando mi boca en una frondosa bufanda, cargaba mi maletín y ya me desplazaba hasta la academia, no era puntual, de hecho era uno de mis defectos, pero la noche anterior apenas y pude dormir, las expectativas que tenía sobre mi, se triplicaron al ver que todos podrían ser mejor que yo y no poder siquiera seguirles el paso.

Estaba tan sumergida en mis pensamientos que el chocar con una masa apenas me hizo volver al mundo real con cierta extrañeza.

—¿¡Acaso no vez por donde andas, idiota!?—

Alego un rostro realmente molesto en mi dirección, estuve apunto de disculparme cuanto reconocí el tan alborotado cabello rubio, y la grave voz que dirigía la palabra como si nadie lo mereciese.

—Entonces no te metas en mi camino.—

Alegue viéndole a los ojos y pude notar como su ira comenzaba a brotar de sus poros, casi literalmente al notar cierta lucecilla en sus dedos.

—¿Qué has dicho?—

Murmuró amenazante.

—Lo que has oído.—

Levanté mi rostro en su dirección, si pretendía intimidarme no lo lograría.

—¡Dímelo a la cara!—

Su frustración se volvió por un instante agresiva, cosa que me hizo entrar en un estado de alerta, y si me ponía a pensarlo bien, él no dudaría en lanzarme lejos.

—No tengo tu tiempo.—

Alegué moviendo su cuerpo con mi hombro al pasar a su lado; pero no pude evitar sentirme en derrota cuando oí una risa tras de mi.

—Justo como lo pensé, extra.—

Los pasos tenues comenzaron luego de que emprendiese mi camino de nuevo, con la sangre hirviendo el frío fue mínimo.

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—Ryoku, Katsuki y Tenya—

El profesor con vendajes habló leyendo un papel, nos encontrábamos de pie frente a un centro de simulación que hacía exactamente de una ciudad.

—¿Tenya?—

Pregunté al aire sin necesidad de preguntar quien era el segundo integrante, pues ya le ubicaba mejor.

—¡Hagamos un plan! Tenemos que armar una estrategia.—

Una mole se paró tras de mi envuelto en una armadura, me tensé por la sorpresa y la energía con la que se acercó a mi persona, al girarme me asombre pues en comparación con su traje, el mío parecía un atuendo de cualquier civil.

—Supongo que tú eres Tenya.—

Reí aunque me sorprendió que me reconociera en el primer instante.