Camille no pudo recordar exactamente lo que pasó antes del accidente, pero si cuando despertó.
Su piel estaba pálida, algunos huesos levantados por delgadez y venas que eran más notorias de lo deseado. Apenas podía mantenerse en pie, estar sin comer cosas sólidas por un mes la había debilitado, caminar más de 15 pasos significaba alguna taquicardia o un desmayo.
No entendía nada, y tampoco podía hacer nada, creyó caer en locura si estaba un día más en el hospital.
Tenía algunas heridas viejas, rasguños que su piel había regenerado pero aún con sangre seca. Lo que más le llamó la atención, fue una cicatriz pequeña, sin puntos ni muy nueva, tenía la forma de una x y estaba en su muslo interno.
-Debe ser una coincidencia--Habló su madre.
Pero estaba ahí, infectada, pero en la misma ubicación del muslo, parecía tan pequeña he insignificante.
No tenía frente al cadáver de la niña precisamente, pero habían fotos, muchas arriba de la mesa con cada parte de su cuerpo, pies, manos, piernas. Moretones y heridas, con cada parte peor que la anterior debido a los gopes marcados.
Tal vez ese asesino la había tratado de violar, pero Ruel la defendió.
-Pero ya descartamos esa posibilidad--Hablo el Sheriff.
-¿Por qué?--lo miró la joven.
El quito las fotografías excepto la del muslo, sacó otra carpeta de fotos que tenía el nombre de ella.
-Cuando Camille fue tratada de su fractura, hicimos una revisión del tu cuerpo cuando ya estabas estable--Ojeo las fotos--Tal vez perdimos pistas que habrían dejado sobre ti, como huellas, sangre, pelo, pero también encontramos esta marca--Mostró su foto.
-Solo que cuando la encontramos ya estaba cicatrizada, los doctores comentaron que tenías está marca mucho antes del crimen.
A U R O R A
-¿Siempre ha sido así?
-¿Así como?--Inquirió Jack
-Con esa expresión--Gabriela rodó los ojos-- Miralo, es como si todo el tiempo planeara de matar a alguien.
Daniel sé quito uno de sus audífonos mirando raro a la risada-- Definitivamente hablaba de él-- Pensó sin dudar.
-Qué siempre este callado no significa que tengo una pistola en mi mochila.
-Es lo que diría alguien que tiene un arma en su mochila.
-Solo es una navaja de plata-- Vaciló.
-Podemos ver?
-No.
Jack había puesto toda su atención en la mochila de Daniel. Anticipado a los demás, el chico de ojos azules se marchó, justo cuando los demás venían a comer. Casi bajo esquivó a Camille, cruzaron una mirada fugaz, ¿Siempre era indiferente? Se preguntó mientras pisó la cerámica, era alguien cerrado y callado, aunque no podía decir mucho ya que su comportamiento era casi igual.
-¿Algo que tengas que contar?--Se dirigió a Camille.
-Jack--Jonah lo miró severo.
-No importa...
La chica fue franca con sus amigos apenas sentarse en la mesa. Tenía que contar y expulsar, ya era terapéutico tener más de un oído. Al fin de unos minutos, cada chico estaba a la deriva en su imaginación buscando una explicación.
-¿Puede ser solo una conciencia no?--Suspiró la pelirroja.
-¿Una marca en el muslo? La compartes con una muerta, y considerando que tú casi mueres. Y si Ruel trato de salvar...
-Ya le dijeron que estaba de mucho antes--Jonah le comento a Jack--Además, la chica fue violada...Camille nunca lo fue.
"Y si...aún no lo recuerda?"
...
-¿Y sí por esa razón querían matarte?
Los ojos miel de Gabriela penetraron sus verdes, como si fuera una verdad absoluta a pesar de que solo fue suposición de ella. Todo fue en picada desde ahí.
Necesitaba salir corriendo de ahí.
Por qué todo estaba sofocando, en el pueblo faltaba oxígeno.
Por qué la mirada de alguien ajeno podía resultar ser su asesino.
Por qué sus padres quedaban hasta altas horas vigilando que todo estuviera bien, y que su chica pudiera dormir en paz.
Y ella no podía hacer nada, seguiría haciendo nada.
~°~
El bosque de el pueblo era escalofriante en todas las estaciones del año. Comenzando con una rosada y viva entrada de cerezos, mientras seguías más profundo los eucaliptos tapaban el sol, y algunos troncos viejos podían imitar la silueta tétrica de una persona muy alta.
-¿Y que le pasó?
-Trató de estar calmada, Gabriela me ayudó y ahora están juntas en casa.
Las ramas eran crujientes, y el sonido lo hacía recordar. Podía ver a Corbyn correr delante de él mientras sus manos tenían sangre, y el no podía entender porque todo esto estaba pasando.
-¿No le has dicho nada?-- El chico se dirigió a Jonah.
-¿Que estuvimos en la noche que casi muere? Aún no puedo decirle mientras yo no sepa lo que pasó al 100%...
-Siempre te voy a agradecer que viniste por nosotros Jonah
-Quiero respuestas... Tú debes saber más que yo, como quien es el asesino.
-Aun no puedo decir nada. Tal vez después que sepas actúes muy rápido, y cometas algún error que nos pueda valer la vida.
-Eres igual que Corbyn--Murmuró.
-No soy el enemigo Jonah.
Ambos chicos llegaron a la cascada, sacaron el equipo de buseo mientras escuchaban atentos el agua.
-¿Por qué aquí?
-La corriente es muy fuerte para dejar que se quedara en el río, hay más posibilidades de que haya caído por aquí.
-El agua es muy profunda.
El otro chico lo miró amenazante mientras le daba sus visores. Ambos ansiosos y con el tiempo contado hasta que bajara el sol, dejaron que el frío tocará su piel, probablemente terminarían enfermos.
-No importa si nos queda mucho tiempo, tenemos que encontrar la caja.
Encontrarla antes que ellos.