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Transcurrieron exactamente quince días en los cuales Virtuosa salió y hablaba de Jesús a cada joven que podía, mientras era observada desde una mesa, detrás de las hojas de un libro por la linda Señorita del fallido intento anterior.
Virtuosa decidió no acercarse a la Señorita durante ese plazo de tiempo, lo que si hizo; fue orar cada noche por ella pidiendo a Dios que fuese él quien tocara su corazón.
Cuando Virtuosa terminó de hablar con diferentes jóvenes que se encontraban presente en la cafetería, se dirigió a la barra para pedir su merengada favorita y durante su espera escucha una voz femenina que dice. ___¡Ey! Tú chica tonta.
Virtuosa mira a todas partes y como ya nadie se encontraba en la cafetería; a parte de ellas dos, extrañada pregunta. ___ ¿ Me hablas a mí?
___ Claro, eres la única tonta que veo aquí.
Virtuosa desde el lugar en el que se encuentra responde. __ Ah sí... qué raro; porque yo también veo solo una, pero que puede dejar de serlo y esa eres tú.
La señorita manifestando un notable desinterés en su lenguaje corporal, toma su libro y se acerca hasta el lugar donde Virtuosa se encuentra y le dice. ___ Respóndeme algo chica tonta ¿ Por qué razón cada tarde te encuentras aquí molestando a todos?.
Virtuosa atiende a su pregunta diciendo. ___ Hola, mi nombre es Virtuosa. Extiende su mano para hacer más formal la presentación.
La señorita con un tono burlesco responde. ___ ¡Patética!, pero me agradas. Sin responder a su saludo de mano .__ Entonces cuéntame ¿ Por qué incómodas a todos?. Repitió la Señorita.
___ Lo que me ves hacer todas las tardes es hablar de Jesús de Nazaret a cada uno.
___ Ah si, en algún momento de mi vida escuche hablar sobre él. Pero la verdad... ya no recuerdo mucho. Responde la señorita experimentando un sentimiento desagradable del cual desconoce su origen.
___ ¿Dime te gustaría conocerle?.
___ No es de mis temas preferidos, pero tú eres agradable así que... Acepto, si me gustaría.
Virtuosa entonces le dice.___ Aquí mañana a la misma hora.
___ Trato hecho chica tonta.
Después de este segundo encuentro en la cafetería. pasó justo un mes, en el cual Virtuosa y la señorita se reunían cada día a la misma hora, y con la misma bebida. Virtuosa con una merengada de fresas con agregado de leche condensada y la señorita con un batido de chocolate y agregado de maní caramelizado, las dos jóvenes hablaban por horas sobre Jesús, pero la señorita aún no decidía recibirlo en su casa y tampoco había querido aceptar la invitación a la iglesia.
Hasta que un buen día; mientras Virtuosa se tardó en llegar, la señorita comenzó a meditar. Sin comprender muy bien el significado de sus pensamientos.
__ ¿ Y por qué no dejar entrar a mi casa a este Jesús? No lo conozco muy bien y no lo comprendo del todo, pero parece confiable, no creo que me robe el corazón lo hiera y entonces se de a la fuga. ¿Qué es lo peor que puede pasar, si decido confiar en él?. Se pregunto la señorita mientras en voz alta dice. __ Decidido hoy le diré a Virtuosa que dejare entrar a Jesús en mi casa. Hace una mueca con su cara y sigue ___ total, peores decisiones he tomado.
Y fue este día cuando la Señorita dejo entrar a Jesús en su casa para que trabajara en ella. Dando inicio a la travesía donde la Señorita esta dispuesta a dejar que Jesús habite solo en el cuarto de huéspedes de su casa.
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Jesús en el cuarto de huéspedes (Editando)
EspiritualUn cuarto de huéspedes es una excelente opción cuando queremos hacer sentir a nuestros invitados especiales. Pero... ¿Qué harías?, si uno de tus invitados al llegar a tu casa y tu confiadamente le asignas el cuarto de huespedes, pues es el indicad...