↳No es Realidad Virtual

No es coincidencia

-¿Eh? ¿¡EHHHHH!? -Exclamo Eugeo-

"E-Esto es... IMPOSIBLE" se dijo a si mismo.

¿Que está pasando? Excelente pregunta lectores. Resumiendo todo, nuestro rubio protagonista se encontraba mirando directamente al azabache quien estaba sentado en frente suyo junto con muchas chicas cómo de costumbre.

-¿Pa-Pasa ALGO Eugeo? -Pregunto Alice golpeándolo con el codo-

"¿Por que y cómo terminanos así?" siguió preguntándose en su mente.

Tiempo antes~

-Las clases son taaaaan aburridas. -Dijo la rubia tirándose sobre su carpeta-

-Las clases ni comienzan ¿Y ya te aburren? -Pregunto Eugeo-

-Es que... -Dijo lagrimeando- Haa... Verdad ¿Tienes planes en la tarde?

-Oh no. No volveré a jugar Fornite con tus amigos ¡Y menos contigo!

-¿Es porque eres manco?

-Estabamos eligiendo una skin y uno ya gritaba como si lo hubieran matado.

-No es para tanto.

-Cuando conseguiste tu primera victoria pateaste la computadora del cyber y empezaste a bailar justicia naranja. ¿En serio no crees que es mucho?

-Hasta ahora le debe el dinero de esa computadora al señor. -Llora-

-En fin. ¿Hoy iremos al club?

-Si, hay más gente inscrita.

-Se supone que ese era nuestro lugar de frikis. -Triste-

-Los Funkos de edición limitada tendran que irse a mi casa.

-¿Que? Recuerda que pagamos mitad y mitad por esos Funkos. Una semana se irán contigo y otra conmigo.

-Haha, está bien. -Rio- Oye... ¿Hablaras con Kirito? Llevas mucho tiempo diciendo que le hablaras, pero no ha pasado nada. ¿Quieres que te ayude?

-N-No será necesario. Creo que debería olvidar~

-Dijiste eso la vez pasada, llegaste a mi casa y te tiraste encima mío mientras jugaba God of Wars.

-Te arruine la partida ese día... Estuve vetado de ir a tu casa por dos semanas.

Suena la campana.

-Se fue nuestro último recreo. -Dice Eugeo triste- Iré a sentarme.

-Seguiremos hablando en el club. -Respondio-

La rubia asintió y volvió a dormirse sobre su carpeta hasta que terminara su infierno.

Una hora y medio después~

-¡Por fin! ¿Ya terminó el año escolar verdad? -Pregunto la ojiceleste-

-Haha. -Rio delicadamente el contrario- Vamos al club.

La chica sonrio y se puso al lado de su amigo.

-Bueno, continuando con la conversación de hace un rato... ¿Estás seguro de que vas a poder olvidarlo?

-Haa... Si. Osea, no creo que tenga tan mala suerte como para... No se... ¿Encontarmelo en el club? Hahaha, eso sería muy tonto.

El rubio abrió la puerta del respectivo salón, encontrándose dentro de él a un azabache rodeado por cuatro chicas.

-¿¡EH!? -Grito el ojiverde-

Los cinco personajes que se encontraban sentados voltearon a ver al chico.