LOCURA ☆ Trueno y Ecko

𝑡𝑤𝑒𝑛𝑡𝑦 𝑛𝑖𝑛𝑒

Aprendí a disfrutar de lo malo...

ESPERANZA;

Justo me llega un mensaje en el teléfono, que lo tenía en la mano. Es un mensaje de Cris. "No seas amargada y muévete encima de él, se ve que te tiene ganas desde hace rato"

La miré y me miro con cara de pervertida.
Me puse tensa al notar las manos de Mateo en cada lado de mis caderas, haciendo presión hacia bajo, escucho un gruñido por su parte.
De la nada mi enfado se esfumó, empecé a tener ganas de disfrutar. Empecé a moverme, cantando la canción de fondo, eso hace que Mateo me agarre más fuerte de la cintura y me pegue aún más a él. Se reía en mi oído sensualmente, hasta que por fin llegamos a la discoteca. Salimos todos del vehículo y entramos.

Fui junto mi prima a la barra y pide una bebida para las dos que ni yo tenía idea. Las horas pasaban y la verdad que no me importaba donde estaban los demás.
Las ganas de hacer mis necesidades se hicieron presentes, subí las escaleras y entré al baño... Mala idea, Mateo está con otra chica. Yo no me me quería acercar a ellos, pero empezaba a dolerme por aguantarme el pis. Pasé por su lado y no le di importancia si notan mi presencia.
Al abrir la puerta después de haber hecho mis necesidades, vi a Mateo parado frente a mí. Fruncí el ceño y fui hacia el lavamanos, él se puso detrás de mí, colocándome el pelo de la espalda hacia un lado. Empezó a darme besos por la nuca, yo me di la vuelta para intentar salir, pero fue peor porque me quedé a centímetros de sus labios. Me empezó a acariciar la espalda bajando a mis glúteos, con la otra mano en la pierna, ahí fue cuando nos interrumpió unas chicas que entraron borrachas, gritando cosas que no tenían sentido, una de ellas era Gala. Me separo de él con rapidez cuando me di cuenta que era ella y salí de aquel lugar. Mateo me siguió, estaba justo detrás de mí, siguiendo mis pasos. Fuimos en busca de los demás, nos fuimos a casa de la misma manera que antes, pero esta vez yo sin moverme y sin despejar la mirada de la ventanilla.