Capítulo 8

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Nathaniel con una cerveza en mano miraba como Chloé iba de un lado a otro abriendo las cortinas de los ventanales y moviendo las sillas de su nuevo comedor que consiguió a un precio de remate.

—¿Me explicas qué tanto haces? —Se atrevió a preguntar el pelirrojo apoyando su mejilla en una mano.

—Arreglo el escenario.

Bourgeois colocó una silla al lado de su acompañante, se deshizo la coleta alta que llevaba y empezó a acomodar su cabello intentando que no se viera tan esponjado.

—¿Cómo qué escenario?

—¿Tienes Instagram?

—Eh...

—Subiré un story casual y tú saldrás en el fondo, el chiste es que la gente note tu presencia poco a poco y entonces podamos soltar la bomba de manera natural.

La rubia tomó su celular y empezó a digitar su pin para desbloquearlo.

—¿En serio te parece buen plan?

—Claro, aunque han pasado los años sigo en la mira de los medios, empezaron a especular y entre más veces te vean más creíble será.

—No lo sé, Chloé, ¿no era suficiente con salir eventualmente y pasear por las calles de la ciudad?

—Oh ingenuo Nathan, nunca es suficiente... Además, en la actualidad todo lo que pasa en tu vida lo cuentas en alguna red social o incluso todas —afirmó la muchacha mirándolo divertida.

—Sí bueno, llevo seis meses sin pagar el internet así que super normal que no cuente mis actividades 24/7 —comentó burlón volviendo a beber de su cerveza—. Da pereza subir estados a cada rato y que creepy que todos conozcan tu rutina.

Chloé hizo una mueca, subió sus piernas a la silla para sentarse como indio y abrió la aplicación previamente mencionada.

—Últimamente he pensado en cortarme el cabello, pero aún me cuestiono si hacerlo en capas o el despunte de siempre... ¿Ustedes que recomiendan?

Terminó de grabar y dio click en "subir historia", sonrió satisfecha, sin embargo, su expresión se desvaneció al escuchar la risa de Nathaniel.

—¿Qué?

—No, nada, solo me parece curioso cómo te diriges a tus "fans" —respondió haciendo comillas con los dedos.

—No sé qué te sorprende, siempre me ha gustado ser admirada por demás —respondió la rubia tecleando en su smartphone.

—Claro, solías ser la princesa que deseaba tener a todos cual sirvientes y que aplaudieran como focas cualquier comentario tuyo, aunque estuviera cargado de veneno —Se mofó el pelirrojo terminando su bebida, no pudo verlo, pero sus palabras dejaron de piedra a la muchacha.

—¿Tan mal concepto tienes de mí? —cuestionó incrédula.

—Todos lo tenían, Chloé. Nunca fuiste muy dulce que digamos... —respondió mirándola de reojo.

—¡He cambiado! —Bourgeois dejó caer sus palmas sobre la mesa con algo de agresividad—. Perder a mi padre me hizo entender que todo el dinero y poder que puedas llegar a tener no te garantizan nada, somos simples mortales que necesitamos más de otros que de alguna joya o bolso caro.

Lentamente bajó la mirada, le dolía recordar lo sola que se sintió cuando André Bourgeois dejó este mundo, aunque tenía a Sabrina y Adrien ellos también tenían amigos y era testigo de cómo iluminaban sus vidas con algún mensaje gracioso o una llamada de felicitación. Ella también quería eso, algo sincero, no esas hipocresías típicas de la gente que frecuentaba al ser miembro de "la clase alta".

[HIATUS] Nuestro Desastre | Nathloé [MLB]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora