Capítulo 5.

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— Bueno, ya llegamos. — Dijo él.

— Chat, estaba haciendo un trabajo con ese chico. — Lo mira.

— No sabía que los trabajos se trataban de declaraciones de amor. — Dijo el sarcásticamente.

— Estabas espiando? — Le dijo la chica de ojos azules.

— Qué? Yo? Espiar? Nada que ver, pasaba por ahí y te encontré. Eso es todo. — Dijo él medio sonrojado.

— Debería creerte? — Ella bromeó.

— Claro que si, princesa. — Le sonrió.

— Bueno, igual si me salvaste. No sabía que decirle a Nathanael. — Dijo ella.

— Te gusta? — Dijo él con voz más apenada.

— N-no, o bueno, no sé, creo que estoy confundida. — Dijo ella.

— Confundida? Hay alguien más? — Preguntó él.

— Alguien más? No, ósea nada. — Dijo nerviosa.

— Ah, está bien. Espero que le des esa oportunidad. Harían una linda pareja. — Dijo serio.

— E-eh muchas gracias. — Dijo ella.

— Bueno, debo irme. Adiós. — Dijo él.

— Adiós. Cuídate. — Le gritó, porque él ya se había ido.

Narra Marinette.

No sabía que le pasaba, se volvió serio y distante.

Narra chat noir.

No se que me pasa, no se porque siento esto por ella si solo somos amigos.

En Paris.

Un nuevo villano ataca por las calles parisinas, se trata de Oblicuo. Todos quédense en su casa y esperen a que Ladybug y Chat noir aparezcan, para salvarnos. — Esto es Nadia Chamak, corté.

...

— Chat noir, fíjate en sus patines. — Dijo ella seriamente.

— Crees que esté ahí el akuma? — Dijo él.

— Creo que si, necesito que hagas tu cataclismo en el suelo. — Le dijo.

— Claro, mi lady. — El le respondió, dando un salto para hacer su cataclismo contra el suelo.

— Listo. — El le gritó.

— Luky Charm. — ¿Qué puedo hacer con esta almohada?. Pensó ella.

— Ya sé. — Dijo la chica de ojos azules.

...

— No habrá más maldades para ti pequeño akuma, yo te libero del mal.

— Ladybug Milagrosa.

— Ganamos. — Extendió su puño hacia el de chat noir.

— Si, ganamos. — Dijo él con una sonrisa.

— Bueno, debo irme. Ya me voy a transformar. Cuídate gatito. — Dijo ella con una sonrisa.

— Adiós, mi lady. — Dijo él sonrojado.

En la noche.

— Tikki, no se que hacer.

— Con qué? — Respondió su kwami.

— Con chat noir, creo que lo quiero.

— Lo quieres? Ve y dile lo que sientes. — Dijo su kwami muy feliz.

— Es algo tonto, me gusta un súper héroe. Ni siquiera se quien esta detrás de esa máscara. Es una tontera tikki. Olvídalo. Vamos a dormir. — Dijo ella tristemente.

— Pero Marinette. — Dijo su Kwami triste.

— Buenas noches tikki. — Dijo la chica de ojos azules.

...

Toc toc.

— E-eh? Tikki?

— Marinette, no se quién es. — Dijo Tikki asustada.

— Es de la ventana, voy a abrir.

...

— Chat noir? Qué haces aquí? — Dijo Marinette sorprendida.

— Pasaba por acá y decidí venir a saludar. — Dijo él fingiendo una sonrisa.

— Estás bien? — Dijo ella.

— Si, mentí.

— Bueno, no crees que ya es muy tarde? — Dijo ella tristemente.

— Lo sé princesa, solo quería verte. — Dijo él y la abrazó.

Narra Marinette.

Cuando me abrazó sentí paz en sus brazos, quería quedarme ahí por siempre.

Narra Chat noir.

La abracé, y sentí una calidez en su abrazo. Quería quedarme ahí por siempre. Me hacía recordar a mi Madre.

...

— E-eh perdón. — Dijo él sonrojado.

— Ey gatito tranquilo. — Dijo ella sonrojada y riendo.

— No te rías. — Dijo él con una sonrisa.

— Es que das ternura. Eres adorable. — Dijo ella feliz.

— Sabes? Eres increíble Marinette. — Dijo él mirándola a los ojos.

— G-Gracias chat. — Dijo ella sonrojada.
Ya tienes que irte tontin. — Dijo ella riendo.

— Nos vemos mañana princesa. Que descanses. — Le sonrió, y se fue.

— Ay tikki. — Dijo Marinette feliz.

— Marinette, se gustan. — Dijo la kwami sonriendo.

— Me gusta, me gusta mucho. — Dijo la chica de ojos azules.

— Tienes que decírselo. — Dijo la kwami.

— Te prometo que pronto lo haré. Buenas noches tikki. — Dijo ella emocionada.

— Buenas noches Marinette. — Dijo la Kwami.

Je t'aime. // Marichat.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora