Capítulo 18.

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Narra Chat noir.

Iba saltando por los tejados, dirigiéndome a la casa de Marinette. Quería decirle si quería venir conmigo, en persona. Y cuando llegue me encontré con ella y alguien más.

— Hola. — Dijo una voz ronca.

Marinette se dio cuenta quién era, su novio.

— E-eh ¿Chat noir? ¿Qué haces aquí? — Dijo Marinette nerviosa.

— Hola chat noir. — Dijo Nathanael sonriendo de manera triunfante.

— Lo siento por interrumpirlos. — Dijo Chat noir molestó. Me voy, nos vemos más tarde.

Marinette lo agarró de la mano.

— ¿Pasó algo? — Dijo ella mirándolo a los ojos.

— Si, venía a invitarte a una fiesta. Miró a Nathanael. Pero veo que estás bastante ocupada, hablamos mañana. — Dijo Chat noir.

— Pero Chat noir, quédate. — Dijo él pelirrojo con un tono de voz extraño. ¿Será que tramaba algo?

—¿Para qué? — Dijo él felino.

— Para que nos acompañes. — Dijo Nathanael.

— Okey. — Dijo Chat noir enojado.

— Nathanael está acá, para pedirnos perdón. Chat. — Dijo Marinette más tranquila.

— Bueno, disculpa aceptada. — Dijo Chat noir enojado.

— ¿Q-quieren algo para beber? — Dijo Marinette nerviosa.

— Si, por favor linda. — Dijo Nathanael a Marinette.

— E-eh bueno, ya vuelvo. — Dijo Marinette muy muy pero muy nerviosa.

Hubo un silencio entre los dos.

— Marinette va a ser mía, Chat noir. — Dijo él pelirrojo.

— Sabía que tus intenciones no eran buenas, te aseguro que no permitiré que eso pase. La cuidaré de ti, si hace falta. — Dijo Chat noir enojándose aún más.

— ¿Crees que Marinette te quiere? Pff claro que no, te utilizo para olvidarse de alguien más. — Nathanael río.

Chat noir comenzó a reír.

— Mira Nathanael, digas lo que digas, hagas lo que hagas, con Marinette nos amamos, y eso ni tú ni nadie puede cambiarlo. Y ahora si me disculpas, debo ir a ayudar a mi princesa. — Dijo Chat noir y se retiró de la habitación.

Se dio cuenta que Marinette estaba afuera escuchando todo, y se dio cuenta de que estaba sonriendo.

— ¿Porque sonríes princesa? — Dijo él dulcemente.

— Porque fue lindo lo que dijiste gatito. — Lo besé.

— No me gustó llegar y encontrarlos juntos. — Dijo él avergonzado.

— Recién había llegado, para pedir perdón. Y cuéntame, cómo te fue con tu papá? — Dijo ella preocupada.

— No notaron mi ausencia. Igual ya esta princesa. Te tengo a ti y soy feliz. — Dijo él. ¿Querrías venir hoy conmigo?

— Claro que si gatito, ella le respondió.

— No me dejes. Dijo él.

— Nunca.

— Bueno volvamos, dijo ella.

— Vamos princesa.

...

— Y bueno Nathanael, gracias por las disculpas, ahora puedes irte. — Dijo Marinette un poco nerviosa.

— Puedo quedarme un rato más, junto a ti. — Dijo él más coqueto.

— ¿Qué parte del "ahora puedes irte" no entendiste? — Dijo Chat noir enojado.

— Chat. — Dijo Marinette mirándolo.

Chat suspiró.

— Contrólate gato, que por esa actitud puedes terminar perdiendo a la chica que amas. — Nathanael río.

— No te metas conmigo. Dijo Chat noir enojado.

— Basta. — Dijo Marinette.

— Pero si vez que él empieza y no le dices absolutamente nada. Dijo Chat noir molestó.

— ¿Qué quieres que le diga? — Dijo Marinette enojada.

— Que me quieres a mi Marinette. Eso quiero, y no lo haz notado en ni un momento. — Dijo Chat enojado.

Nathanael sonrió, por fin se estaban peleando, y por su culpa.

Je t'aime. // Marichat.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora