Viernes
Al fin viernes, no sólo era el inició del fin de semana si no que también era el día que había estado esperando, ¿Esperando? Sí, no voy a negarlo, no hoy...quería estar con él.
Él, mi compañero, mi amigo, mi confidente, mi todo. Es que sí, Rodolfo era todo eso en mi vida y mucho más, era el hombre que más me había durado en la vida, eso había dicho el una vez y tenía razón. También era una de las pocas personas que me comprende, que sabe escucharme y aconsejarme, también me reta cuando es necesario, me deja volar pero me devuelve a la tierra, se que siempre que lo necesite él va a estar así como yo estaría para él.
Estaba tan metida en mis pensamientos qué no había escuchado que golpeaban la puerta, con mi mejor cara de dormida y una bata fui a abrir ya que si habían llegado hasta ahí es porque era alguien de confianza y así fue, del otro lado de la puerta se encontraba Flor
-¿Qué haces acá? - dije abrazándola y permitiéndole el paso-
- Yo creo que tenemos una charla pendiente desde que me dejaste clavada en tu camarín y te fuiste a maquillaje
- Yo creo que la charla terminó ahí pero igual sos más que bienvenida. ¿Café?
- Si todavía no desayunaste sí, sino no importa.
-Acabo de levantarme de la cama, ¿Haces las tostadas?
Una vez que teníamos el desayuno listo nos sentamos a hablar de todo un poco, el trabajo, mi separación con Sebastián, libros, de su vida pero como era sabido no iba a dejar pasar el tema "Barili"
-Bueno basta de hacerte la boluda y cambiarme de tema, nosotras estábamos hablando de algo y no quiero que me esquives el tema.
-Creo que se de que hablas pero yo no esquivé el tema en ningún momento
-Barili, vos, a mí no me pueden mentir, los conozco y los quiero mucho a los dos...
Notificación entrante en mi celular
Mensaje de WhatsApp
"Rodi:
Buen día Cris.
Sigue en pie lo de esta noche?
Te cambio el plan.
Te paso a buscar por la radio y vamos a cenar.
