Pov Cristina
Me quedé dormida, estaba cansada, cansada y feliz, o eso creía.
Me desperté al rededor de las 13.30hs, parece ser que el vino había hecho algún efecto en mi ya que por lo general no duermo tanto y además tenía un dolor de cabeza bastante fuerte. Me levanté para prepararme un café y ahí sentada en el living me puse a pensar en todo lo que había pasado la noche anterior, pero esta vez estaba analizando bien las cosas. No podía ser, no tendría que haber besado a Rodolfo, no tendría que haberle dicho que me pasaba lo mismo, y él tampoco se tendría que haber arriesgado así, ¿Que iba a pasar de ahora en más?
La cabeza me daba vueltas y no solo por las preguntas que ahora se generaban y los miedos que re aparecían, habíamos tomado bastante, bueno en realidad yo había tomado mucho más que él y ahora era eso lo que estaba pagando. Me dirigí a mi habitación y ahí sobre la mesa de luz estaba mi celular.
Lo tomé y ví que tenía un mensaje de Rodolfo pero preferí no abrirlo ahora, el punzante dolor no me dejaba pensar con claridad, me decidí por cerrar las persianas de mi habitación e intentar seguir durmiendo y así fue hasta las 16.30hs. Ni siquiera yo podía creer que había dormido tanto, quizás era el cansancio acumulado de la semana sumado a las largas horas de trabajo, más la noche de anoche...
Y que noche la de anoche. Ahora podía pensar con claridad, ya no creía que las cosas con Rodolfo estuvieron mal pero si un miedo se introdujo en mí, un miedo en el que no había pensado hasta ahora ¿Qué pasaría con el trabajo si nos peleamos por esto? Es que claramente ninguno de los dos había pensado en eso, ya nos costaba bastante disimular nuestras discusiones por temas estúpidos en los que no coincidíamos en pensamientos, ¿Cómo haríamos ahora que estaba en juego algo más?
¿Algo más? Si, me estoy adelantando, anoche simplemente nos besamos y ahora pienso en que somos algo más, ¿Que me estaba pasando? Simplemente fue un beso, y una hermosa declaración de sentimientos. Pero nada más que eso. Trate de despejar mis pensamientos retomando la lectura de unos libros que había abandonado hace un tiempo.
***
El domingo fue mas movido, fui al gym, leí los diarios, salí a comer, todo para tratar de no pensar en Rodolfo pero cuando llegó la tarde y agarre mi celular encontré otro mensaje de él. No sabía que hacer, responderle o no...otra vez este sentimiento de miedo se apoderó de mí. Solté el celular decidí abandonarlo hasta mañana, puse música, llene una copa de vino y seguí leyendo mis libros.
Lunes
Me desperté muy temprano, demasiado. No podía dormir más, tenía que hacer unos trámites antes de ir al canal, quería terminar temprano para poder hablar personalmente con Rodolfo, habia leído sus mensajes, me dió pena no contestarle o llamarlo pero decidí que sería mucho mejor sacar mis miedos personalmente; aunque él en uno de sus mensajes me había preguntado si tenía planes para la noche y quizás podríamos habernos visto yo había visto ese mensaje a la madrugada y era tarde para decirle que venga aunque algo en mi interior me decía que si yo lo llamaba él iba a venir, siempre lo hizo. Recuerdo una noche hace varios años, me sentía tan mal, tan sola en esta gran ciudad y por inercia marque su número y aunque en ese tiempo el vivía en la plata se apareció en mi casa con helado para hacerme compañía, esos pequeños actos de amor que nunca olvidaré son los que día a día afianzaban más nuestra amistad y; también confundían nuestros sentimientos.
***
Me estaba empezando a desesperar, eran las 16:45 y yo aún no había terminado con los trámites que tenía, llame a un productor del canal para avisarle que no llegaría a horario pero que no se preocuparan porque ya tenía las notas terminadas en mi pen drive.
Lo que más me molestaba de todo esto es que no iba a poder hablar con Rodolfo. O quizás si pero el siempre iba a redacción y ahí no íbamos a poder hablar, debía ser antes, algo que ya no podría ser, o después pero el tiempo era muy acortado y era imposible hablar después del noticiero ya que debía salir corriendo hacia radio mitre.
