Encuentro Accidental [AppleTiara]

Tranquilidad

  
  
  
  
  
  
 
 
Diamond Tiara: -Riéndose a carcajadas.- ¡Perdón! -Disculpándose.- Soy cosquillosa. -Decía, cuando Applebloom llegó a acariciarle la entre pierna sólo con la mano.-

Applebloom: y eso que ni siquiera llegué más allá de la parte superficial. -Comentaba la chica de ojos verdes. Se habían movido al cuarto de la pelilavanda entre beso y beso, dejando sus prendas botadas por el pasillo. Applebloom estaba encima de ella, aún llevaba su pantalón, Diamond también, sólo que tenía el cierre abierto y bajado hasta la mitad del muslo, acompañado por su ropa interior.

Diamond Tiara: tú continúa, yo me las arreglo. -Sugirió la pelilavanda mientras pasaba lo que ella ya se temía, era demasiado cosquillosa y cualquier cosa le hacía reír y retorcer a carcajadas, haciéndole desconcentrar de lo que debía hacer.

Applebloom se encogió de hombros y de nuevo le besó tiernamente y bajó su mano, metiéndola suavemente en su intimidad. En ese momento las cosas sí salieron demasiado mal, pues Diamond Tiara se soltó del beso bruscamente, se retorció y sin querer le plantó un rodillazo a Applebloom en pleno estómago.

Applebloom: ¡Aj! -Se quejó la pelirroja perdiendo el aire y sujetando su estómago.- ¡Diamond! -Le gritó algo molesta mientras apenas recuperaba el aliento.- ¡Rayos! -Le gritó.- ¿Hacer el amor contigo es extremo o que? Aajj… -Frotandose el lugar lastimado.-

Diamond Tiara: ¡Perdóname Applebloom! -Decía la pelilavanda demasiado avergonzada.- Discúlpame, lo siento.

Applebloom: fuf… -Resoplando.- Probemos esto a ver. -Se acomodó con las rodillas a los costados de los muslos de Diamond, quien la miraba con una expresión de arrepentimiento infinito. La pelirroja parecía pensar mientras observaba su abdomen y pechos desnudos, bajó la mirada aún más y sonrió. Diamond tenía el rostro colorado, pues le daba vergüenza que su chica la mire de esa manera, además del rodillazo que le había dado en su pobre estómago.- ¿Prometes aguantarte un poco? -Le preguntó viéndola a los ojos.-

Diamond Tiara: ¿Qué?

La pelilavanda se confundió al escuchar esa pregunta, mientras sentía las manos de la pelirroja sujetar sus muslos con firmeza, con mucha fuerza, y vio con sorpresa que ésta se agachaba sacando su lengua solo un poco antes de llegar a ese lugar. Sintió su lengua acariciarle suavemente esa parte tan sensible, en vez de risa soltó un fuerte gemido mientras su chica parecía haber llegado a lo que quería por fin, entonces continuó.

Diamond Tiara gemía sumida en ese mar del placer que le causaba su Applebloom, no sabía que ella fuera tan tierna e incluso la amó más al haber sido capaz de aguantar sus instintos y torpezas extrañas. Ahora sentía, además de cosquilleo, un fuerte impulso eléctrico que le hacía jadear y gemir suavemente. Bajó una de sus manos para apretar a su chica más contra ella. Mientras su espalda se contraía al sentir la lengua de Applebloom paseando por los alrededores de su entrada y sus labios succionando aquél punto tan sensible para ella de rato en rato.

Diamond estaba a punto de llegar a un orgasmo, con la respiración agitada, su corazón latiendo demasiado rápido; Applebloom se dio cuenta de eso y como no quería que aquello acabara tan rápido, entonces se separó de aquél lugar y subió hasta la boca de su chica para besarla con toda la pasión que le fuera posible, sentía la lengua de Diamond desesperada, como intentando entrar cada vez más en su boca.

 
 
 
¡¡¡RIIING!!! Sonó el teléfono.

 
 
 
 
Applebloom: no contestes. -Dijo la pelirroja muy agitada mientras bajaba besando su cuello.-

Diamond Tiara: no lo haré… -Replicaba la pelilavanda mientras bajaba las manos y apretaba los glúteos de su chica.-

 
 
 
¡¡¡RIIING!!! Volvía a sonar el teléfono.