Sugar, We're Goin' Down. (5sos)

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Narra Lylan.

La cola empezó a avanzar cuando estábamos terminándonos las hamburguesas.

-¡Vamof, vamof chicof que fe nof cuelan!-gritaba Ashton, con la boca llena.

Cogimos todo y tiramos la comida sobrante. Se me encogió el corazón cuando lo hicimos, pero no podíamos meterla al concierto. Hicimos filas de dos y entramos, corriendo, en la sala. Era enorme y estaba todavía casi vacía. Acabamos en la tercera fila, nos miramos expectantes entre nosotros. Nuestro sueño no hacía más que empezar. Mientras los teloneros se preparaban, pusieron música y ya estaba todo el mundo saltando y bailando. Salió un hombre con una mopa a limpiar el escenario y todo el mundo se puso a gritar "¡El de la mopa, el de la mopa!" "¡Hazme hijos!" "Venga, dale duroooooo"

Las primeras notas de You Me At Six sonaron y el estadio estalló en gritos ensordecedores. Sabía que era allí donde pertenecía, donde quería estar. Luke también era fan de aquel grupo, así que nos pusimos el uno al lado del otro para poder compartir aquella experiencia; mientras que los demás saltaban y gritaban pero no cantaban, ya que no se sabían las canciones.

Acabaron los teloneros y aún quedaban diez minutos antes de que saliera Fall Out Boy.

-Me has dejado sordo del oído derecho.-me dijo Luke, acercando sus labios a mi oreja para que le pudiera oír mejor.

-No he gritado tan alto, jo.-él negó con la cabeza diciendo "noooooo" de forma sarcástica, y Abbie nos miraba de forma recelosa mientras conversaba con Calum. ¿Qué le pasaba a esta chica?

Tras varios minutos más bebiendo agua y hablando entre nosotros, las luces volvieron a apagarse. Los gritos hacían que la cabeza me palpitara pero yo aun así gritaba más alto, más agudo. Estaba viva.

My Songs Know What You Did In The Dark comenzó a sonar, y yo lloré como no lo había hecho nunca. Por fin, era mi momento, tenía delante a uno de los grupos que me hacían feliz día a día, estaban tocando sus canciones, las estaban tocando sólo para mí. Levantamos las manos y comenzamos a saltar, a gritar, a cantar. Así pasó la siguiente hora, todos chocando con todos, la pista entera siendo uno. En algún momento, todo cambió.

Yo tenía las manos en el aire y estaba gritando a pleno pulmón cuando, de repente, una mano suave y grande cogió la mía y la apretó. Seguí con la mirada el brazo hasta ver la cara de Luke, sonriéndome desde mi izquierda. Entrelazamos los dedos y saltamos, saltamos, saltamos. En medio de la emoción y la adrenalina, le di un beso en la mejilla, a lo que correspondió con una sonrisa de suficiencia y un guiño.

¿Estábamos ligando? No lo sé, ni me importa. Yo simplemente era feliz, y quería que cada una de las personas de este planeta se sintiera tan feliz como yo.

Los primeros acordes de 'Sugar We're Goin Down' empezaron a sonar, pegué un gran grito y busqué con la mirada a Abbie. Al encontrarla, vi que también estaba buscando la mía, nuestras miradas se cruzaron y sus ojos brillaron. Entonces fui hasta ella y la abracé para luego mirar hacia el escenario. Dadas de la mano, empezamos a cantar como locas nuestra canción favorita de este gran grupo que nos había unido tanto, los chicos nos miraban riendo pero nosotras seguíamos cantando como si de nuestra vida se tratase. De repente, Pete tiró una de sus púas al público y Abbie fue hacia ella como si ella fuese un tigre, y la púa su caza. Me arrastró (ya que no me soltó) y choqué con la espalda de Michael que también intentaba pillar la púa, me fui hacia un lado aún dada de la mano de Abbie, vi como peleaba con Luke y tiré de ella hacia mí.

-Abbie, relax.-le susurré el oído aguantando la risa, ella me miró y luego sonrió como el gato Cheshire y me enseñó su mano, donde estaba la aclamada púa. Giré mi cabeza hacia Luke y vi que hablaba con Mike, mientras que no apartaba la mirada de Abbie. El chico y la chica estaban discutiendo sobre quién había cogido la púa antes. Entonces, la canción terminó y, con ella, el concierto. Tras un gran aplauso por parte del público y una reverencia por parte del grupo, la gente empezó a salir de la sala. Mientras todo esto ocurría, Abbie y mi amigo seguían peleándose.

-Abbie joder, yo la cogí primero y tú me la arrancaste de las manos con esas garras tuyas.-decía Luke.

-Tú sólo la tocaste un segundo, ni siquiera la agarraste. Yo la cogí de encima de tu mano antes de que lo hicieras tú, por lo que en teoría yo la cogí primero aunque tú la tocaras antes.-mi amiga echaba espuma por la boca.

-Lo que tú digas.-Luke se giró y se fue, aunque no sin antes mirarme. Le pedí a Abbie que me esperara con los chicos en la puerta y salí tras él.

-¿Pero a vosotros qué mierdas os pasa?-le grité, agarrándole por el antebrazo cuando conseguí alcanzarle.

-Déjame en paz, joder. Estoy hasta la polla de las crías como vosotras.

Me paré en seco, le solté y me quedé mirándole. No estaba acostumbrada a que la gente me tratara así. Al parecer, él se percató de ello por lo que se paró, giró y me miró, con los ojos llenos de arrepentimiento.

-Dios, Lylan, lo siento.-caminó hacia mí hasta quedar a pocos centímetros, me suplicaba perdón.-No quería decir eso. No sois unas crías, y tú mucho menos que Abbie. No quería decir eso.

Intentó cogerme la muñeca pero yo la aparté.

-Joder, lo siento, lo siento.-tras decir eso, me abrazó firmemente. Yo no sabía si tenía ganas de llorar, de reír, o de hacerme una bola en el suelo y no moverme jamás.

Le dije que no pasaba nada, y volvimos con ellos. Tuve un presentimiento, el de que no debería juntarme con ese chico.

Llegamos hasta los demás y vi que Abbie estaba sentada en un banco, al lado suyo estaba Calum, al otro Michael y Ashton estaba sentado en el suelo justo al frente de ellos. Abbie, Calum y Ash hablaban sobre como había sido el concierto mientras que Mike miraba su móvil.

-Hola.-dije, aún andando al lado de Luke.

Los chicos nos miraron y nos saludaron, excepto Abbie, tendría que hablar con ella más tarde.

Luke miró a Michael y sonrió, y éste le correspondió la mirada con una sonrisa tímida. Yo me dirigí hacia Abbie y me senté en su regazo.

-Acaparadora de sitios.- dijo Abb, Calum soltó una leve risa provocando que le diera una suave colleja.

-Bueno chicos,-se levantó Calum-ya es hora de irse.

Sus amigos asintieron y se levantaron de sus respectivos sitios.

-¿Hablamos por WhatsApp?-dijo Ash, y nosotras asentimos y nos despedimos de ellos.

-Será mejor que nos vayamos también-le dije a Abbie.

-Vale, pelimorada.-se levantó de su sitio, haciendo que casi me cayera.