CAP 25: LOS REYES NO SON CIEGOS

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Narrador Omnipresente:

- así que usted es la madre de Giselle, se ve de donde ella sacó su belleza- Sir Richard se encontraba tomando el té con la madre de nuestras chicas en un pequeño balcón del castillo rodeado de flores y arbustos en lo que parecían ser jarrones

- jejeje, gracias! Es usted muy amable- agradeció Edith mientras daba un pequeño sorbo al té con chocolate que se había servido en su taza de porcelana blanca con flores pintadas

- es una pena que su esposo no haya podido acompañarnos, quería conocer a ambos padres de tan magnifica chica- exclamó Richard tomando una de las galletas que los reposteros habían hecho para ellos

- si le soy sincera, era poco probable que quisiera venir, en especial si tiene relación con nuestras.....hijas- a pesar de que susurro aquello último, no evitó que fuera escuchado por el hombre de ojos azules que estaba cubierto de migajas en sus cachetes regordetes

- a que se refiere? No es buen padre?- el tener que contestar esa pregunta le dolía, pero le dolía más el ya tener una respuesta concreta y que de seguro nunca cambiaría

- digamos que no, él nunca fue un buen ejemplo para mis niñas, siempre gastaba lo poco que ganaba en alcohol y en la cantina que estaba por casa- las memorias de su esposo borracho con inclusive una botella en su mano invadieron su mente, tan frescas como pared recién pintada

- las niñas incluso le tenían miedo cuando llegaba borracho a nuestra casa, sobre todo Elena, ella siempre protegía a Giselle de él, nunca las golpeó pero las llego a insultar y a gritar como si ellas hubieran hecho algo malo cuando en realidad ni siquiera se habían movido

Elena y yo siempre procurábamos darle a Giselle una buena imagen de su padre, Elena tuvo la desgracia de ver a su padre como en verdad es, un hombre egoísta y sin cariño, y ni ella ni yo queríamos eso para Giselle, siempre intentábamos darle una buena imagen sobre su padre, pero la verdad era muy difícil, tampoco era que el colaborará tanto-

Eso había dejado completamente asombrado al hombre de piel morena que seguía tomando el té que se le había servido

- no tenía ni idea, supongo que usted fue su único buen ejemplo paternal- eso le llegó como una estaca al corazón de la pobre Edith, pues sabía a la perfección que esas palabras eran una idea errónea sobre ella

- yo...- antes de siquiera poder explicarse, fue interrumpida por un señor de ojos chocolate y cabello como la noche

- lamento interrumpir el té, solo...necesito preguntarle algo a la señora Edith, tiene que ver con la princesa- explicó Arturo mostrándole una carta de Giselle en donde le preguntaba que cuál opción de invitaciones para su boda le gustaba más, la primera o la segunda

- la segunda, es más apropiada a su estilo elegante pero casual - pero antes de que Arturo se disculpara para retirarse...

- pensé que iba a tomar el té con nosotros- confeso Richard con curiosidad viendo como Arturo planeaba retirarse del lugar

- disculpe?- preguntó extrañado ante ese pensamiento de parte del rey de uno de los reinos mas importantes de la zona

- le pregunte a la princesa cuales eran los nombres de sus padres para poder presentarme apropiadamente, ella me contestó que se llamaban Conrad y Edith, pero cuando le expresé que sería un honor conocer a sus figuras paternas, se corrigió y dijo:

"Oh! Si en realidad quiere conocer a mis figuras paternas, sus nombres en realidad serían Arturo y Edith" -

Ambos se asombraron ante esa revelación, sobre todo Arturo, sus ojos de verdad se encontraban abiertos junto con su boca

✨AMOR DE FUEGO 12Donde viven las historias. Descúbrelo ahora