Mr. Kim °|VKook|°

Capítulo TRECE

El despertador sonó, y hoy decidí irme temprano. El día anterior había estado enfermo por haberme expuesto en la lluvia, hoy trataría de evitar todo contacto con esta, ya que en esta semana habían anunciado fuertes chubascos y tormentas eléctricas.

Me levanté justamente a las 6:40am. Sin muchas ganas salí de la cama, busqué ropa en el armario, nada complicado: camisa blanca manga larga, jean azul claro, un gorro rojo debido al frío, y un par de botines negros. Puse el conjunto de ropa estirado en la cama, para luego ir a buscar una toalla para ducharme.

Salí al pasillo con visión de bañarme con agua tíbia.

Me paré frente a la puerta y la abrí. Oh Dios mío, gran error.

Frente a mi, estaba el Sr. Kim; con una toalla amarrada a la cintura, cabello mojado y gotas de agua resbalando por todo su tonificado cuerpo.

—Dios santo... Wow —dije inconscientemente mientras lo mirada de pies a cabeza. Recapacité y me di cuenta de lo que estaba haciendo. Justo cuando miré su cara un sonrojo inmediato llegó a mi cara, tragué fuerte.

Hice un grite ahogado y corrí a mi habitación, o eso traté, ya que a mitad de camino me resbalé debido a mis calcetines.

Taehyung me observó cuando caí al piso.

—¿Necesitas ayu-

—No, no, no- dije efusivamente volviendo a retomar mi carrera por llegar a mi habitación.

Entré y cerré la puerta, para luego sentarme en el suelo.

—¿Acaso él es un dios?

Escuché que tocaron mi puerta
—¿di-diga?

—ya puedes ir a ducharte si quieres dijo él como si lo que pasó fuera nada.

No sé si lo que me pasó fue la mejor cosa del mundo, o la cosa más vergonzosa.

—¡Eh, está bien, gracias!

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Ya vestido, salí con mi mochila a la cocina. Tomé una galleta ya por costumbre, aunque todavía no sé si son de Taehyung, ¿eso esta mal? De cualquier manera me las seguiré comiendo.

Al parecer, Kim ya había partido hacia la escuela. Yo por mi parte, estaba tranquilo ya que iba temprano.

Lo único que rogaba que no pasara, era que comenzará a llover.

Salí de la casa caminando tranquilamente. Todo el camino fue pacífico, hasta que justamente, en un lugar donde no habían locales ni lugares con techo, comenzó a llover. Empezó suave, pero se convirtió en una tormenta.

—¡Ah, maldición!

Exclamé mientras corría hacia una estación de buses destruida. Sí, estaba destruida y sólo parte de su techo seguía en pie.

Comenzó a hacer mucho frío. Y justo cuando creí que iba a morir congelado, un carro se estacionó frente a mi.

Lentamente la ventana fue bajada.

—¿Necesitas que te lleve, princesa?

Yo chisquee los dientes

—Antes muerto de frío, que entrar en el auto de un puto como tu

Maldito Kai, la lluvia ya había arruinado mi mañana, y vienes tu para empeorarla.

—¿Quién te crees Jeon? Sube antes que cambie de opinión

—No, no me subiré- élrió —pues jodete sabes, me tienes harto con esa actitud tuya de niño especial. Ahora me importa una mierda lo que te pase.

Le iba a responder pero un carro sonó el claxon y Kai arrancó muy molesto.

—Maldito hijo de puta, nadie pidió su ayuda— murmuré enojado y aún muriéndome de fríom

Escuché frente a mi la voz de un hombre toser, haciendo que levantará mi cabeza.

—Sube Jeon, antes que llegues tarde.

—Se-señor Kim ¿Desde hace cua-

—Apresúrate

Yo subí al asiento del copiloto, liberando un suspiro de alivio. El carro del profesor era muy cálido, y tenía su olor, su delicioso olor. Ok Jeon te estas poniendo raro.

—Eh, ¿hyung?

—Hmm

—¿Cuanto tiempo estuvo estacionado.. ahí?— tenía miedo de preguntar ¿y si él presenció y escuchó todas las groserías?

—Eso no importa. Ahora dime, ¿porque no trajiste un paraguas? Sabes que hay mal tiempo pronosticado, y aun así decidiste no traer nada.

—Ah, lo sé. Pero se me olvidó, con lo que pasó en la mañana, mi mente se nubló- "con lo que pasó en la mañana" ¡Maldición Jeon! Ahora lo recordaste.

Un fuerte sonrojo subió a mis mejillas, giré mi cabeza para ocultarlo.

—Estas muy rojo Jungkook ¿te sientes bien?

—Eh si sí... Y pues, ¿ya-ya fue a la nueva cafetería? La "Coffee Paradise"

—Tú trabajas ahí, sabes que ya fui... ¿Estás seguro que te sientes bien? Podemos pasar por la farmacia si quieres-

Yo negué rápidamente con la cabeza, y no sé si fue mi imaginación, pero podría jurar que miré una sonrisa deslizarse en el rostro de Taehyung.

El tráfico estaba terrible, habíamos quedado en medio de muchos carros. Y la lluvia que aumentaba no ayudaba.

Y para la desgracia de todos, se escuchó el estruendo de un rayo caer, causando que se fuera la energía, haciendo que los semáforos se apagaran.

—Al parecer será un poco complicado llegar a la escuela hoy— comentó a Kim.

Y sí, definitivamente sería un largo camino.