Capitulo 1

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Por la noche en una fiesta en la ciudad de Seul... 

___  acababa de llegar al balcón cuando escucho pisadas detrás de ella, se dio la vuelta a mirar de quien eran esos pasos, se sentó en una banca entre las sombras con la esperanza de poder tener cinco minutos de paz, observó la figura que se aproximaba, sabiendo perfectamente que no era invisible y que se dirigía directamente a ella.

 No lo reconoció, aunque ella llevaba en Sm and Company  cinco meses y conocía a todo el mundo, aquel hombre caminaba con unas piernas largas envueltas en un pantalón oscuro con la naturalidad de un atleta, era más alto que ella y tenía el pelo oscuro. 

La única iluminación en el balcón provenía de la luz que escapaba de las ventanas de la sala de juntas, de modo que no podía ver mucho más, suspiró, seguro que su amiga Irene debío de haber enviado a su amigo Suho a buscarla, como le comento el dí...

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La única iluminación en el balcón provenía de la luz que escapaba de las ventanas de la sala de juntas, de modo que no podía ver mucho más, suspiró, seguro que su amiga Irene debío de haber enviado a su amigo Suho a buscarla, como le comento el día anterior. ¿Por qué la gente pensaba que las citas a ciegas eran una buena idea? 

Incapaz de quitarle los ojos de encima, ___ decidió ignorar la tensión en el estómago y la promesa que le había hecho a Irene de estar «abierta a las posibilidades» se enfrentaría a la situación, se lo diría claramente y podría tener su espacio de nuevo.

___: ¿Irene te ha dicho que estaba aquí fuera? —preguntó con su tono más decisivo.

"Suho": No —contestó él con una sonrisa radiante que destacaba en la oscuridad. 

Se sentó junto a ella y dejó su copa a un lado, se había sentado de lado, mirándola. Su cara estaba a oscuras, pero se encontraba cerca, demasiado cerca, su presencia irradiaba calor, y desprendía cierto aroma a cítrico, masculino, fresco y suave.

___: Mira, perdona —comenzó ella, tratando de sonar amable, aunque firme. —No sé lo que te ha dicho Irene pero no estoy interesada.

"Suho": Oh, ¿De verdad? —pareció sorprendido, pero ___ respiró profundamente y siguió hablando apresuradamente. 

___: Puede parecer difícil de creer, cuando todo el mundo está ansioso por conocer gente, pero realmente yo no busco diversión, estoy segura de que eres un gran tipo y de que no tendrás problemas a la hora de encontrar a alguien, sobre todo ahí dentro —dijo señalando hacia la ventana. —Después de todo, Irene dice que seduces muy bien.

Sus carcajadas la sorprendieron pero más sorprendente aún fue el modo en que resonaron dentro de ella, fue un sonido profundo y cálido. 

"Suho": ¿De verdad? qué amable por su parte —dijo antes de dar un trago a su copa. —Pero creo que no deseo a cualquier otra persona, sobre todo no "ahí dentro" —añadió imitando su tono.

___ agarró su copa con fuerza, se sentía molesta, y aquella interrupción no le estaba sirviendo de ayuda. 

___: Muy bien —dijo con resignación. —Pero dejemos una cosa clara, no va a ocurrir, así que simplemente nos congelaremos ¿de acuerdo?

Toda la noche con elDonde viven las historias. Descúbrelo ahora