___ jamás tenía aventuras con los hombres con los que trabajaba, después de haber sufrido en el pasado, se protegía tras el ingenio y el sarcasmo... Pero su nuevo jefe, increíblemente sexy Dokyungsoo iba a poner a prueba su determinación.
Esta hist...
El miércoles por la tarde, ___ ya sabía que su plan tenía defectos, la presencia física de kyungsoo era insoportable, durante horas su cuerpo permanecía rígido, siendo consciente de su cercanía a pocos metros de distancia.
Cuando apartaba la vista del computadora para descansar los ojos, no podía evitar mirarlo, invariablemente descubría que él la estaba observando o que levantaba la vista cuando ella también lo hacia, rápidamente ___ miraba hacia otro lado y se mordía el labio.
Cuando eso ocurrió por enésima vez aquel día, estaba tan furiosa consigo misma que se levantó para poder escapar al baño durante unos minutos, sólo para alejarse de él, para mirarse al espejo y recordarse exactamente por qué no debía dejar que la lujuria afectase a su trabajo, nada de distracciones.
Mientras caminaba de vuelta por el pasillo, se sobresaltó, cuando alguien la agarró del brazo y tiró de ella hacia una sala de reuniones antes de llegar a la suya, la puerta se cerró tras ella, se dio la vuelta y miró a Dokyungsoo, que estaba de pie frente a la puerta, bloqueando la salida con los brazos.
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___: ¿Qué estás haciendo?
Preguntó ella, luchando por recuperar el equilibrio, su cercanía hacía que le resultase difícil respirar, y mucho menos concentrarse en el trabajo, la postura de Kyungsoo acentuaba el ancho de sus hombros y ___ sintió cómo iba cediendo lentamente ante su masculinidad.
Kyungsoo: ___, mira, no podemos ser amantes, de acuerdo, lo entiendo y lo siento si te he hecho sentir incómoda ¿pero no podemos al menos ser amigos?
___: ¿Realmente crees que eso es posible?
Kyungsoo: Claro que es posible —contestó él con una sonrisa. —No pienso ponerte sobre la mesa a la primera oportunidad, creo que puedo mantener mis necesidades más básicas bajo control ¿Acaso tú no? —preguntó en voz baja.
___ se quedó mirándolo en silencio, su mente quería responder, pero su cuerpo se había quedado atascado en la idea de hacer el amor sobre la mesa, Podía imaginárselo encima de ella, colocándola sobre la mesa, tirando los papeles al suelo. Se mordió el labio y apretó con la esperanza de que la presión aliviara las palpitaciones pero lo que realmente deseaba era otro beso.
Kyungsoo la observó intensamente y dio un paso hacia ella, frustrada, ___ miró hacia abajo pero él se acercó más y le colocó los dedos en la barbilla, haciendo que volviera a mirarlo.
Kyungsoo: ¿Acaso tú no? —preguntó de nuevo.
Deslizó los dedos por su mandíbula y hasta el cuello; acariciándole los labios suavemente con el pulgar, sus miradas se encontraron nuevamente y ___ tuvo que contener la necesidad de abrir la boca y chuparle el pulgar, horrorizada consigo misma, se apartó para que la mesa estuviera entre ellos.
Kyungsoo:No te preocupes, el acoso no es mi estilo —dijo él colocándose las manos en las caderas. —Te prometo que no te tocaré a menos que me lo pidas —se metió las manos en los bolsillos como para enfatizar sus palabras. —Si continúas ignorándome como has hecho hoy, la gente empezará a murmurar y sé lo desesperada que estás por evitar los chismes.
