Capítulo 3

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—Vamos Yoongi.—me dio una ligera palmada en la espalda—Trabajé mucho para que pudieras ingresar en esta escuela, no me decepciones muchacho—.

¿Es que a caso yo te lo pedí?

Agradezco el esfuerzo, pero una nueva escuela no me hará olvidarla.

—MinMin, mi niño lindo—susurró con esa voz tan melosa.

—¡Mamá!—Grité emocionado, mientras corría hacia ella.

Había sido mi primer día en la escuela secundaria.

Mamá no paró de hablar sobre lo genial que era la secundaria, que haría muchos amigos, y tal vez, hasta me lograría enamorar.

Los primeros días fueron buenos, pero nada es para siempre.

Empezaron las peleas, los gritos todas las noches.

—Nunca borres ésa hermosa sonrisa de tu rostro, ¿lo prometes?—me miró dulcemente—.

Le sonreí y asentí.

Disculpame mamá, no pude cumplir nuestra promesa.

—Hey, niño—me grito mi padre—.

—¿Eh? Y-ya me voy, te veo en la salida—me limpié los ojos, no podía entrar llorando a la escuela.

Madre... Te prometo que daré todo de mí por recobrar la promesa que te hice y cumplirla.

El arte de amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora