Jueves 14 de febrero
23:45 - Cerca de la media noche
Los días lluviosos suelen ser tristes y melancólicos, durante una día como el descrito en las primeras palabras de este párrafo se encontraba el oficial Lucas, el acudió a un llamado de emergencia al parecer se habría producido un altercado y había gente herida, hoy el compañero del oficial Lucas no asistió así que acudió solo al llamado.
La escena le presentaba 3 hombres tirados a la entrada del edificio, estaban sangrando y posiblemente sin signos vitales, esto causa que lleve su mano a su arma y quite el seguro del estuche, siente sus músculos tensarse y poco a poco la adrenalina irradiando su cuerpo lo prepara para la acción.
Antes de entrar se identifica pero nadie contesta, ingresa cauteloso al edificio, apenas cruzar la puerta puede ver alrededor de 10 hombres en las mismas condiciones, sangrando boca abajo, y nuevamente sin señales de vida aparente, él avanza entre los cuerpos buscando alguna señal de vida pero nada.
Al llegar al final del pasillo se topa con el único sujeto en pie, nuevamente se identifica pero el señor no dice nada, solo esta ahí con la cabeza abajo, claramente tiene signos vitales, su respiración se nota tranquila a pesar de lo sucedido en el lugar. Nuevamente el oficial se identifica y le pide levantar las manos, el señor obedece, luego el oficial le pide tirarse al piso, el señor obedece, el oficial procede a acercarse cauteloso, lo revisa no parece llevar armas, pero sus manos están ensangrentadas, el oficial le pregunta sus datos pero el señor no responde, tras varios intentos lo arresta y lo lleva a una unidad de policía comunitaria cercana.
Dentro de una celda y sin esposas el señor pide un poco de agua y empieza a hablar.
Señor: Lo admito, mi existencia no es tan simple, podría contarte como en un pestañeo han pasado siglos, mi respiración ahora es muy pausada, el tiempo no me preocupa, y si no consto en tu Sistema o tu base de datos, es por que la sociedad no me conoce y si estoy aquí es solo por pura curiosidad.
Oficial Lucas: Señor, sin papeles ni huellas digitales, debemos de esperar que dice el fiscal para saber como debemos proceder, pero podría ayudarme con su nombre y apellido para poder tratar...
El oficial es interrumpido por el señor que con la voz calmada pero firme continua su discurso...
Señor: Mi origen no es de su importancia pero una buena conversación nunca esta de más verdad.
Oficial: señor ayúdeme con su nombre y apellido, cédula o pasaporte o algún numero de un familiar o conocido.
Señor: pues como he dicho antes y anticipándome a estas preguntas que no tendrán las respuestas que busca, pero por el contrario ganara una interesante historia para contar.
El día del oficial Lucas fue muy pesado y tratar con este señor le ha causado en cierta medida un alivio, el no parece ser responsable de las muertes de todas esas personas, se siente paz alrededor de él, pero aun así siente algo de precaución, el oficial asiente dando permiso al señor de hablar y que continué su charla.
- Mi niñez no la recuerdo bien, pero mi adultez ha quedado marcada en mi memoria y eso que he aprendido a olvidar cada día vivido solo ciertos fragmentos de momentos quedan ocupando esta cabeza.
Me enamore, la amaba intensamente, el emperador o como dirían ahora el gobernante prohibió el matrimonio entre jóvenes, así que acudimos aun conocido sacerdote que casaba jóvenes sin el permiso del emperador, y no, no crea que es solo un cuento ustedes por estas fechas celebran al sacerdote sin conocer la historia real, pues nosotros eramos el quincuagésimo casamiento, durante la ceremonia se acostumbraba a picarse un dedo y marcar con nuestra sangre un pequeño trozo de pan, extrañamente el cura lo comía.
Una vez ya casados nos fuimos a vivir a mi cabaña, esa noche hace 18 siglos atrás una bestia entro y la mato, seguí a la bestia hasta un claro, la bestia portaba túnica, su cuerpo se deformaba entre un cristiano y un lobo, mientras la forma bestial cambiaba a la de un humano escuchaba el llanto y veía sus lagrimas correr pero reía, fría y gozando el acto, reía mientras lloraba, y en sus fauces aun la piel de mi esposa, cegado y dejando el miedo lo enfrente, no termino bien, la criatura con su garra abrió mi pecho, y caí consciente, se acerco aun con los ojos llenos de lagrimas, lamió mi pecho, sentí como brazas quemando mi piel sangrante, pero la herida cicatrizo al instante acto seguido la criatura huyo.
Creerá que es una historia de cuentos para niños, pues aquí estoy, y no, no soy lo que ustedes creen que es un hombre lobo o algo parecido, estoy lejos de serlo, los he visto y soy tan amables con un cachorrito, yo, yo soy algo diferente.
Después de lo sucedido, camine de regreso a mi casa, había gente alrededor de ella, todos me vieron llegar y me acusaron de matarla pues mi cuerpo y ropa estaban manchados de sangre y parte de su piel con cabello estaba pegada a mi pecho con la baba de la bestia.
Me quemaron vivo, sentía el fuego hacer cenizas mi piel, pero no dolía, no dolía nada, solo me quede quieto mientras me maldecían y una vez saciaron su sed de maldad dejaron mi cuerpo carbonizado empalado en el patio de mi casa.
Esa madrugada, una pequeña brisa me despertó, podía ver como una vara de madera atravesaba mi pecho desnudo, pero no sentía dolor, con mis manos hice añicos la vara y caí al suelo, camine a los escombros de mi cabaña y el cuerpo de mi esposa no estaba, los aldeanos le habían dado entierro cerca, desenterré su cuerpo y camine por un largo tiempo llevándolo entre mis brazos.
En fin, soy una existencia vacía, eso pensaba, al pasar varios años y vivir oculto en los bosques me encontré nuevamente a la bestia, se encontraba casando un siervo, lo seguí esta vez cobraría venganza, nuevamente lo enfrente, pero el resultado se repitió abrió mi pecho, pero esta vez no me paralice continué con mis manos desnudas golpeándolo, pero no parecía sentir dolor, tomo mis manos con su hocico y me arrojo varios metros, en un segundo llego hasta donde estaba y volvió a tomar mi pierna, me golpeo contra el piso varias veces pero no sentía dolor aunque mi cuerpo sangraba.
Jugo conmigo como lo hacen los perros con sus juguetes, sentí impotencia y una fuera inmensa crecer dentro de mi con mi mano desnuda atravesé su pecho y saque lo que parecía el corazón, una maza gelatinosa morada, cayo inconsciente, me aleje a buscar madera para quemar lo, al volver ya no estaba, en su lugar había un hombre sangrando boca a bajo, después aparecieron 3 bestias más y les di muerte de igual forma.
Al final cuando estaba agotado apareció el que creo yo era el alfa, pues se mueven en manada, comen lo que deseen, si lo pensó esta en lo correcto la bestia que encontré no fue la que mato a mi esposa, esta criatura el alfa era mucho más grande, se presento ante mi tranquilo pero dominante, en un segundo sus fauces rodearon la mitad de mi cuerpo, olía a muerte dentro de su hocico, pero aproveche y arranque su lengua.
Me vomito o eso pareció se retorció un poco y volvió a tomar la pose con la que llego, su cuerpo en segundos de ser una bestia paso a ser un humano, un cristiano como tal, camino desnudo hacia mi y me dijo eres uno libre, escuche su voz pero no movió los labios.
Al final lo mate, desde entonces los busco, a esas criaturas, he matado a todo una jauría, y no tardara en llegar el alfa.
- Algo entra violentamente a través de una ventana y se escuchan el caminar de algo grande y pesado en el piso de arriba del UPC.
ESTÁS LEYENDO
Diario Mental
RandomHistorias sueltas que escribo directamente en wattpad no editare ni modificare nada saldrá tal cual lo piense, espero lo disfruten.