My Wish // KiHo - WonKi

06

Qué debería hacer, cada vez entendía menos a Kiki. Cuando era humano casi ni se acercaba a él, pero ahora aunque prácticamente lo tenía pegado siempre, lo sentía tanto o más lejos que cuando era su igual. Lo confundía; con su triste semblante, su falta de apetito y las anécdotas repetidas que tenía con Hoseok, pues solo habían convivido una semana incompleta.

Él era Hoseok, pero eso Kihyun no lo sabía. Wontokki se sorprendía e incluso se desesperaba cuando lo veía llorar por quien fue cuando era humano. No tenía ni idea de cómo consolarlo, quería decirle que nunca se había ido realmente, que el siempre estaría a su lado.

Deseaba desde el fondo de su acelerado corazoncito poder abrazarlo y protegerlo de todo el mal del mundo, pero no podía, no con sus cortas extremidades. Entonces la idea de ser un humano otra vez invadió su mente. Pensó que si se lo pedía al angelito, este no se negaría, porque la causa era más que evidente para cualquiera que conociera a Kihyun.

Lamentablemente, el angelito Jihoon no volvió a presentarse. Y aunque Wontokki, al ser un animalito podía percibir su presencia, durante ese último mes no pudo sentir ningún indicio de que el ser celestial se mantenía a lado de su Kihyun.

El chico había dejado de recibir llamadas, visitas y pocas veces salía de casa al trabajo. Wontokki no era consciente de que Kihyun estaba enfermando. Y para cuando por fin lo entendió, este ya no podía respirar y su familia lo estaba velando, conversando acerca de quién se quedaría con su preciada mascota.

Sin embargo, a pesar de todo lo que oía a su alrededor, Wontokki no prestaba atención a nada. Entendía lo que era la muerte, sus padres habían muerto para convertirse en comida, pero le era inevitable no llorar por su amado Kiki, cosa que llamaba bastante la atención pública que seguía ignorando.

Entonces se prometió que en su próxima vida el renacería como un humano, un ser humano como su Kiki. Y aunque todo se oponga, él lo encontraría y lo haría feliz, tal y como se lo merecía en ese momento o mejor dicho, en esa vida.

–...bien, ese caso sería mejor que se quedara con ustedes – Gunhee se dió por vencido. Igual y no tenía ánimos ni para seguir vivo. Hyunwoo y Minhyuk, la pareja que era lo más cercano a unos padres para Kihyun, llevaban insistiendo que ellos se harían cargo del conejo.

Gunhee quería hacerlo en nombre de su mejor amigo, pero no tenía la paciencia suficiente para cuidar de animalitos. Por otro lado, la pareja poseía una veterinaria entre todos sus negocios y por ende, el pequeño conejo tendría una mejor vida con ellos. No podía refutar contra ese punto a favor de los mayores.

– Podrás venir a visitarlo cuando quieras Gunie – habló con cariño Minhyuk. Jooheon que no se le despegó desde que se enteraron de la muerte de Kihyun, lo atrajo a sus brazos para reconfortarlo ante el posible llanto de su novio.

No intercambiaron muchas palabras luego del entierro de Kihyun. De hecho no volvieron a verse, pues la pareja se fue de corea, y lo poco que hablaron después de eso, solo fue para recibir la noticia de que Wontokki falleció por depresión. Según Jooheon, se veía venir, el animalito era muy apegado a su dueño, era obvio que no resistiría la lejanía de un ser muy querido.

Tal vez y tenía razón, quizá era lo mejor...

SS