Capítulo 2

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Sentí un balde de agua fría por la espalda, para luego asentir valientemente en contra de mi mente.
La escena bulliciosa pronto se expiró, pudiendo incluso escuchar mi propia respiración.

– Los demás pueden retirarse, hay mucho trabajo por hacer, a sus secciones, ¡Ya, ya, ya!–dijo por último el jefe principal.

Mientras los demás se retiraban , yo avancé a el escenario, ni siquiera voltee a ver por última vez a Chino ni a Bomba, ni a Samira.
Solo pude oír como sonaba la voz molesta de Bomba hasta desaparecer.
Llegué al frente del cabecilla de la organización con cierta lentitud.

–Se que no me defraudarás querida– me miró tranquilamente–no te preocupes por los que te asignaron a ti, ya les llegará su turno , aquí tienes un chip que  posee la información, debes acompañar a tu padre por ciertos detalles, ¿De acuerdo?.

Sus ojos tonos verdosos estaban rebosantes de amabilidad.

–De acuerdo–respondí sin vacilación.
Me sonrió con cierta culpa, o eso me pareció,se despidió, y desapareció por un pasadizo sin dejar rastro.
Voltee a ver a mi padre, y procurando que no hubiese nadie, lo abracé.

– Mi niña–murmuró correspondiendome.

– ¿Tu lo sabías?–dije por lo bajo.

– Lo intuía–suspiró.
Resoplé, entonces no solo por Chino, si no que esto estaba pensado desde antes.

–¿Que te dijeron? –murmuré.

– Vamos donde tu hermano, por el camino te explico.

Se separó comenzando a caminar.
Lo seguí sin dudar.

– ¿Entonces?–le miré con curiosidad.

–Tu fama se extiende hija, por todos los rincones, todos conocen tus habilidades sin conocerte– siguió avanzando tranquilamente.
No sabía si reír o llorar.

– ¿Gracias?–dije insegura.

– Entonces, el jefe principal me preguntó si daba mi afirmación, a lo que solo dije que dependía de ti, pero al parecer ya lo has asimilado hija– volteo a verme con cariño.
Asentí algo nerviosa.

–¿De verdad solo seré sola en esta misión?–pregunté.
Porque claro, había un lema, nunca solos.

– No, esta misión está dividida, el jefe principal hizo creer que esto era todo pero no es así, tu solo  cubrirás una parte – su mirada se hizo más cansada.

– ¿Dividida?–
Entonces si era así, de verdad es más compleja de lo que pensé.

–Si, están los hijos de estas familias, los progenitores y los más pequeños, escáneo de los rastros de los enemigos, e ir al blanco de la masa de políticos y de los mundos bajos–me resumió.
Asentí lentamente.

– No quiso dar más detalles, solo lo general, por eso me pidió que lo acompañara a esta sección.

– ¿Entonces las demás partes irán ahora?– quise saber por mera curiosidad.

– No, después, tu irás primero para evaluar la situación–contestó bajo.

– ¿Se le dirá que esta misión...?– no seguí, ya que mi papá ya había captado.

– Obviamente hija.

Esto se estaba tornando interesante, ya entendía.
Lo seguí pensativa un tramo más, cuando al vislumbrar su pelo entrecano, me surgió una duda de repente.

– Papá–lo llamé.

– ¿Si?– siguió sin verme.

– ¿Tu que piensas de esto?

Bi- AjuarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora