Casetes

3º/Chica retro

Pausé y me quité nuevamente los audífonos. Para que no se me olvidase, abrí mi computador metiéndome a YouTube instantáneamente.

Tecleé: "Val Carv" tal y como ella dijo, le di enter. En menos de un segundo me aparecieron los resultados de la búsqueda.

A primera vista, su canal, era una foto de ella, pero no se podía ver bien debido al lento internet de aquí. Piqué su ícono y pude ver su contenido.
"Solo hablemos" "¿Está mal amar?" "Gracias por su apoyo." "50 Cosas sobre mí." y "Los amigos de verdad." Tan solo se encontraban esos videos en su canal.Y contaba con 6,000 suscriptores en total, vaya, ha crecido demasiado rápido.

Escogí un video pero no cargó, tendría que esperar hasta llegar a mi casa.

Apagué nuevamente mi computador, le di un sorbo a mi café, poco después se oyó de nuevo la campanilla.
Entró una chica de aproximadamente 1.70 cm, cabello café claro que le llegaba hasta las costillas, ojos color azul, creo, labios rosa claro, complexión delgada.

Me quedé hipnotizada al verla entrar.

Entró apresurada a punto de correr, se frenó frente al mostrador.-¿No habré dejado algún casete por aquí?-preguntó preocupada. Se oía bastante bien la conversación debido al silencio del lugar.

-Lo siento, aquí no hay nada, ¿ya checó en la mesa donde se sentó?-preguntó el chico.

Me volteó a ver. A paso rápido se acercó.-No, no, no, no, no puedo perder las cinta.-se repetía.

Llegó hasta donde yo estaba, no abrió la boca, se hincó al instante metiendo su cabeza debajo de la mesa buscando lo que buscaba.

¿Han llegado a pensar lo impresionante que es el cerebro?

Instintivamente saqué el casete del walkman antes de que se pusiera de pie. Tan solo fueron segundos. Se puso de pie sin siquiera verme.
-¿Es esto lo que buscas?-pregunté mostrando el casete, logrando obtener su atención.

-Si, eso preciso era lo que buscaba.-sonrió tomándola de mi mano.-¿Dónde estaba?-preguntó sin quitar la mirada de su querido casete.

-Bueno,-Me observó.-Lo encontré debajo de la mesa.-

-¿Lo oíste?-preguntó curiosa, no noté ningún tono de molestia en su voz.

-Si, y si me permites decir, me gustó lo que oí, no fue tan largo, es cierto, pero me gusta tu forma de pensar.-inconscientemente una sonrisa apenada apareció en su rostro.

-¿Lo crees? ¿Crees que a la gente le vaya a agradar esto?-preguntó animada.

-Probablemente no fue lo más ingenioso hacerlo en casetes.-bromeé, pero no río. Aclaré mi garganta.-Quiero decir, casete no fue la mejor opción, pero sin duda la gente que tenga esto en sus manos lo oirá animosamente. Creí que ya estaba publicado, ¿hay más?-

Asintió agachando la cabeza con una sonrisa tímida.-Hay más, pero aún no estoy segura de publicar, nadie más las ha oído.-respondió rascándose la cabeza.

-Bueno, podría yo ser la persona que oiga las cintas, claro, si así lo quieres.-

-¿Enserio? Me parece genial, otro día nos ponemos de acuerdo, se supone que solo venía a preguntar por la cinta.-rió, se oyó un claxon desde afuera del local, lo tocaba alguien con cierta desesperación.-Yo me tengo que ir, un gusto,-salió corriendo, antes de salir frenó volteándome a ver.-Adiós chica retro.-gritó sin obtener respuesta. Salió demasiado rápido.

Hace mucho tiempo una risa no salía de mí.