-¿Por que lo dices? -me pregunta-
-Duraste poco bañandote -le digo- y que tal lo que pasó en el hospital, lo del cuchillo -digo fría-
-Isa, es tarde entremos -dice cambiando totalmente de tema-
Tiene razón, no me había dado cuenta que era de noche
-No -digo cortante- no pienso entrar hasta que me digas que me ocultas o que te pasa
-Isa, por favor entremos -dice suplicante- luego vienen zombis y te..te muerden
-¡Que me muerdan! -dije casi gritando- ¡No llevo ni una maldita semana aquí y ya estoy harta de los zombis! Y aparte de eso ¡Me estas ocultando algo! -le dije a punto de gritar- Tú, parte de mi única familia, mi novio, mi todo, me estás ocultando algo -le dije con un hilo de voz-
-Isa, amor calmate -me dijo en voz baja- lo que ocurrió en el hospital...perdón, no quiero hablar de eso -dice bajando la mirada-
-¡Ves! ¡Me estas ocultando algo! -le grite- y no me duele tanto que me ocultes algo ¡Lo que me duele es que seas tú! -le dije con los ojos llorosos-
-Isa por favor no me digas esto -dijo con un hilo de voz-
Luego de decir eso, me beso y yo me separe
-¡Esto no se arregla con besos! -le grite-
Julio se acercó a mi y me cargo como un saco de papas y me llevó como si nada, yo pataleaba y le pegaba manotazos en la espalda, pero nada de eso le importaba, pasamos por la sala y ya los chicos no estaban, supuse que estaban en sus habitaciones
-¡Bajame! -le dije mientras pataleaba-
Llegamos a una habitación que no era la nuestra y cerró la puerta con seguro y me bajo en la cama
-¡Hasta que me bajas! -le dije enojada y levantándome de la cama- ¿Donde estamos? -pregunto enojada-
-Isa -dice tranquilo- estamos en la habitación más alejada de todas y no se escucha nada, no se escucha mucho -me explica tranquilo-
-¡Yo no quiero estar aquí! -le grito-
-Tranquila Isa -dice mientras se acerca-
-¡Aléjate! -le grito-
-No -dice mientras se acerca más-
-Bien me voy yo -dije yendo hacía la puerta-
-No creo -me vuelve y me arrincona en la pared-
-Aléjate -le digo en tono amenazador- o mejor dime ¿Que paso en el hospital? -pregunto-
-No quiero hablar de eso -dice mientras me da un beso en el cuello-
-Entonces me voy -dije intentando evadir a Julio-
-No -dice mientras me tapa el paso- de aquí no te vas -dice dándome un beso en el cuello-
Julio empezó a besarme el cuello y acariciarme la espalda. Metió sus manos por debajo de mi camisa y debajo de mi sostén me empezó a acariciar los pechos, haciéndome soltar un suspiro
-Así no puedo estar enojada contigo -digo entre suspiros-
-Luego hablamos -dice besándome los labios- aquí podremos hacer un poquito más -me susurra-
Que Julio me susurre es algo que hace que me descontrole totalmente, deje el enojo a un lado y lo bese apasionadamente. Baje mis manos hasta su trasero y le metí las manos en las bolsas del pantalón y lo atraje hasta mi, el hizo lo mismo. Luego subí mis manos por debajo de su camisa y se la quite, el hizo lo mismo y me agarro del trasero y me levanto y yo puse mis piernas alrededor de su cintura. Le empecé a besar el cuello y también le deje algunos chupetones. Él se dirigió hasta la cama, el me iba acariciando la espalda y casi llegando me desabrocho el sostén. Me puso en la cama y me quito totalmente el sostén y se me empezó a besar el cuello y mientras lo hacía acariciaba mis pechos haciéndome suspirar. Se vengo y también me dejo chupetones en el cuello. Bajo hasta mis pechos y los empezó a besar y también dejo chupetones.
-Te amo -me dijo a el oído-
Cambie nuestras posiciones
-Yo más -dije mordiendole el labio- y ahora es mi turno -le susurre-
Lo bese en los labios y luego baje hasta su cuello y le deje otro chupete más. Baje hasta su pecho y lo empecé a besar y también le deje chupetones
-Sabes -dije poniéndome de pie- creo que tienes mucha ropa y me haces parecer que soy yo la caliente, cuando todos sabemos que eres tú.
-Y...¿Que piensas hacer? -dijo con una sonrisa pícara-
-Esto -dije mientras le desabrochaba el botón del pantalón y se lo baje- Calvin Klein, que sexy -le dije a el oído-
Lo volví a besar
-Y sabes algo -dice haciéndonos cambiar de posición-
-¿Que? -pregunto con una sonrisa pícara-
-Tu eres la caliente -dice desabrochandome el botón del short y bajandolo-
-Claro soy yo -dije en tono sarcástico-
-Lastimosamente no puedo hacerte lo que quiero y vas a tener que controlarte Isabela -dice serio-
-Lastimosamente -dije- y lastimosamente ya no va a poder ver ni tocar, porque no se controla señorito Peña -dije poniéndome la manta encima del pecho-
-Pero sabes algo -dice con una sonrisa pícara-
-¿Que? -pregunto ingenua-
-Yo quiero ver y tocar -dice mientras me quita la manta- y eso haré -dice mientras me besa el cuello y me acaricia los pechos-
Me acuesta en la cama, se pone encima mio y me comienza a besar apasionadamente. Yo le rodeo con mis piernas la cintura y lo atraigo más hacía mi, haciéndolo que caiga totalmente en mi.
-No quiero parar, pero si seguimos, no me haré cargo de mis actos -digo seria-
-Opino lo mismo -dice quitándose de encima mio-
-Bueno, no se tu, pero yo hoy duermo así -le digo-
-Yo también -dice-
Nos acomodamos en la cama y nos cobijamos. Julio me puso sus manos en mi trasero y me acerco más a él y yo le pasé una de mis piernas por la cintura. Me empezó a acariciar el pelo y lo último que vi antes de cerrar los ojos, fue el reloj. 12:35.
Así nos quedamos dormidos, yo solamente con mis bragas y Julio en ese bóxer de Calvin Klein que lo hacía verse muy sexy y yo con una pierna en su cintura y el abrazándome de la cintura con sus manos en mi trasero.
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"Siempre Estaré Contigo"
AléatoireIsabela Souza tuvo un accidente que la dejó en coma dos meses. En esos dos meses ocurrieron muchas cosas y cambiaron muchas cosas. Julio Peña, su novio siempre estuvo con ella cuidándola y protegiendola hasta que despertará. Cuando Isabela despiert...