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Los ojos felinos y adorables de San se encontraban bajo una suave sombra color pomelo al igual que sus mejillas y labios pintados de un suave anaranjado, arreglo su cabello y revisó su atuendo una vez más en el espejo, acomodó su boina y tomó su bolsa de la cama, colgandola sobre uno de sus hombros, bajo rápidamente, despidiéndose de sus padres, quienes le desearon fuerzas y éxito en su primer día de trabajo.

Al entrar al edificio todo fue un gran bullicio, San no tenía idea de que habría algo importante ese día o si todos los días era así. Recobro la compostura y siguió su camino hacia la secretaria. Esta al verlo sonrió ampliamente.

— Buenos días, vengo por mi identificación — San le brindó una amable sonrisa a la joven, está asintió de inmediato.

— Un momento — pidió buscando dentro del cajón entre muchas — ¿Nombre? — preguntó sin dirigirle la mirada al peli negro de visos rojizos.

— Choi San — respondió mirando a su alrededor. Las personas caminaban de un lado a otro con apuro, haciendo llamadas o simplemente llevando vestuarios por doquier.

— Aquí tienes tu identificación, y tu tarjeta de pase para la cafetería, ahora debes dirigirte al segundo piso en el salón doce, hoy es la sesión fotográfica para la revista en Tokio — la joven al ver a Choi sin comprender que ocurría agregó este último dato. San se sorprendió, ¿hoy?, ¿se suponía que no habían decidido llamarlo o referirse sobre esto para ponerlo a prueba?.

— Gracias — dijo colgando la identificación sobre su cuello y tomado la tarjeta para guardarla. Dio una pequeña reverencia y medio corrió hacia dónde debía dirigirse, comenzó a sentirse nervioso, pero no podía quitar esa torpe sonrisa de hoyuelos de su rostro.

Encontró el salón y sin chistar entró en está, quedando paralizado por unos segundos, el personal era una locura. Rápidamente miró su identificación, Jung Wooyoung. Teniendo en cuenta de quién estaba a cargo, rápidamente se dignó a buscar a la coordinadora encargada. Divisó a una mujer de altos tacones y papeles en mano, se encaminó hacia ella y algo nervioso toco su hombro.

— Buenos días — dijo con una reverencia — Soy el estilista personal de Jung Wooyoung y me preguntaba dónde podría estar — Choi San se caracterizaba por ser alguien dulce a simple vista, no tardaría más de unos días en que todo el personal se sintiera a gusto con él.

— Buenos días cariño — dijo la mujer con una amplia sonrisa — Debes ser el nuevo chico, nos han comentado de ti — San se sintió halagado y agradecido — Mira, necesito que tomes atención — Dijo acercándose a Choi, mostrándole los papeles — Hoy es la sesión fotográfica para la revista en Tokio, y para esto tenemos conceptos. Necesito que Wooyoung lleve un concepto suave, algo primaveral. Ya sabes, cerezos y un clima cálido — San asintió rápidamente, comprendiendo a lo que se refería la mujer — El está allá — dijo apuntando con el bolígrafo la espalda del chico — todo el maquillaje se encuentra en los tocadores, y necesito que vistas al chico, las prendas asignadas están dentro de los camerinos con los nombres correspondientes — ¿Alguna duda? — preguntó rápidamente a lo que San negó, le había quedado claro.

— Muchas gracias — dijo dando una reverencia a lo que la mujer le dijo por repuesta un; "ve, ve". San suspiró, sintiéndose repentinamente torpe, pero necesitaba dar esa imagen de seguridad y confianza.

Ya delante del chico notó que esté estaba sumergido en su teléfono, jugando a quien sabe que, pero se veía bastante concentrado en lo que hacía.

— Buenos días — San dio una pequeña reverencia, haciéndose notar frente al chico. Este rápidamente dejó su teléfono y miró unos cuantos segundos la credencial del contrario.

Boyfriends             ❝woosan❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora