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San despertó al no sentir a Wooyoung a su lado. Se sentó en la cama, intentando despertar, la puerta de la habitación estaba entre abierta. Sin más se puso de pie en busca del menor.

Se dirigía a la sala cuando vio a Wooyoung salir del baño. Este al verlo se detuvo, San lo miró, algo extrañado.

— ¿Wooyoung? — San se acercó a él, tomando su mano con suavidad.

— Lo siento si te desperté, me sentía algo mal — susurró apenado — Creo que la cena, era muy pesada — dijo en hilo de voz.

— No te disculpes pastelito, ¿aún sigues sintiéndote mal? — San tomó el rostro de Woo, el menor asintió. El chico sudaba frío, estaba pálido.

— Lo siento, preparaste esa cena especialmente para mí, de verdad, lo siento bebé, no pensé qu- —

— No — lo interrumpió San, con una cálida sonrisa, intentando tranquilizarlo — Todo esta bien, ¿sí?, ¿recuerdas cuando dijimos que esto sería difícil? — el menor asintió, acercándose avergonzado hacia su novio, abrazándolo — Y lo estás haciendo increíble — Wooyoung sentía las caricias de San sobre su nuca, haciéndolo sentir mejor emocionalmente — Ve a la cama, traere un vaso de agua con azúcar —

Wooyoung asintió, separándose de San para luego irse a la habitación, recostadose sobre la cama. Luego de unos minutos llegó San, dándole el vaso, Wooyoung lo aceptó con una sonrisa. El mayor se sentó a su lado, acariciando los cabellos del menor, mientras este bebía pausadamente el contenido.

— Wooyoung, se que no es el mejor momento, y la hora — dijo San, acomodándose para quedar frente a él — Pero quiero hablar de algo contigo —

Wooyoung asintió, viéndolo, no sabía que tenía para decir el mayor, pero estaba bien, sabía que él mayor nunca se lo diría de mala forma, por qué él lo amaba, podía confiar en que sería amable.

— Claro bebé, sabes que podemos ganar de lo que sea —

— Lo sé — susurró San — Wooyoung, lo estuve pensando, y ahora que la agencia esta dando mas libertad tal vez — mordió su labio inferior, nervioso — Digo, ya sabes, creo qué — intentaba buscar las palabras correctas — primero, ¿Sabes que te amo mucho?, ¿verdad? — Wooyoung asintió de inmediato, lo sabía — Y también sabes, que siempre estaré contigo, ¿no? — el modelo volvió a asentir.

— Vamos, cariño — lo alentó Wooyoung, el mayor suspiro.

— Cuando te sientas bien, tal vez, me gustaría que salieras con tus amigos, algo más que no sea el trabajo, o puedes invitarlos a casa, tal vez salir a comer o hacer algo que les guste, divertirse — Wooyoung alzó una ceja, sin saber a qué venía todo eso — Bebé, quiero que tengas tu espacio, quiero que te diviertas, no que solo pases de la empresa al departamento, cariño, quiero que hagas amigos, y que seas feliz —

— ¿Piensas que no soy feliz contigo? — preguntó Wooyoung algo dolido. San negó rápidamente — ¿Quieres que te de tu espacio?, ¿te estoy molestando? —

— ¡No!, claro que no, al contrario, me encanta estar contigo todo el tiempo, es solo que tu también debes hacer tu vida, me refiero, a salir, tener amigos, tú, algo personal, algo externo a mí — San estaba tan nervioso — Es solo que creo que no te estoy dando el espacio suficiente para que también realices tu vida, es solo eso —

— Claro que no es así, siempre has respetado mi espacio, ¿porqué piensas eso? — Wooyoung dejo el vaso en la mesita de cristal, para luego tomar a San y sentarlo sobre sus piernas.

— La psicóloga la sesión anterior me dijo que el estrés también podría afectar en tu recuperación, solo quiero que te diviertas un poco, no me gusta verte tan deprimido — San se sentía culpable, creía que Wooyoung estaba algo cansado de la rutina.

— Bebé, tu no has hecho nada malo, yo debería estar diciéndote esto. Lo único que has hecho es brindarme tu apoyo, estando a mi lado, siempre, dándome tu atención, me lo has demostrado tantas veces, es por eso que estoy convencido de que me amas, aun así, ese no es mi caso, lo siento tanto, estoy siendo una carga — Wooyoung acariciaba los cabellos de San, mirándolo con ojos tristes y sonrisa débil.

— Wooyoung, lindo, no quiero que vuelvas a decir una tontería como esa, por supuesto que no eres una carga, ¡y claro que me lo demuestras!, dios, Jung Wooyoung, me pediste matrimonio en un traje de galleta de gengibre, ¿no crees que eso es suficiente para demostrarmelo? — San sonrió ampliamente, acercándose para dejar un beso sobre los labios de Wooyoung — Es importante nuestra felicidad tanto de pareja, como la individual, Wooyoung, yo de verdad quiero que seas feliz, te amo tanto, que deseo tu felicidad como nunca antes —

Wooyoung sintió sus ojos empañarse, asintió sonriendole, mientras sus ojos se hacían más pequeños y sus mejillas se abultaban.

— También quiero que seas feliz, San, dios, te amo tanto — dijo tomando las mejillas de San entre sus manos, para estampar su boca con la del mayor. Ambos disfrutando de la calidez de sus labios y corazones — Seamos felices, ¿bien? —

San asintió, abrazándose a Wooyoung, ambos cayendo a la cama con sonrisas en sus rostros.

— Creo que estaría bien salir más seguido, ¿eso estaría bien no? — susurró Wooyoung con San sobre el, acariciando su espalda con dulzura.

— Eso sería fantástico, pastelito —











F I N.

































mentira 🤡
decidan, un final aburrido, el final con el matrimonio, o uno muere.

Boyfriends             ❝woosan❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora