08

4.9K 499 116
                                    

Ya habían pasado dos días desde la estadía y se encontraba agotado, la agenda de Wooyoung era realmente un desastre. Las dos noches en las que compartia habitación con Wooyung, durmieron juntos, todo comenzaba a transformarse en un sentimiento de incertidumbre, sin saber dónde todo esto iba exactamente. Disfrutaba esos momentos íntimos junto al modelo, pero temía que ambos fueran descubiertos, o que Wooyoung se aburriera de él en sólo un par de semanas.

San llegó a la habitación, abriendo está lentamente, para luego adentrarse a la habitación oscura. Prendió las luces, encontrando al modelo recostado en la cama, durmiendo cómodamente sobre la cama. San sonrió y fue al baño, tomó una ducha y se cambió a algo más cómodo. Mañana tendrían el día libre, seguramente irían a turistiar. Se tomó el tiempo de sentarse en su cama y marcar el número para atención a la habitación.

Pidió una botella de vino y algo de licor, estaba agotado y quería relajarse un momento. Colgó y no pasó mucho tiempo para que Wooyoung comenzará a removerse entre las sábanas, despertandose.

— San hyung, estas aquí — murmuró restregando sus ojos perezosos.

— Uhm, ¿descansaste? — preguntó sentándose al lado de Wooyoung en la cama, acariciado su cabello.

— Sí, ya no me siento tan cansado — susurro tomándolo del brazo acercandolo a él, haciéndole un lado en la cama, San sin negarse se recostó en la cama, abrazando la cintura de Wooyoung, ocultándose en su pecho.

Wooyoung aspiro el dulce olor de San mientras una de sus manos acariciaba su cabello. El mayor levantó la mirada, acercándose para dejar un sonoro beso sobre los labios de Wooyoung. El menor no pudo ocultar su sonrisa, ahora iniciando, él, nuevamente el beso, sus manos se movían por la espalda baja de San con apuro, y sus labios se movían cada vez con más rapidez, Wooyoung extrañó los dulces labios de San sobre los suyos, su lengua enredandose con la de San.

Wooyoung posó a San sobre el acariciando sus muslos, San bajo sus labios hacía su mentón y bajo a su cuello, con sus finas manos desabotono algunos botones de la camisa de Wooyoung, besando su cuello con suavidad, succionando en su clavícula y mordiendo su manzana, Wooyoung soltaba pequeños quejidos, mordiendo su labio inferior para no ser ruidoso, sentía que su cuerpo era derretido cada vez que San restregaba su húmeda lengua contra su piel. Wooyoung metió sus manos dentro del pantalón de San, apretando su trasero, buscando más contacto en lo que San metía su lengua nuevamente en su boca. San comenzó a restregar su entrepierna con la de Wooyoung en un instante de segundos, ambos eran un manojo de suspiros y gemidos, el modelo nunca había hecho este tipo de cosas con nadie, llegar a tocar a San de esa forma tan íntima y caliente hacía que se volviera loco.

La puerta fue tocada tres veces para que San se alejara de un Wooyoung agitado y con labios hinchados, su cuello rojizo, junto con una pequeña marca en su clavícula y cabello despeinado, haciéndolo lucir increíble.

San se removió, Wooyoung quito sus manos de la parte trasera de San, soltó un gruñido cuando San se bajó de su cuerpo.

— Será mejor que te cubras cariño — susurró San, dejando un beso sobre la nariz de Wooyoung, este asintió abotonando su camisa, su mirada volvió a ser aburrida, solo San, su madre y amigos lograban ver el otro lado de Wooyoung con profundidad. San no tenía idea de que el modelo se mostraba completamente diferente a cuando estaba con él.

— Buenas noches, gracias por el servicio — dijo San, con su dulce voz característica, la joven dio una pequeña reverencia, mientras San le daba paso para que se adentrara a la habitación, la chica dejó lo que San había pedido para luego marcharse, sin darle ni una sola mirada al caótico Wooyung quién se encontraba en una de las camas.

— ¿Que has pedido? — preguntó Wooyoung levantándose de la cama con curiosidad, San tomó una copa y se sirvió hasta el tope, para luego tragarselo de un solo viaje.

— Alcohol, cosas de adultos — dijo burlándose de Wooyoung, este frunció el ceño tomando también una copa — tú — dijo San quitándole la copa de las manos a Wooyoung — No puedes beber.

— Si puedo San — su voz sonaba molesta, le quito el cristal de las manos a San para servirse un poco de lo que tomaba San, tomándolo rápidamente — Dios esto es horrible — murmuró mirándo a San con una expresión de horror.

— No bebas Wooyoung — dijo San sirviendose su copa una vez más, volviendo a tragar todo de un viaje. San pensó que sería el momento perfecto para fumar un cigarrillo, pero decidió que debía seguir con su plan de abandonarlo por completo.

Wooyoung tomó el vino, sirviéndole a San y a él, ambos comenzaron a beber mientras mantenían una fluida conversación, conociéndose cada vez más, gustandonse cada vez más uno con el otro. Pará cuando terminaron ambas botellas, San estaba en estado crítico, y Wooyoung sólo reía de cómo San intentaba decirle algo, pero las palabras eran arrastradas por la boca del mayor.

— Wooyoung, deja de ser tan lindo — murmuró San al lado de Wooyoung en la cama tomando lo último que quedaba en su copa.

— Podrías habérmelo dicho antes de comenzar a beber como un desquiciado — susurró el menor tomando la cintura de San, quién de inmediato de acurrucó en el pecho de Wooyoung.

— ¿Y por qué?, ya te lo dije ahora — dijo riendo, completamente adormecido por los altos grados de alcohol que debía llevar en el cuerpo.

— San, ¿podemos besarnos? — preguntó Wooyoung jugando con los mechones de cabello que caían sobre los ojos de San. Este asintió de inmediato.

— Sí, por que eres lindo conmigo — susurró subiéndose a ahorcados sobre Wooyoung, lanzándose para abrazarlo.

Wooyoung soltó una risotada, tomando rápidamente el rostro del San, para besarlo, no bastó mucho para que ambos comenzarán a tocarse con atrevimiento.

— Me gusta cuando haces eso — susurró San agitado bajo el trabajado cuerpo de Wooyoung.

— ¿Que cosa? — su boca volvió a uno de sus pezones, succionandolo con suavidad.

— Eso, sigue haciéndolo por favor — murmuró acariciando los cabellos de Wooyoung, soltando pequeños suspiros placenteros.

Luego de esa intensa sesión, ambos estaban recostado en la cama, abrazados mientras sus bocas se juntaban una vez tras otra, hasta que ambos decidieron que era hora de dormír.

— Wooyoung, quiero que repitamos eso — dijo acariciando con sus suaves dedos la piel de la cintura del modelo.

— ¿Tocarnos? — susurro mirando el techo de la habitación, a lo que San asintió.

— Eso está bien para mí — dijo Wooyoung con una gran sonrisa sobre sus labios.

San se sintió avergonzado y tonto, en milésima de segundos, comenzando a sentirse ridículo, ¿que estaba haciendo?, todo está mal, completamente mal, sin más se giró para cerrar sus ojos e intentar dormir, dejando a Wooyoung confundido.














Boyfriends             ❝woosan❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora