Capítulo 8.1

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-Los dos caminábamos por la playa, eran las 7 y algo y entonces tuve que dejarte sola para pasar por el sirena a buscar unos cigarros que me había encargado el profesor, yo era el único que sabía que él se escondía fumar en el campamento por qué de vez en cuando lo acompañaba. Cuando iba llegando al hotel me detuve un momento y miré hacia arriba y desde el ángulo en el que me encontraba se veía perfectamente el cuarto de cristal, adornado con flores, un detalle muy bonito de parte de daniel- hizo una pausa y se limpio las lágrimas
-Cuando salí de el hotel lo hice por el otro extremo que es por donde vendían los chocolates que me gustan y lo que vi cuando mire hacia arriba fue la sorpresa más desagradable de mi vida, vi como alguien discutía con Laura y la tomaba de la mano para luego lanzarla desde el balcón del 5to piso. Entonces esa persona me vio y todavía con el móvil de Laura en la mano hizo varias llamadas a el mío, yo colgué varias veces, estaba demaciado asustado pero a la 8va llamada decidí contestar u era su voz, la voz que había escuchado tantas veces en nuestro grupo, era esa voz la que me decía que me quedara callado, que si no te matarían, esa persona sabía que me gustabas y me aterraba la idea de perderte, lo hice todo por ti, no era mi intención que muriera más gente lo juro -
Dijo mientras me miraba a los ojos
-¿Sander, a quien pertenecía esa voz, a quien viste en el balcón?-
-Carla- Dijo mirando a la mesa y bajando la voz.

Enseguida comenzaron los trámites para dejar en libertad a Felipe y a Sander, pero la historia no acabó con esa confesión, algo mucho más obscuro se aproximaba a nosotros.
-¿Todo este tiempo y no dijiste nada?¿Sabes cuántas personas estuvieran vivos si hubieras hablados antes? Nuestros puntos amigos estuvieran vivos. Espero que vivas muchos años para que cargues con cada una de sus muertes en tu conciencia- En ese momento me derrumbe y lloré por mi, y por todos mis amigos y por todas la madres que perdieron a sus hijos y por qué ahunque yo no podía haberlo evitado me sentí culpable de no haber hecho nada para ayudar a que todo aquello se detuviera de una vez por todas

Estuve varias horas caminando, esperando a que mi mamá y mi papá no estuvieran en casa para encerrarme a llorar sin tener que dar explicaciones.
Fue entonces cuando recibí una llamada de el teniente a cargo de el caso, me dijo que habían ido a casa de Carla y no la habían encontrado y cuando fueron a casa de Adriel lo encontraron en su cuarto con la garganta cortada bañado en un charco de sangre.
Estado era el colmo, como era posible que la policía no pudiera atrapar a una adolescente de 17 años.

En aquella llamada el oficial me dijo que fuera a mi casa, que me encerrará que iba a mandar dos guardias de seguridad para mí protección y que estaban intentando localizar a Sander para protegerlo a él también.

Llegué a la casa y cuando prendí las luces sentí un fuerte golpe en la nuca. Cuando abrí los ojos estaba amarrada en una silla en la cocina de mi casa.
Delante de mí estaba Carla tan tranquila como siempre, comiéndose una manzana en una silla frente a la mía. Todavía no me creía que ella fuera la culpable de todos esos crímenes que llevaban provocándome pesadillas varias semanas, de esos crímenes que me habían arruinado la vida y que se la había quitado a mis amigos.
-Al fin despertaste, estaba muy aburrida- Me dijo mientras metía un trozo de manzana a su boca y lo masticaba sin apartar los ojos de mi.
Estaba tratando de intimidarme, estoy segura de que no estaba ten tranquila como parecía. Pensé mientras intentaba soltar el nudo que amarraba mis manos a la espalda de la silla.

-La policía viene para acá- le dije e hice un esfuerzo para soltarme pero ella hacía los ejotes nudos de la clase de campismos .

-La verdad ya no me porta si me atrapan o no, ya soy libre ahunque este encerrada, libre de mis propias culpas y complejos, no me importa nada - soltó el cuchillo con el que picaba la manzana y cruzó las piernas

-Hoy te quiero contar una historia, la historia de una chica a la que con solo 15 años la humillaron, la engañaron y la hicieron quedar como una idiota en el medio de una fiesta en la casa de Laura, ¿Recuerdas esa fiesta?- se acercó un poco más y sentí que mis piernas temblaban, tragué y le respondí lo más serán que pude.

-Claro que me acuerdo de esa fiesta, era su cumpleaños y lo estábamos celebrando en la piscina, bebimos mucho y cometimos estupideces -

-No tienes ni idea de lo estúpidos que fueron, te voy a contar desde mi punto de vista lo que pasó- sonrió y volvió a tomar el cuchillo de encima de la mesa.

-Habia una vez un grupo de amigos, unos amigos muy estúpidos, queuna noche de borrachera decidieron jugar con la pieza débil d el grupo. Recuerdo que esa noche Daniel se acercó a mi, me beso el cuello y me dijo que estaba preciosa, me sorprendió mucho esa actitud de un chico que rara vez me volteaba a ver, lo deje pasar sin más por que era el cumpleaños de Laura y por lo que sabía a ella le gustaba en ese entonces. Media hora más tarde me tomo de la mano y me llevó al interior de la casa, en un cuarto en el primer piso, a la derecha de la puerta trasera, cerca de la piscina. No sabía si aquello era real, Daniel me había gustado desde siempre y quería acostarse conmigo, después de un rato de hacerme la difícil le dije que si, le iba a entregar mi virginidad a ese chico y cuando yo estaba prácticamente desnuda en aquella cama entraron todos y gritaron SORPRESA! y valla que me sorprendí. Me agarraron por las manos y por los pies y me tiraron a la piscina, a la única chica que no sabía nadar-

-Nosotros no lo sabiamos- la interrumpí, lo que pareció no gustarle

- Cállate, es mi turno ahora de tirarlos a todos a la piscina, tu no sabes lo que es vivir escuchando el eco de la voz de Laura en la orilla de la piscina repitiendo una y otra vez“Si se lo dices a alguien te mato”, la pobre murió escuchando esa frase- sonrió de forma psicópata.

-Carla, en verdad los siento tanto, no sabía que eso te había marcado tanto, yo jamás estuve de acuerdo-

-Que hermosa confesión, pero casi 3 años después no me sirve para nada, tu no sabes lo que es despertarse a media noche sudando y jadeando, despertar de una pesadilla en la que por más que nado no puedo llegar a la superficie y no puedo respirar, hoy por fin estoy respirando, hoy todos los fantasmas de esa noche descansan en paz junto con mis pesadillas- suspiro y se acomoden hla silla.

-Espera un segundo, Sander no estaba en aquel entonces en nuestro grupo¿también lo vas a matar o tu plan siempre a fue hacer que el cargará con las culpas?- le dije tratando de alargar la conversación y dar tiempo a que llegarán los policías que me habían enviado.

-¿Tampoco entiendes esa parte? En serio te creía la lista, digamos que te lo voy a resumir en pocas palabras, él está más loco que yo-

De repente una bala le atravesó la sien, por un momento pensé que era la policía pero no, era Sander con una pistola con silenciador en las manos.
Me desató las manos y me dijo que lo siguiera.

-Espera,¿Como sabías donde estaba y que Carla estaba aquí y por qué rayos tienes un arma?-

-El arma es de las que tu papá guarda en el cajón de la oficina y se que estabas aquí porque el oficial me llamo al móvil y supuse que Carla vendría detrás de ti -

Pronto me di cuenta de que si no corría en ese momento sería la próxima en morir, su móvil estaba todavía en la estación mientras analizaban las llamadas y la pistola que tenía en la manos no era de las de mi padre, era una pistola de guardias, do de las que usan los militares de alto rango.
Corrí hacia la sala de mi casa lo más rápido que puede pero me tropecé en la salida de la cocina con los cuerpos de los oficiales enviados para mí protección.

Esto era una pesadilla, una puñetera película de suspenso que parecía no tener final y cuando pensé que las cosas de aclaraban un poco todo se volvía a oscurecer.
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Tuve que dividir el capítulo en 2 partes por que era demasiado largo para mi gusto, dentro de poco tendrán la 8.2 y una cuántas respuestas.
Este capítulo se lo quiero dedicar a ayenia1207 mi hermanita de otra madre qué ahunque está tan lejos está pendiente de esta historia.
Los quiero mucho y gracias por leer hasta aquí.
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