𝑻𝑴𝑵𝑻 ➼『 𝐍𝐮𝐞𝐯𝐨 𝐜𝐨𝐦𝐩𝐚𝐧̃𝐞𝐫𝐨 』

Capitulo 4

El nuevo horario que tenia el de cabello negro-azulado no había cambiado mucho, solo una hora antes pero igual no es como si fuera un problema. Metió un poco mas su nariz entre los pliegues de su bufanda, era una mañana helado ya que la época de invierno estaba a la vuelta de la esquina.  

Llevaba dos cafés consigo, quería ser amable con su superior así que no vio problema en pasar por unos, aun le faltaban cuadras para llegar, el sonido de un claxon lo hizo mirar hacia la calle y encontrándose con la mirada de su jefe que inmediatamente sintió su rostro rojo, mas aun cuando el pelirrojo le abrió la puerta del copiloto.

Rafa: ¿Vas a subir o no? —Lo miro de reojo con notorio ordenamiento en la voz.—

Leo: Mmm, bu-buenos días, jefe —Carraspeo ligeramente mientras sube al auto y cierra la puerta.—

Rafa: ¿Dos cafés? —Arqueo una ceja en confusión.—

Leo: Oh, si, esto, amm —Paso saliva con nervios en un intento de parar su tartamudeo.— Yo, amm, pensé que-es decir

Rafa: Espero no traiga mucha azúcar —Tomo uno de los vasos y rápidamente dio un sorbo.— Esta bien

Leo: ¿De ver-verdad? —Ya con su mano libre, llevo la misma a su nuca.— Me-me alegro, gra-gracias por llevarme 

El mayor se limito a solo asentir e iniciar a conducir directo a la comisaria, todo el recorrido solo fue silencio y el sonido de sorbos al tomar ambos hombres de sus cafés, el de complexión mas delgada llego a mover un poco sus labios al querer sacarle conversación al pelirrojo pero no se animo, apenas el café había sido un avance.

Al llegar, el dueño del auto se estaciono y ambos bajaron, caminaron juntos hasta entrar por las puertas de vidrio, Leo se sorprendió un poco al ver que los rumores del gran respeto que tenia el pelirrojo por parte de los demás empleados del FBI eran verdad y ahora le toco ser su compañero, se sentía alagado de poder estar con el agente mas respetable del lugar.

Rafael siguió dando sorbos a su café, recoger al chico fue la mejor acción que había hecho y al menos tuvo su recompensa, un buen café caliente; Quizá haber entablado una platica con su compañero no hubiera estado mal pero no estaba de humor como para saber cosas personales.

Marcos: Agente Rafael —Se acerco a ambos hombres.— Lo solicitan en el área de interrogación

El hombre de cabellera teñida de verde se acerco, era uno de los tantos secretarios que estaban a cargo de informar sobre las reuniones o de nuevos casos, hacer archivos y llamar a otras áreas del departamento. Eran un buen apoyo cuando se trataba de mucho papeleo.

Rafa: ¿Mikey ya llego? —Movió ligeramente el vaso.—

Marcos: Si, señor, de hecho lo esta esperando —Se giro un poco señalando hacia el área dicha.—

Rafa: Vamos, Leonardo —Mira al de cabello teñido.— ¿Puede venir, verdad?

Marcos: Por supuesto, señor —Asiente de manera segura.—

Mientras los dos agentes se dirigían al área de interrogatorios, Miguel Ángel ya estaba dentro de la habitación sentado en una silla con el criminal que lograron atrapar días atrás, el famoso Bradford descansaba en otra silla con las manos esposadas tras su espalda, ambos parecían hacer una pelea de miradas de ver quien parpadeaba primero; Para el rubio ese juego hubiera sido increíble de no ser que estuviera trabajando.

Una mesa de metal los separaba y sobre esta había una lampara la cual estaba encendida puesto que los focos en esa zona solían dar poca luz, ¿Porque? Ni el rubio sabia pero según él era para darle un efecto mas misterioso a la hora de interrogar o era por el poco presupuesto que no alcanzaba para focos mejores.