𝑻𝑴𝑵𝑻 ➼『 𝐍𝐮𝐞𝐯𝐨 𝐜𝐨𝐦𝐩𝐚𝐧̃𝐞𝐫𝐨 』

Capitulo 9

El avión en el que iban Xever y Bratfort había aterrizado en una isla a la mitad de la nada, el moreno veía aquel lugar con una mueca puesto que hace ya algunos años que no recordaba cómo se veía la base del pie. Bajaron del avión, sintiendo rápidamente la mirada de su líder sobre ellos; Apenas llegaron al suelo cuando una patada los mando casi al otro lado del lugar, Saki odiaba las fallas.

Saki: Un perro hace mejor trabajo que ustedes dos juntos —Caminó hacia aquellos dos, claramente molesto.—

Xever: Ma-maestro destructor —Se arrastro un poco, quedando de rodillas frente al hombre. — Le juro que no volverá a pasar

Saki: Te atraparon a ti y al inútil de Bradfort ¡Sin ningún problema! —Se dirigió al ultimo mencionado, pateando sus costillas.—

Bradfort: ¡AAHG! —Hizo una mueca de dolor, incorporándose y quedar igual de rodillas.— Maestro, por favor, se lo vamos a compensar, denos otra oportunidad

Saki: Sus suplicas no sirven de nada, ante esto ya hubiera acabado con sus miserables vidas —Llevó sus brazos tras su espalda, dando media vuelta.— Para su suerte, hicieron algo bien 

Dichas esas palabras, el hombre caminó hacia la entrada de lo que parecía era una bodega, Bradfort y Xever se levantaron adoloridos del suelo y le siguieron no muy de cerca, entrando tras él. Dentro de aquel lugar habían hombres vistiendo ropa negra con pasamontañas cubriendo sus rostros, llevando y cargando cajas las cuales o contenían drogas o armas. Destructor junto a su clan del pie era el mas grande mafioso y traficante de esa parte del mundo.

El castaño noto a lo lejos a dos de sus compañeros, ese par de idiotas se encargaban de hacer terrorismo en contra de los otros mafiosos que no cooperaran con su jefe y de vez en cuando en atacar otras zonas, Bebop y Rocksteady fueron los encargados de hacer esa bomba falsa. Llegaron a la oficina de su jefe, Saki tomó asiento y ambos esperaron de pie.

Saki: No los matare, eso pude hacerlo afuera —Se quito el sombrero, dejando a la vista las cicatrices que llenaban el lado derecho.— Les daré nuevas ordenes

Bradfort: Gracias maes- —La voz del hombre lo interrumpió.—

Saki: Que recibirán de mi nuevo segundo al mando —Miró hacia la puerta.— Puedes pasar Tiger Claw

Ambos miraron hacia la puerta por la cual ingreso un hombre alto, musculoso, de tez bronceada, su cabello era de un tono casi naranja pero de arriba se le veía inicios de color negro, un parche cubría su ojo derecho, si el moreno y el castaño pronto se sintieron intimidados y más ante el aura de frialdad que transmitía el sujeto.

Saki: Tiger Claw volverá con ustedes a New York —Se levantó de su lugar, mirando por sus grandes ventanas a sus trabajadores.— ¿Tienes el plan listo?

TG: Si, maestro —Asintió, su ronca voz podía hacer doblegar a cualquiera.—

Saki: Explícale a estos idiotas —Los mira por sobre su hombro.— No me fallen esta vez

Los tres hicieron una reverencia, saliendo de la oficina Xever y Bradfort pronto respiraron cómo si no lo hubieran hecho en mucho tiempo, teniendo la mirada de su nuevo superior sobre ellos. Enderezaron su postura, claro que el tenso ambiente se sentía entre ellos. 

Xever: No soy bueno siguiendo ordenes —Se cruzo de brazos, mirando al más alto.—

TG: No me interesa —Acomodo las mangas de su camisa.— O me escuchas o te mueres, es simple 

Bradfort: ¿Por qué eres tu el mano derecha del jefe? —Se apresuro a desviar aquella conversación.— 

TG: No tengo porque responderles nada —Pasó lentamente su lengua por sus labios, sonriente.— Al menos no ahora, no me agradan, mañana volvemos a New York y les explicare el plan