Story Of Assassins (Traducido por AldiniBrothers Hecha por Reversalsun)

Capítulo 9: La Guerra a Venezia - Parte 2

Prefacio

Los capítulos 9 y 10 se escribieron como una sola pieza, pero he decidido dividirlos en dos capítulos para que su tamaño combinado sea manejable. Como tales, están destinados a ser leídos juntos si es posible y no tienen descanso entre sus eventos. Gracias y disfruta!

Fugo estaba casi sin aliento cuando llegó a la puerta destrozada. Sheila ya había entrado en la habitación donde su objetivo había tratado de escapar de ellos. Caminó lentamente por el suelo, acechando un amplio círculo alrededor de Formaggio. El zumbido del motor al ralentí de Aerosmith envolvió toda la escena.

"Entonces, ¿qué vas a hacer, princesa?" Una sonrisa torcida se movió en los labios del jengibre cuando sus ojos se encontraron con los de Sheila. Ella fue implacable. Sus palabras pasaron por ella sin efecto.

"¿Dónde está el resto de tu equipo?" Ella le disparó la pregunta.

"¿Equipo? Lamento decirlo, creo que me he ido solo recientemente". Bromeó, levantando los brazos detrás de la cabeza y estirando las piernas un poco antes de que el dolor de sus heridas detuviera el movimiento rápidamente.

"No soy idiota. Sé que están aquí. Te vi con ellos en tu última parada en boxes". Estaba cada vez más impaciente con la actitud payasa del asesino. "Si no me dices dónde están, te arrancaré una de las piernas". La amenaza parecía acercarlo a la realidad. La sonrisa de Formaggio se desvaneció en una mueca desdeñosa.

"No lo tomes como una invitación ni nada, pero no tengo nada que decirte". Sheila finalmente había dejado de pasearse. Él mantuvo sus ojos en ella. Ella se daría cuenta si él intentara influir en su entorno. Solo se le permitió un breve momento para mirar a su alrededor antes de que llegaran sus enemigos. La habitación en la que estaban no era demasiado grande, pero ella mantenía su distancia lo mejor que podía. Había visto una estantería, el sofá detrás de él y el espejo encima. Nada que pudiera usar en este momento.

Formaggio se quedó quieto. Invitar a un ataque sería su peor apuesta en este momento. Todavía había otro por el que preocuparse: el rubio que Sheila había traído con ella. Estaba esperando cerca de la entrada. No es un fanático de los espacios cerrados, asumió el jengibre.

"No me mientas", gruñó Sheila. El niño vudú se materializó a su lado. "Dime dónde está".

"¿Él? ¿Esto es personal ahora?" Antes de que el jengibre pudiera comenzar a bromear de nuevo, la tribuna entró en acción. Formaggio preparó sus piernas ya entumecidas para el impacto, solo para descubrir que él no era su objetivo. El puño de Voodoo Child había aterrizado junto a su pierna, apenas a un pelo de distancia. Después de golpear, regresó a su maestro con cara de piedra. Formaggio parpadeó. ¿Era esto una especie de intimidación? Sus ojos habían seguido la posición de regreso a Sheila. No vio los labios regordetes formados por la alfombra, ni los dientes blancos nacarados que los seguían. Su primer indicio de su presencia fue el aliento caliente que rodó sobre su pierna. Se le erizaron los pelos de la nuca. No se le permitía el lujo de ver a su atacante antes de que sus dientes lo desgarraran. Dentados, caninos antinaturales excavados en su piel.

El aliento atrapado en su garganta con el impacto. La adrenalina que ya bombeaba por sus venas no fue suficiente para calmar sus gritos nerviosos. Pura agonía atravesó su cuerpo. Sintió como si no pudiera moverse. La conmoción lo sujetó a su rígida figura. Los músculos se tensan y flexionan contra el dolor como si pudiera ayudar.

"Ahora habla." Ella habló en un retumbar bajo. Fugo apartó los ojos de la escena de tortura para mirar a Sheila. Por supuesto, la vista lo perturbaba, pero de alguna manera había esperado esto. La chica delante de él era un caparazón lleno de nada más que su deseo de alcanzar una meta.