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Y sin más me separe de ella. No me podía creer lo que había hecho. 

- yo... lo siento. - dijo ella.

- ¡No es tu culpa! Es mía... Lo siento de verdad. Yo no...

- Lo sé, se que no querías. Lo entiendo.

- ¡No! Claro que me apetecía pero... 

Pero porqué digo estas cosas... 

- Debo de marcharme. 

- Thiago... espera.

- Lo siento Luciana pero hay alguien que me espera en casa. 

Debo arreglar estos sentimientos. No puedo estar confundido. Siempre he amado a Sofi.

- Eso es lo que piensas tu.- ríe. 

- Tú. - me gire y allí estaba ese maldito conejo- ¿Que haces aquí?

- A sofi no le va a gustar saber que su novio beso a otra chica.

- ¿A caso tu... visto eso? - ese conejo asiente. Me tenia entre sus patas. - ¿Que es lo que quieres? 

- Emm... no lo sé... a lo mejor tu no quieres tanto a Sofi como nos has hecho creer. 

- ¿Qué? ¡Claro que la quiero!

- Pero no la amas.  - en ese momento me quede callado, sin poder responder - vez, tu amor por ella no existe. Tu corazón no ama a Sofi.

- Yo... ¡Claro que la amo! Ella es todo para mi. 

- Entonces... ¿por qué besaste a otra chica?

- Fue un error. No volverá a suceder.  - dije en un tono serio.

- Eso es lo que tu crees... pero tu corazón te pide que la vuelvas besar.  No eres más que un chico que creer saberlo todo pero en verdad no eres más que un cobarde. A caso no te has preguntado... ¿por qué Sofi te ignora o por qué has dejado a tu hermana aun lado? A caso sabes porqué tu hermana pidió ese deseo ¿No verdad? Nunca te has preguntado porqué os he traído a otro mundo. No soy un conejo normal, no suelo ayudar a la gente. Solo aquellos que de verdad me necesitan.

- ¿Estas diciendo que yo te necesito? Sabes, no necesito tu ayuda. Mi vida era perfecta antes de que mi hermana pidiera ese maldito deseo. Sofi y yo eramos felices.

- cierto... pero tu hermana no. 

De pronto sentí un pequeño dolor en mi corazón. 

- A veces dejamos a un lado a las personas que mas nos necesitan.

- ¿Qué es lo que sabes de mi hermana? 

- Se muchas cosas que tu no sabes de ella y creo que tampoco de Sofi. De verdad crees que tienes futuro con ella. ¿Que pasaría si Sofi desapareciera?

- ¡Ni se te ocurra tocar a Sofi! - dije enojado- A mi me puedes hacer lo que quieras pero a ella no la toques. 

- A lo mejor ella prefiere desaparecer. 

- ¿Como...?

En ese momento ese maldito conejo desapareció dejándome preocupado y dudando de mi mismo. ¿Sofi quiere desaparecer? No... eso es imposible. 

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Nr omnisciente 

Unas horas después, Amelia despertó con un pequeño dolor en la cabeza. Se dio cuenta que esa no era su habitación. En ese momento, mientras Amelia revisaba el dormitorio, Celeste entro con una bandeja llena de comida.

- Veo que ya estas despierta. Toma. - dijo mientras dejaba la bandeja en su escritorio- dice mi madre que comas un poco. 

- Esa mujer es tu madre... 

- como veras si. Creo que te has dado un fuerte golpe en la cabeza cuando te desmayaste. 

- No, estoy bien, solo que... esa mujer es...

Amelia había descubierto que en ese mundo su abuela (sara) estaba viva. 

- ¿Qué haces aquí? - dijo mientras tocia. 

Amelia en ese momento se preocupo por ella. Se acerco y la ayudo a sentarse. 

- Gracias. - dijo celeste.

- Lo siento, por lo de ese día. No quería... - Celeste le interrumpe.

- No te preocupes, ya paso. Por cierto como llegaste a mi casa. 

- La tía... no, perdona. Digo tu hermana me dijo que estabas enferma y que podía visitarte. 

Amelia había observado una foto, en las cuales aparecían su hermana, sus padres y otra familia. 

- Puedo preguntarte una cosa.

- Depende. 

- ¿Quien son esas personas? Las que aparecen en esa fotografía. 

Celeste suspira. Observa la fotografía y dice lo siguiente:

- Son mi segunda familia o bueno lo que queda de ella... - dijo agachando la cabeza-  Las personas que están a lado de mi padres, son los señores Tuan y los de abajo son sus hijos. Cuando era mas pequeña solía jugar mucho con sus hijos, sobretodo con Mark. 

- Así que en el fondo os llevabais bien.

- Si. - sonríe Celeste- Nuestros padres eran muy cercanos. 

- ¿Y que paso para que odiaras tanto a papá? 

Celeste la miro con extrañeza. 

- Me puedes contar un poco como acabe con Mark en tu mundo. Si me lo explicas, te contare todo. 

Celeste y Amelia hicieron un trato. Amelia le explico la historia de amor de sus padre, los obstáculos que ellos pasaron para poder estar juntos y como llegaron adoptar a Sofia. Celeste se sorprendió al darse cuenta que en ese mundo su apreciada madre estaba muerta, que estuvo largos años separada de su hermana y padre, y que su amor con Mark había sido muy duro. Celeste no pudo contener las lagrimas, rompió en llanto.

Después de un largo silencio Celeste se calmo y comenzó a explicarle sus motivos de odio o lo que ella creía sobre Mark.

- Todo empezó el día del cumpleaños de mi abuela. Ese día mis padres y los padres de Mark le habían preparado una fiesta sorpresa en nuestra casa. Mamá y la señora Dorine tenían que ir a por la tarta y a mi, como me gustaba mucho acompañar a mi madre, la seguí. Después de recoger la tarta, mi madre condujo hasta casa pero por el camino nos topamos con un obstáculo. La rueda delantera del copiloto explotó y eso provocó que el coche se desequilibrara y acabará dando vueltas. 

- ¿Qué?

- Cuando desperté, supe que la señor Dorine no había sobrevivido al accidente. Entonces, cuando quise acercarme a Mark, el automáticamente se alejo de mi. El nos culpo de la muerte de su madre. El me odio y odia a mi madre. 

- La abuela Dorine esta muerta en este mundo. 

Amelia le impacto demasiado al saber que su abuela estaba muerta. 

- Si pudiera volver atrás lo haría. Mark para mi era todo. Des de que era niña el siempre me gusto pero ahora todo a cambiado. - dijo con tristeza. 

Amelia entendió porqué Mark actuaba así con Celeste. 

- Cuando supe que en tu mundo estaba casada con Mark, por dentro sentí una alegría. 

- Pero no es tu culpa... - Amelia se levanta preocupada- todo esto es mi culpa... Creí que era la única que se sentía triste y miserable. Esta no es la vida que tu y papá se merecen. Tampoco la de Thiago y Sofi. Tu amas a papá, en el fondo de tu corazón lo amas.

- Si...

- Hay algo que no le he contando a mi madre. - Amelia sin pensarlo se acerca a Celeste y no duda en agarrarle de las manos-  nunca me atreví a contarle esto a mi madre, osea a ti. 


Un nuevo comienzo《3r Temporada》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora