Es tal como la imaginé.
Cada lugar, cada rincón. Incluso cada color. Toco los muebles y deslizo mis manos sobre las paredes. Mis acuarelas están en la mesita del medio. También lo están esos libros que no necesitaré más. Desde hoy compraré igual que los de la gente normal. Llevas en tu mano unos tulipanes amarillos que compraste para mí. Un cartel de bienvenida está colgado junto a varios globos por ahí.
Me volteo para verte.
—Cariño, estoy tan feliz, pensar que ya puedes ver. Por mi culpa estu...
—Shhhh calla JungKook —te susurro poniendo mis dedos encima de tus labios. ¿No ves que estás hiriéndome?
Aparte de revolcarte cada día con ella, encima me haces sentir mal por lo del accidente. ¿Qué clase de persona eres? Cállate y déjame verlo el lugar en el que he estado encerrado por más de diez años. Camino hacia nuestra habitación y sí, es tan hermosa como alguna vez dijiste que lo era. Hay fotografías nuestras en un collage pegado en la pared. ¿Cuándo fui pelirosa? Ya ni siquiera lo recuerdo.
Estás parado en la puerta.
Y sé que el momento ha llegado.
Me sonríes y siento mi corazón latir con fuerza. Tengo tantas ganas de llorar, pero no puedo permitir que me veas así. Ya no puedo permitir que veas este débil ser que se derrite con solo mirarte. Que ha vivido en la oscuridad tantos años y que lo único que deseaba era ver tu rostro, sentir tus labios y ver tu cuerpo danzando sobre el mío.
No sobre el de alguien más.
—Cariño... —llamas otra vez con esa palabra que tanto odio—. Te amo.
Y estampas tus labios sobre los míos.
Trato de quitarte de encima pero me aprisionas entre tus brazos y sin querer ya he gemido tu nombre. ¿Esto es lo que aun provocas en mí? Mis manos toman tus brazos y mi fuerza de voluntad vuelve a aparecer para detenerte, pero mis labios siguen tu compás. ¿Hace cuánto tiempo no te he besado? Me empujas suavemente y llegas al borde de esa cama que ha sido testigo de nuestra unión muchas veces, de esa cama en donde hemos dormido abrazados y también separados. Me acuestas lentamente y puedo ver como cierras tus ojos al besarme. ¿A quién estás recordando? Tus labios siguen moviéndose y me miras con los ojos brillantes. Te observo por un momento corto y parpadeo, ya tus labios caen en mi cuello con ímpetu.
Te empujo.
Caes sorprendido y me miras con curiosidad. Te levantas y sonríes. ¿Qué es lo que estás pensando? Me levanto yo también como si quisiera no verte más, pero sé bien que eso es mentira. Aún así, necesito terminarlo todo ya.
—Bebé, ¿qué ocurre? —preguntas acercándote.
Y así acaba lo nuestro.
—Me voy de tu casa —te digo fuerte y claro.
Sueltas una risa que ha aumentado mi dolor.
—¿Qué es lo que dices cariño? —preguntas graciosamente aunque yo no le veo la gracia—. ¿A dónde irás? ¿Quieres ir a visitar a alguien?
—No JungKook —te suelto irónicamente. ¿A quién voy a visitar si no tengo a nadie?—. Quiero decir que terminamos, que no quiero volverte a ver ¡en mi vida!
—¿Qué... Qué e-estás diciendo JiMin?
—Estuve aguantando todo este tiempo solo por la operación —te espeto. Si tu has jugado conmigo tanto tiempo, dos también puede jugar este juego—. Yo te he amado por muchísimos años, espero que no te haya molestado soportarme estos últimos cuatro meses.
—JiMin...
—Me largo de aquí —respondo acercándome al clóset para sacar alguna maleta. Literalmente todo es tuyo, jamás me dejaste trabajar. Ahora que me doy cuenta, ¿tan inútil fui para ti que no me dejabas hacer nada? ¿Que las alas me arrebatabas?—. Te devolveré lo poco que me estoy llevando cuando consiga un empleo.
¿Sabes cuán fuerte estoy siendo ahora cómo para dejar irte mi amor?
—Debes estar jugando —sueltas incrédulo acercándote a detenerme—. ¡¿Qué mierda está pasando?!
—Jugando... —repito—, sí, jugando como tu has jugado conmigo todo este maldito tiempo.
—Bebé... —susurras asustado. ¿No ves acaso que tus facciones acaban de exponerte?
—Mientras el ciego e inútil JiMin estaba encerrado en esta casa, ocultado, deprimido y sin hacer nada, mientras te esperaba cada noche y cada madrugada, tú te revolcabas entre las piernas de alguien más —te escupo con rabia—. ¿No es con NaYeon con quién te vas a casar?
—JiMin yo no...
—¡Cállate! ¿Cállate maldita sea! ¿Pensaste que el estúpido ciego de JiMin no se iba a dar cuenta? ¡¿Tan inútil crees que soy?!
Cuánto vacío hay en este lugar. Cuánto desamor colgado en la pared. Y aunque ahora estoy gritándote con todas mis fuerzas, por dentro ya te estoy extrañando. Me imagino toda mi vida viviendo sobre un hilo, amándote y recordando nuestras promesas. Esas promesas que decían que siempre estaríamos unidos.
Extrañaré hasta el sonido que hacían tus zapatos al llegar.
Quiero decirte que te amo. Que te extrañaré en mis días, que te extrañaré en mis noches. Y desde el momento que estés sin mí, voy a llorar recordándote, mientras mi corazón se rompe en trozos. Que mis labios van a anhelarte como nunca. Que mis cuerpo va a rogar por ti.
Pero ahora voy a marcharme.
Los detalles, las cosas que amé de ti, nunca las voy a olvidar. Y aunque tenga tanta rabia, antes de irme de tu vida quiero que sepas que nunca voy a olvidarte, que el tiempo que duró nuestro amor, tú me hiciste demasiado feliz y que estés en dónde estés JungKook, te desearé siempre lo mejor.
Y si una vez escribí tu nombre junto al mío en este libro, hoy arrancaré esa hoja.
Ya no queda nada que callar. Ya no le tengo miedo en este infierno. Ya se acabó esta hipocresía y tu falso cuento. Si ya va a terminar todo este teatro, ¿entonces por qué entonces duele tanto?
Cuando el tren de una historia muerta pasa nuevamente, puede ser que la hierba crezca, pero solo para enterrarse en nuestros pies.
Para hundirse como el amor que nos teníamos.
Y ojalá que la que está hoy a tu lado, te ame.
Que te haga feliz, aunque no sé si pueda. Hoy me liberaré de ti aunque no lo creas. Pero sé que volverás, que lo intentarás aunque de nada te sirva rogarme. Me caducaste la paciencia JungKook, me saturaste de ti, de tu mentir y tu ausencia.
Pobre la que sufra tu indiferencia, aquella que hoy está en mi lugar.
Me has hecho darme cuenta de mi miedo más profundo al mentirme y desgarrarme.
ESTÁS LEYENDO
ɪ'ᴍ ɴᴏᴛ ᴛʜᴇ ᴏɴʟʏ ᴏɴᴇ ➳ [ ᴋᴏᴏᴋᴍɪɴ ]
Short StoryJiMin ama con locura a JungKook. Después de tantos años a su lado, lo sigue amando con la misma intensidad. Para él, JungKook es esa luz que le falta a su vida, es el tiempo cálido que lo abraza cada día. Pero JungKook tiene a alguien más. Lo enga...