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—Oye, oye, ¡Addie! — escuché un grito
Dejé de caminar y solamente ladié un poco mi cabeza para verificar de quién se trataba
—Hey — saludó hasta llegar a lado — te vengo gritando desde en la salida
—Perdón Juan, es sólo que...no te escuché — dije en un tono de disculpa — ¿ocupas algo?
—Solamente te quería preguntarte que si todo está bien...digo...te he visto rara últimamente y pensé que tenías algo
—¿Rara en que sentido?
—Te veo un poco desanimada
Di una leve risita
—Estoy bien Juan, lo juro
—¿segura?
Asentí
—Bueno, si necesitas algo ya sabes...te veo mañana
—Hasta mañana Juan — dije mientras me despedía con la mano
🌸🌸🌸
—Y ¿ahora tú qué tienes? — oí la voz de mamá
Voltié hacía la puerta y ahí estaba, con su postura omnipotente
—¿de qué hablas? — pregunté sin ánimos
Yo estaba en mi cama acostada, Max estaba a mi lado, yo solamente lo acariciaba
—No quieres comer ni nada
—Te he dicho que no tengo hambre
—Debes de comer algo
No respondí
—Algo te hizo ese tal Chris, ¿verdad? — cuestionó — por eso andas toda deprimida
—Para tu información, Chris y yo seguimos teniendo una relación demasiado estable
—¿Entonces?
No respondí. De nuevo.
—Bueno, haz lo que quieras — pausó — Daniela y yo iremos a la estética y después de compras, ¿segura que no quieres nada?
La miré, para después cerrar los ojos.
🌸🌸🌸
No sabía que me estaba pasando. Nada me hacía sentir feliz. Al estar con Chris yo misma me permitía sentirme inferior, y no era porque Chris lo hacía así. Simplemente así me sentía a su lado.
📞
—¿Hola?
—Hola preciosa, ¿te desperté?
—Quizás, pero tranquilo, ya era hora de que despertara
—¿Tienes hambre?
—Realmente no tengo apetito
📞
—Lástima, ya traje algo de cenar — lo oí por la puerta
Di un leve brinco del susto Tan sólo hace un segundo estábamos hablando por teléfono y ahora lo tenía enfrente
—¿Cómo entraste? — pregunté mientras me tallaba los ojos
—La puerta principal estaba abierta
—¿Enserio? Quizás Rodrigo salió
—¿Cómo está la chica más hermosa? — preguntó mientras se acostaba a mi lado y le daba un beso
Yo solamente le regalé una leve risita
—¿Qué tienes para cenar? — pregunté mientras me acomodaba mejor
—Traje papas fritas y pollo frito
—Mi favorito — dije emocionada
—Lo sé cariño, por eso te lo traje — dijo mientras me daba una bolsa a mi
Lo tomé y la abrí.
Estaba cómodamente comiendo mi pollo frito cuando lo oí hablar
—¿Adelaine?
—¿Si cariño? — lo voltié a ver
—Mmm, ¿está todo bien?
Dejé de comer
—Sí...¿por qué?
—Sabes que puedes confiar en mí, yo quiero apoyarte en todo, quiero que estés feliz
—Chris...no entiendo de qué hablas
—Me topé con Juan hace horas — pausó
Chris se acomodó mejor. Para quedar un poco frente a mi
—Me preguntó por ti, que si te había hecho algo o cosas así
—¿Juan?
Asintió
—Me dijo que te ha visto algo triste últimamente, pensé que solo era idea mía pero ya veo que no. Ahora, ¿me dirás qué es lo que tienes?
—Chris, no tengo nada, lo juro
—Antes no estabas así, algo pasó o algo te hicieron, tan solo quiero que me digas, ¿Acaso es mucho?
—Ya te dije que no tengo nada
Chris resopló para después levantarse de la cama
—Se que me mientes, Adelaine
Suspiré
—No, no lo hago
—¿No confías en mí o...?
—Es que ya te dije que no tengo nada
—De repente desapareces, de repente llega tu amigo y me dice que te ha notado extraña — pausa — llego y...no sé. No sé Adelaine