Capítulo 1

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Era un niño cuando lo llevaron a ese lugar, separandole de su madre, su única familia.

—El es su nuevo hermano/compañero Uzumaki Naruto, es un doncel, tratenlo bien—ordenó el general.

—Sí, señor—el general se retiró dando una mirada de advertencia a todos.

—¿qué es un Doncel?

Su primer día en ese lugar fue horrible, como en la escuela, ser nuevo apestaba.

Y como en la ciudad o su antigua escuela.

Todos lo trataron como un bicho raro, al explicarles su situación.

Cada día se sentía más solo y extrañaba más a su madre, la única persona que lo quiere sin importar su situación, era la única persona que contaba desde que supo de su género.

Aun no se adaptaba estar en ese lugar, los entrenamientos eran muy pesados, después de una semana aún no conocía cuál era su don.

Le habían explicado que estaba en ese lugar por ser un niño especial, que tenía una habilidad, pero hasta ahora no había dado inicios de tener habilidad.

Las peleas eran una vez a la semana, como era su primera semana no lo dejaron pelear, por suerte.

Al ver las peleas se lleno de terror, la pelea era hasta que uno caiga al pisó , pero eso no era lo que le asustaba, si no el hecho de como eras las peleas de los niños que tenían mayor rango, sobretodo del número uno 0001 ese niño pelinegro captó su atención, ese chico venció a su oponente en un par de minutos sin problemas.

Lo empezó a observar desde lejos, su mirada, su aura todo era un misterio.

Un día el general ordenó la carrera por todo la isla, al no conocer el caminó el rubio se perdió.

El general ordenó que nadie podía ayudarlo, que tenía que venir por su cuenta propia.

Al día siguiente el blondo apareció en el pasillo de las habitaciones, nadie supo cómo llegó, ni el mismo Naruto.

Otro día de entrenamiento normal para todos, pero una tortura para el rubio, el general ordenó que todos escalaran la montaña más alta , todos se encontraban más arriba que el blondo, nadie notó cuando en un descuido el rubio se resbaló y cayó de la montaña, apuntó de impactar contra el piso el cuerpo del rubio se detenido en el aire.

Respiraba agitadamente y tenía la cara llena de terror, al mirar arriba se encontró con el pelinegro.

—Gracias...—dijo en shock el rubio, el pelinegro solo dejó al rubio en el piso y se fue, si decir ni una sola palabra.

La semana pasó, el día de pelear llegó, su contrincante no tuvo piedad de él, para su mala suerte le tocó con uno de rango alto.

Al final de la pelea el blondo se encontraba en mal estado, costillas rotas y ambos brazos fracturados.

Algunos sintieron lástima y otros no les importó.

El general molesto y fustrado ordenó que llamaran a la doctora Tsunade, pero el cuerpo del rubio fue rodeado por una luz naranja, todos cerraron los ojos cuando esa luz anaranjada se volvió blanca cegando a todos.

Cuando la doctora llegó  informó que el rubio ya no tenía los huesos rotos ni ninguna fractura, después fue llevado a la enfermería para que descansará.

Ese día Naruto descubrió su don, y una tres que chicas habían sentido lástima por el rubio decidieron hablar con él.

-Naruto-kun...Naruto-kun...Naruto-kun ¿es-estás bién?—al abrir los ojos se encontró con tres chicas, una pelinegra, la otra pelirosa y por última una rubia.

Mutantes [Sasunaru] Cancelada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora