•Comprender• Rusvene

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HASTA EL FONDO¡¡¡ HASTA EL FONDO¡¡¡ HASTA EL FONDO¡¡¡- Se escuchaba gritar a aquel grupo de países, quienes estaban reunidos alrededor de la gran mesa de la sala de la casa del argentino. De pie en dicha mesa se encontraba México, quien se encontraba tomando directamente de una botella que contenía una de las "guarapitas" que había preparado Venezuela, sin duda podían llegar a ser las mejores para los latinos, pero esto no significa que sean ligeras. Chile había sido quien reto al mexicano a realizar aquello, y con gusto acepto.

-NO MAMES WEY¡¡ RETO CUMPLIDO¡¡- Dijo limpiándose la boca con la manga de su camisa procediendo a levantar la mano donde tenía la botella con orgullo. Los países que se encontraban observándolo gritaron y aplaudieron, Se bajó de la mesa y arrojo la botella a quien sabe dónde, solo se escuchó como se quebraba a lo lejos, incluido de un grito de Japón quien al parecer iba pasando por donde cayó-

-Che pedazo de gil¡¡ vas a matar a Japón¡- Le grito Argentina, quien se giró asustado para ver si la japonesa estaba bien, lo cual era correcto...solo se quedó parada y muy pálida en frente de aquellos trozos de vidrio.

-Naguara' chamo, voz tais' parao' porque maleiwa es grande, esa vaina tuvo que averte dejao' ido- Hablo el veneco con tono de burla, sabía perfectamente que le había puesto a esa bebida, no por algo eran famosas entre ellos.

-Wey no soy novato¡ soy todo un experto- Dijo con orgullo apuntándose a sí mismo-

-No si perdón señor experto¡- Le respondió con burla dándole un empujón-

-Bueno me voy a ver a mi carnalito¡¡ vayan a jotear por ahí¡- Grito lo último ya estando a lo lejos perdiéndose entre la gran cantidad de países presentes-

-Creo que voy a recoger los vidrios que el boludo le lanzo a Japón, luego caen encima por pelotudos y me demandan¡- Le dijo al tricolor quien solo se limitaba a beber lo que tenía en su vaso, mirándolo con diversión- Muévala pue'- Le dijo entre risas, como si de una criada se tratase, a lo que el argentino le dio un golpe suave en el hombro como respuesta, para perderse de su vista.

-Donde se meterían los coñitos estos?- Se preguntó paseando la vista desde aquella mesa, donde solo él se encontraba sentado, en busca de sus estados a quienes no veía en ningún lado.

Mientras tanto un ruso lo observaba desde lejos, estaba con Ucrania y Bielorrusia hablando sobre cualquier trivialidad que se les ocurriera, no les estaba prestando demasiada atención ya que estaba concentrado en el veneco, no habían hablado desde la escena en el café, solamente quería que por eso no hubiera echado a perder la comodidad que tenían al estar juntos. Suspiro y bebió del vodka que tenía en su vaso, sabía que debía aclarar las cosas e iba a hacerlo, solo quedaba esperar y procurar que nadie se le acercara con malas intenciones...Sinceramente no entendía que era lo que sentía hacia él, quizá debería dejar de pensar en eso y disfrutar de la fiesta.

-Rusia, estas bien?- Le pregunto Ucrania, hacía rato que el de ushanka tenía la vista perdida en la mesa donde se encontraban, lo cual preocupo a la ucraniana- Te ves distraído.

-Sí, acaso dejaste la estufa encendida?- Le dijo Bielorrusia con tono de burla, para dar menos tensión a la situación-

-No es nada y no, no deje la estufa encendida...-Dijo rodando los ojos lo cual causo las risas entre aquellos 3 países-

-Y en que tanto piensas?- Le pregunto Bielorrusia recostándose en el espaldar de la silla- Has estado distraído desde que miraste a la sala, le debes dinero a alguien?- Ucrania rió ante aquellas palabras, sin duda parecía que estuviera preocupado por una deuda o algo por el estilo-